Faltaba muy poco para volver a clases y decidimos juntarnos a hacer una pijamada en mi casa. Era gracioso que aunque tuviésemos una diferencia de edad (que en ese momento era notoria), tuviésemos tantas cosas en común. Quizás era porque él tenía un alma de niño y yo un pensamiento algo mayor, con tal que nos ponía casi a la misma altura. Esa noche veríamos una película de terror que le habían recomendado y algo me incomodaba... no era precisamente la película, sino el hecho de que estaríamos en pijama... en la misma cama... Sería una tortura, pero una muy sexy.
Me enfoqué en mantener nuestra amistad y temía hacer algo descolocado, pues no quería asustarlo y perder todo lo que teníamos, y que a la vez me costó tanto conseguir. Pero el muy cabrón no me ayudaba mucho. Mi pijama era de color rojo y consistía en un pequeño short y una camiseta. Mientras que el de Julián solo era un bóxer negro y una camiseta gris que le ajustaba hermosamente. Mis ojos eran llamados magnéticamente a ver ese apetitoso bulto pero sacando fuerza inhumana evité hacerlo. Bueno.... Entre nos... Si lo hice, pero por solo un segundo mientras el no veía. Tuve una erección al instante cuando vi que se le dibujaba perfectamente el contorno del lugar donde estaba su glande cubierto de su prepucio y de la sexy circunferencia de sus huevos. Era una hermosa silueta en 3D.
Clavé mi mirada en la película y aunque sudaba por el nerviosismo intenté concentrarme. Después de un rato la tensión se disipó y parecíamos amigos comunes y silvestres, comentábamos la película y nos reímos de lo falso de las imágenes. Cuándo acabó, nos colocamos de frente y empezamos a conversar de la vida.
-Ahh. Se me olvidaba.- dijo golpeándose la frente.- Este fin de semana está de cumpleaños mi mamá y quiere que te invite, ya sabe lo cercanos que somos y te ha tomado mucho cariño.
-Aww que tierna. Está bien, ahí estaré. Le regalaré chocolates, tiene cara de que le gustan.
-A ti te gustan los chocolates.- dijo sonriendo.
-Si... Pero a toda mujer le gustan los chocolates.
-Bueno, sí. A mi mamá igual le gustan.
Luego de eso se giró y se dispuso a dormir. Miré disimuladamente entre el espacio que nos separaba y me regocijé observando la perfecta redondez de sus nalgas. Me transporté a esa tarde hermosa, cuando me empotró contra su escritorio y me cogió con tanta pasión mientras me masturbaba de esa forma placentera. Jamás lo olvidaría, me hizo sentir el rey del mundo y ahora... estaba acostado junto a él, sin poder tocarlo, solo como amigo y rememorando lo que alguna vez pasó. Las vueltas de la vida.
A la mañana siguiente desperté justo cuando Luckse ponía su ropa. Quedé gratamente sorprendido cuando vi el revote de su paquete en el momento que se subió el pantalón. Me sonrojé y cerré los ojos.
-Disculpa.- dijo.- Me tengo que ir. Mi mamá llamó y me espera en el centro.
-Ouh. Está bien. ¿Nos vemos en la tarde?
-Claro. Cuando llegue te vengo a buscar. ¿Ok?
-Oki.
Cuando se fue pude por fin liberar la erección que tenía desde la noche. No necesitaba mucha estimulación, ya que Luck era toda la inspiración que requería. Mojé un dedo y me lo enterré en el culo, lo comencé a mover desesperadamente a la vez que me masturbaba. Imaginé que era su dedo... lo imaginé a él, desnudo frente a mi... besando cada rincón de mi cuerpo y haciéndome vibrar. No tardé en llenar mi abdomen de leche, pero ese orgasmo no superaba al que tuve con él.
––– O –––
NA: este capítulo fue algo corto, lo se... Pero trataré de alargarlos más
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Byeee
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Un Amor De Verdad [Gay]
Teen FictionThomas es un Chico peculiar el cual vive en Los Angeles, California, su coraje y sinceridad destaca su personalidad. Un día normal Thom se encuentra con un joven llamado Luck que sin siquiera darse cuenta se vuelve en el Amor de su Vida. Deberán l...