Capitulo 18.

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El sol comenzaba a asomarse en el horizonte cuando cierto demonio despertaba repentinamente en su cama, presa de una pesadilla y entendiendo al fin lo que se sentía experimentar tal angustia y horror. Se incorporó entre las sábanas y limpio con su manga la ligera capa de sudor en su frente, calmando su pulso y respiración. Que había pasado?..la respuesta era simple, el diabólico triángulo escarlata le había mostrado lo que él quería que pasara cuando todos descubrieran quien era realmente, quería que se quebrara al perder todo lo que ahora quería, que se quedara solo, que sufriera y quizá perdiera la cordura hasta el punto de dejarle tomar el control absoluto para realizar sus oscuros y malignos deseos y caprichos.

Abrazó sus piernas y recargó en ellas su frente, frustrado y molesto, temiendo que en algún momento eso de verdad ocurriera; después de todo, Stan casi lo mata cuando se enteró por accidente. Entonces recordó ese otro asunto...su cambio de forma y sus poderes. Tenía mucho que tratar: lidiar con ambas partes de su mente, cuidarse de sus cambios de forma, resolver lo de sus poderes, tratar de entender los sentimientos humanos y lograr que todos los Pines lo aceptarán, definitivamente no tenía tiempo para buscar novia, menos ocuparse de mantener la relación si encontraba a la adecuada. Suspiró y se levantó para vestirse, debía decirle a Mabel que no estaba disponible en esos momentos, y que iba a tardar en estarlo, ya que si resolvía algunas cosas seguro salían otros pendientes en consecuencia.

Tomo un ligero almuerzo y se dispuso a ir a la trampa de turistas de aquel pueblo, viendo su mano derecha durante buena parte del camino hasta que se decidió a confirmar sus sospechas y tronó sus dedos. Una diminuta chispa violácea fue visible por una fracción de segundo, captando toda la atención del muchacho que volvía a chasquear sus dedos hasta lograr encender un pequeño fuego celeste, apenas del tamaño que daría un fósforo, pero que significaba que...

-..puedo...regenerar..mis poderes...-murmuró para si mismo viendo aquella pequeña flama, cambiando su color con diversión, como si fuera una lámpara de arcoiris.

-Blake! Voy en un segundo! Espera ahí!-grito feliz la castaña desde su ventana del segundo piso, tan sumido estaba en sus pensamientos que no se dio cuenta de cuando llegó a la cabaña.- ...bien, vamos al pueblo, hay que empezar el recorrido para buscarte novia...Dipper vendrá con nosotros -exclamó dándole un abrazo y regalándole una sonrisa.

-n-no Mabel...ya lo pensé bien y...de momento no estoy listo para una relación, no tengo tiempo para esas cosas...-desvío la mirada un poco apenado, pues sabía que ese tipo de cosas le hacían ilusión a la chica.

-como...como que no tienes tiempo?...-cuestionó Dipper confundido, sintiendo como su única esperanza de estar con aquel muchacho se le escapaba de las manos.

-no puedo mantener una relación ahora, simplemente no tengo tiempo...necesito resolver otras cosas...de mi mundo..-aclaró al ver que su amiga ya iba a ofrecerse para ayudarle.

-...oh vamos, no debe ser tan difícil...-una idea llegó a su mente.-...aunque, si yo no puedo ayudarte quizá Dipper si pueda~♪

-que? Porque yo?..-le miro nervioso.

-pues porque tu eres mejor en todas esas cosas, cerebrito..-respondió mientras abrazaba a su gemelo.

-...bueno...su-pongo que...puedo intentarlo...-sonrio un poco al ver una oportunidad de al menos acercarse a él.

-no creo que sea buena idea, podría ser...peligroso...-intentó cortarle mientras rascaba su nuca.

-..p-por favor Blake...a-ademas podría documentar cosas para el diario...-insistió con un muy suave sonrojo que el otro no parecía notar.-...te...te prometo que ayudaré en lo que pueda...y si no puedo hacer nada tampoco estorbaré...

Un nuevo verano.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora