CAPITULO 11 Pruebas.

1K 66 2
                                    


---Asami---

Después de despedir a mi tierno niño me quede con Kusama para que me contará la su versión de los hecho.

-¿En estos días ha tenido contacto con personas sospechosas? –pregunte.
-Pues no sabría asegurarlo puesto que por mi trabajo conozco a mucha gente y no me pongo a determinar si son malos o buenos.
-Supongo, -suspire- pero, ¿Qué lo hayan seguido? O ¿Qué le hayan pedido algo?
-Pues, -se quedó pensando- solo un par de veces sentí que me seguían de mi trabajo hasta mi departamento.
-Vaya, -lo mire- ¿De casualidad los logro ver?
-No, -sonrió a medias- tal parece que nunca saldré de aquí.
-No te desanimes, tú saldrás muy pronto, te lo aseguro, solo ten un poco de paciencia, por el momento debo irme, debo pasar por Shinobu para ir a esa agencia.
-En cuanto salga de aquí yo...
-No busque venganza, nosotros nos encargaremos de todo.
-Me pide imposibles, ¿Cómo pretende que no haga nada cuando ese infeliz quiere a mi Hiro-san? ¿Qué haría usted si quisieran arrebatarle a lo que más ama?

Me quede pensando un momento en mi querido niño, mi amado Shinobu, sí alguien intentará hacerle daño o tan siquiera apartarlo de mi lado, haría lo que fuera, hasta lo imposible para recuperarlo, sin importar por quien tengo que pasar, porque para mí Shinobu es mi vida entera y tiene que estar tranquilo y feliz.

-Te comprendo más de lo que crees. –sonreí.
-Sé que es abusar de su amabilidad, pero, ¿me haría un favor? –comento.
-Claro, lo que sea.
-¿Podría cuidar a mi Hiro-san por favor, mantenerlo a salvo hasta que yo esté a su lado? O ¿Qué alguien lo proteja?
-No te preocupes Kusama, ya le pedí a uno de mis colegas que lo acompañe en todo momento y que no se le despegue ni un momento.
-Gracias, aunque me siento celoso de que así sea. –suspiro aliviado- Lo siento soy muy posesivo con Hiro-san.
-Me lo imagine. –reí.
-Por favor, no me importa lo que ocurra conmigo, él que me interesa es mi amado, que ese imbécil no lo toque y ni se le acerque, porque yo me volvería loco.
-Lo cuidará muy bien, nadie le hará daño, tiene mi palabra. –coloque mi mano en su hombro.
-Gracias.

Me despedí de Nowaki y me dirigí hasta la oficina principal, donde se encontraban los compañeros de celda de Nowaki, los mire y ellos solo bajaron su mirada.

-¿Para que los mando llamar a mi oficina abogado Asami? –dijo el encargado.
-Quiero que lleve a estos tipos a juicio. –cruce los brazos.
-¿Ah? ¿Quién se cree para mandarme? –se quejó.
-Recuerde que tengo mucha influencia, además agredieron físicamente a mi cliente, y estos tipos tienen mucho que perder.
-Pero quien rayos es este tipejo. –gruñó uno de los tipos.
-Alguien que puede hacer que tu existencia un infierno. –lo mire.
-M-Me está amenazando. –dijo temeroso.
-Tal vez. –sonreí.
-No sé lo que pretende, pero no haré nada de lo que me pide. –me miro altanero el encargado.
-¿Seguro? –comente.
-Así es.
-Que lastima, porque no me gustaría molestar al juez Adams para que venga a ver como usted maneja el lugar, seguramente lo correrán. –tome mi celular.
-N-no es capaz.
-Pruébeme...

El hombre gruñó y les hablo a unos oficiales para que los llevarán a otra celda.

-Por favor deje a mi cliente solo en su celda, no quiero que nadie más lo moleste.
-Está bien, -suspiro- ¿Algo más?
-Nada más, muchas gracias por su atención.

Sonreí y me dirigí a la salida no sin antes acercarme al oficial que molesto a mi Shinobu.

-¿Se le ofrece algo? –me miro con burla.

Lo tome del cuello de su camisa y lo levante un poco.

-Te juro que si vuelves a tocar a mi pareja te irá mal. –gruñí.
-Y-Yo no hice nada...
-Estas advertido. –lo empuje.

Camine hasta mi auto y me subí.

Me molesta que quieran dañar a lo que amo, no permitiré que nadie lo lastime, su rostro solo debe reflejar seguridad, felicidad y armonía, es mi más grande tesoro y no permitiré que lo dañen.



---Shinobu---

-Takatsuki Shinobu, -beso mi mano- he oído hablar mucho de ti.
-¿Cómo? –me sorprendí.
-Así es, tú eres un gran abogado de Australia, es lo que cuentan mis amigos cercanos.
-¿Sus amigos me conocen?
-Claro que sí, has tomado alguno de sus casos, y en otras ocasiones llegaste a participar en ellos, y te lo agradezco.
-Etto... no tiene que agradecerme nada, en verdad. –comente.
-¿Te contrataron para tomar un caso aquí en Japón? –pregunto.
-No necesariamente, -suspire- trabajo en esta Universidad como profesor de derecho.
-Increíble, cada vez me sorprendes más Shinobu. –sonrió.
-Mmm, entonces Feilong, ¿Usted es...?
-Solo tutéame, -sonrió- yo soy un gran empresario encargado del desarrollo y planificación de nuevos edificios.
-Vaya, es muy interesante.
-¿Te parece así?
-Claro.
-Bueno Shinobu, me dio mucho gusto conocerte, espero podamos llevarnos mejor y vernos más.
-C-Claro. –trate de sonar serio.
-Cuídate mucho, -me tomo del mentón y beso mi mejilla- Nicht kyerida Presse
-¿Q-Qué? –me sonroje colocando mi mano en la mejilla.
-Lo siento, de donde vengo así nos despedimos, espero no te molestes. –bajo su mirada.
-N-No es eso, solo me sorprendió.
-Trataré de cambiar ese aspecto, -sonrió- por cierto, está es mi tarjeta.
-Gracias, -suspire- cuídate.

Feilong se subió a un auto y partió. Me quede confundido, a pesar de apenas conocernos, me trata como si supiera todo de mí, como si fuéramos amigos, aunque no me agrada del todo, es bueno pero tengo cierta sospecha.

-Shinobu-chin. –escuche la voz de Miyagi.

El caminaba hacia mí a lado de mi hermano, se veían contentos, no sé porque sentí una pequeña punzada en el corazón.

-¿Qué ocurre?
-Hermanito, ¿has acabado con el caso?
-Aún no. –suspire.
-Queríamos invitarte a cenar, -comento mi hermano y Miyagi se sorprendió- es que ambos iremos a un restaurante y pensamos en invitarte.
-Risako dile bien...
-Lo siento pero eso no se podrá. –escuche una voz detrás de mí.
-Asami, -sonreí- te has tardado.
-Lo siento mi niño, estaba viendo unos asuntos de último minuto.
-No pasa nada. –comente y él me abrazo.
-¿Quién es usted? –pregunto mi hermana sonrojada.
-Mi nombre es Asami Ryuichi un placer. –tomo la mano de mi hermana y la besó.
-Y-YO soy Takatsuki Risako, el placer es todo mío, -me miro- ¿Lo conoces?
-Sí, -me sonroje- él es mi novio.
-¿QUÉ? –gritaron Miyagi y Risako.

Asami me miro y sonrió tomando mi mano.

-Es una larga historia, pero se las contaré después, tenemos algo que hacer, así que hasta luego.
-Shinobu-chin...

Camine con Asami tomado de su mano y nos subimos en su auto. Manejo hasta la agencia, y antes de entrar me beso tiernamente.

-¿Es cierto lo que dijiste?
-¿Eh?
-Shinobu, -me miro- ¿me consideras tu novio?
-S-Sí. –dije avergonzado.
-Soy tan feliz. –me abrazo- Te voy a enamorar cada día más, te lo aseguro.

Entramos a la agencia y fuimos recibidos por un hombre rubio con ojos color marrón.

-¿En qué puedo ayudarles?
-¿Usted es Shinoda? –pregunte.
-Así es, ¿Quiénes son ustedes?
-Soy el abogado Takatsuki y él es Asami, tenemos unas preguntas que hacerle.
-¿Es del caso de Nowaki? –suspiro.
-Nosotros nunca dijimos de que caso. –sonreí de solo escuchar como solito se hecho de cabeza.
-E-Eso no...
-Vaya, -rio Asami- creo que no hay nada más que preguntar, tenemos la prueba ante nosotros.
-Ustedes no pueden probar nada. –cruzo los brazos.
-De solo verlo afirmo que mis sospechas eran verdaderas, usted metió a Nowaki a la cárcel porque no consiguió lo que quiso y pensó en que podría forzar a Hiroki, me da tanta pena.
-Maldito mocoso. –se empezó a acercar a mí.
-Cuidado con lo que hace, -dijo Asami tomando su brazo- no se le ocurra acercarse más o no respondo.
-Así que son amantes, -rio- ¿Qué diría la prensa si se entera?
-Acaso crees que me importa. –sonrió Asami- Ahora dinos por las buenas, ¿Quién firmo los pagaré?
-Se lo diré si me entregan a Hiroki.
-Eso jamás. –lo mire.
-Entonces Nowaki se quedará en la cárcel el resto de su vida.
-Eres un... -gruñí.
-No te preocupes Shinobu, me encargaré de encontrar al responsable.
-Eso jamás pasará... -rio.
-Te juro que pronto estarás tras las rejas. –lo mire.
-Inténtalo niño. –suspiro- No eres más que un mocoso jugando a ser adulto.

Sentí tanta impotencia y ganas de golpearlo pero Asami me tomo del brazo y salimos del lugar.

-Shinobu no te dejes llevar por sus palabras, tú eres muy capaz. –me abrazo.
-Gracias Asami, -susurre- sé que en este caso me estás ayudando y pones toda tu confianza en mí, y no te voy a defraudar, te lo prometo.

Daré lo mejor de mí, les mostraré a todos que no soy aquel chico empalagoso, infantil, inmaduro y caprichoso, ya no soy aquel, ahora soy el Abogado Takatsuki, y sacaré a Kusama de la cárcel para meter a ese infeliz de Shinoda...  

Sin ti... (Miyagi x Shinobu)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora