Un nuevo verano.

Capitulo 19.

•antes eras divertido... Quiero salir de aquí, dejame aunque sea un día!

-no, no quiero que les hagas daño.

•cuanto daño puede hacer un poco de caos?... Además, sabes que el tiempo se agota, pronto ya no quedará nada y estaremos aquí atrapados.

••n-no me molestaría quedarnos aquí

•tu callate!

-te he dicho que lo dejes tranquilo...y a mi tampoco me molesta estar aquí..

•abandonaremos nuestro reino sólo por tus impulsos y sentimentalismos?!

-sólo quiero quedarme el tiempo suficiente..

•para que?..y cuanto exactamente es "suficiente" ?..además no tenemos idea de cuánto tiempo tengamos, sabes que cada segundo cuenta y aun quieres detenerte a jugar a ser un humano inofensivo.

••no esta mal buscar nuestra felicidad en este mundo...

•vuelve a hablar y te corto la garganta! -amenazó afilando sus negras garras, viendo al celeste cerrar su ojo y temblar retrocediendo.

-te dije que lo dejes, no te atrevas a hacerle daño!...-se interpuso abrazando al ahora pequeño triángulo que se encogida en si mismo contra la figura del castaño.

•esto ya es demasiado! Ahora ni siquiera dormido abandonas esa estúpida forma?!...acepta la realidad, tu eres Bill Cipher...BILL CIPHER!!! -apretó con fuerza la camisa del contrario, cambiando su forma a la pirámide original que era realmente.

-sueltame! No soy más ese demonio, mi nombre ahora es Blake!..-le pateo empujando al escarlata que de inmediato enfureció por el mal trato a su persona.

•bien...sigue así y cuando todo esto acabe sólo será peor la caída...-fruncio el ceño al verlo tomar nuevamente su forma humana.-...por última vez...baja de tu nube de ensueño

-no me puedes dejar tranquilo?...

•al menos conserva tus colores emblema...-chasqueo los dedos y cambio al chico rubio que era en principio, de piel clara y ojos color ámbar.-...así esta mejor, al menos puedo tolerar verte...

-...bien...me quedaré así un rato...-se acerco de nuevo al celeste que se había apartado por precaución, abrazándolo como un peluche.

•oye tonto, si nuestros poderes recuperan su fuerza, yo podría tener todo el control...-una malévola mirada de diversión se reflejó en su único ojo, llamando la atención del rubio.-...quizá ahora sólo tenga control en tu subconsciente, pero pronto podré quitarte del camino...

-..que?...como te atreves?! Tu solo eres un fragmento de mi, no puedes traicionarme! Si yo no existo tu no existes!..-oculto su confusión con enojo al escucharlo.

•crees que lo eres todo, pero sin mi no eres nada...si yo no hubiera llegado tu seguirías en esa patética dimensión plana...muriendo lentamente y desapareciendo de la existencia.

Soltó al pequeño triángulo azul, estaba molesto con el rojo, simplemente era imperdonable que le hablara así. Sus colmillos crecieron y sus ojos se tornaron negros antes de abalanzarse a pelear con el otro, usando ambos sus punzantes garras como arma; lamentablemente Bill tenía las de perder, pues no se hayaba en total concentración, y los fríos comentarios de su oponente se lo dificultaban aún más. De repente el escarlata tomó control de sus movimientos haciéndolo retroceder hasta lograr sujetar sus muñecas, apretándolas con fuerza hasta casi quebrar sus huesos; Bill apretó los dientes para no dejar salir ningún ruido que delatara su dolor, no quería mostrarse débil ante ese ser. Viendo la resistencia del muchacho, el demonio más oscuro saco una tercera extremidad de uno de sus lados, dando un zarpazo a su pecho, golpe que desgarró su ropa y le dejó tres profundas y sangrantes heridas, obligándolo a retroceder bruscamente con un gesto de dolor en el rostro.