CAPITULO 30 Tras la pista del mafioso.

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---Asami---

Ya ha pasado una semana desde que los chicos se fueron, Akihito me manda mensajes diarios para decirme como están y cómo les va en Australia, yo le llamo todas las noches para escuchar su hermosa voz y repetirle cuanto lo amo.

Jamás me había sentido tan enamorado, pensé haberlo perdido el día que se fue, pero el destino es muy grande que me lo devolvió, y amándome más que antes.

Fue lo mejor que él este a lado de Shinobu, en este momento necesita a alguien en quien confiar, sentirse apoyado y que no está solo.

Me apena ver a Miyagi tan triste, aunque lo entiendo, y creo que él también entiende la situación en la que se encuentra su niño.

Aunque eso no le quite la preocupación.

Algunos de mis aliados y detectives estamos tras la pista de Fei para encarcelarlo, no debe de estar fuera de la ciudad porque todas las casetas y aeropuertos están cubiertos.

-¿Cómo van las investigaciones? –pregunto Miyagi.
-Tenemos lugares posibles dónde él pueda estar.
-Espero que lo encerremos pronto.
-Ya verás que sí Miyagi, solo ten fe.
-¿Fe? Siento que la he dejado de tener.
-Nunca la pierdas, aunque suene muy ridículo, es la que mueve a las personas.
-Supongo.
-Iré a la oficina de detectives privados, ¿Quieres ir?
-Por supuesto.
-Vamos.

Caminamos hasta mi auto y nos subimos.

-Asami.
-¿Qué ocurre?
-¿Cómo está Shinobu?
-Por lo que me ha dicho Akihito, él está más tranquilo.
-Me alegro. –suspire.
-Dale su tiempo Miyagi, él necesita su espacio para superar lo ocurrido.
-Lo sé.
-Ya verás que cuando menos lo esperes Shinobu y Akihito regresaran o...
-¿O?
-Al encerrar a Fei y sus secuaces podemos ir a Australia.
-¿Hablas enserio?
-Así es.
-Eso suena muy bien.
-Ya no te sientas triste.
-No estoy triste.
-Sí claro. –reí.
-Mejor ponme al tanto de la situación.
-Vaya, -me sorprendí- suenas como yo.
-Lo aprendí del experto.
-Lo sé. –bromee.
-A veces eres...
-¿Perfecto? ¿Honesto? ¿Eficiente?
-No sé porque me molesto en hablar contigo. –suspiro.
-Lo hago para que te distraigas un poco, no es saludable estar así.
-No puedo evitarlo.
-A Shinobu no le gustaría verte así.
-Lo extraño.
-Debemos aprender a estar sin ellos un tiempo, es por el bien de ambos.
-Lo sé, -suspiro- créeme que lo sé.
-Pues esfuérzate.
-Eso haré.

Al llegar a la oficina me encontré con el encargado Stiff, el que dirige todo el edificio de detectives y un gran amigo mío.

-¿Han encontrado algo?
-Pues solo pistas vagas.
-¿Eso es...?
-Pues algunas personas vieron el auto donde se marchó dejando a su paso algunos cadáveres.
-MALDITA SEA, DEBEMOS DETENERLO.
-Lo sabemos Asami.
-¿Lo están persiguiendo?
-Estábamos, pero ese imbécil supo esconderse.
-Debemos de seguirlo de cerca.
-Le perdimos el rastro.
-¿Dónde? –pregunte.
-En la carretera de Michigan.
-Es mejor ir Asami. –comento Miyagi
-Lo sé, pero tú te quedarás.
-¿Ah? –se quejó.
-Estos asuntos son más peligrosos y no están en tus manos.
-Somos un equipo. –me miro.
-Aun así, -suspire- no está en tus manos, solo te pondrás en peligro.
-No me importa.
-Recuerda que prometiste esperar a tu niño.
-Pero también prometí cuidarlo de todo mal.
-Fei es un poderoso mafioso.
-No me interesa.
-Miyagi, en verdad eres un pesado.
-Te ayudaré.
-Supongo que no te pude convencer.
-Y bien, ¿Qué hacemos primero?
-Ir al aeropuerto, -comento Matt- ahí hay agentes que están vigilando a sus secuaces como Tomoya.
-Ese perro... -gruñí.
-Vamos...



---Shinobu---

Han pasado dos semanas, y en todo este tiempo he acudido con el psicólogo, he notado muchos avances en el tratamiento.

-Y ¿Cómo te has sentido Takatsuki?
-Mejor, desde que he estado con usted me siento más liberado.
-En verdad me alegro que te sientas así.
-Aunque ha sido muy poco tiempo, creo que he avanzado mucho.
-¿De qué te has liberado?
-Del coraje y resentimiento que le he llegado a tener a mi hermana y a mi padre.
-¿Crees que puedes volver a charlar con ellos?
-Tal vez, -suspire- sí quiero seguir adelante debo cortar relación con ellos.
-¿Estás seguro que esa es la decisión correcta?
-Lo correcto es decirles lo que pienso y siento, -suspire- ellos sabrán después lo que quieren hacer conmigo.
-Muy bien Shinobu, vas avanzando como era esperado.
-Gracias.
-¿Pasa algo?
-¿Eh?
-Te vez decaído, ¿ocurre algo?
-Yo...
-Dilo, no lo dudes.
-Extraño a mi pareja.
-¿Pero?
-Aun siento que no es momento.
-¿Por qué no?
-YO no soy lo mejor para él.
-¿Por qué?
-Estoy sucio y seguramente él me rechazará.
-¿Por qué lo dices?
-Es que...
-¿Te ha rechazado alguna vez?
-Solo cuando me le confesé.
-¿Tienes miedo que lo haga?
-Sí.
-Pero, no me dijiste que él quería que te quedarás, que te amaba como a nadie, y que lo perdonarás y estuvieras a su lado.
-Sí.
-Entonces, ¿Por qué piensas que te va a rechazar?
-Yo...
-¿Realmente sabes cómo es tu pareja?

¿Cómo es mi pareja?

Miyagi...

Él en verdad me ama...

Yo...

-Me ama, -lo mire- sobre todas las cosas.
-¿Lo ves?
-Ahora entiendo, -sonreí- a pesar de todo lo ocurrido él me ama.
-Me alegro que te dieras cuenta Shinobu, -se levantó- ¿qué piensas ahora?
-Qué cuando regrese volveré a ser como antes.
-Muy bien, pero recuerda que tu tratamiento termina en un mes.
-Lo sé.
-Así que tomémoslo con calma.
-Gracias de nuevo.

Salí del consultorio y camine a la sala donde Akihito me esperaba.

-¿Cómo te fue? –pregunto.
-¿Me creerías si te digo que tengo ganas de abrazar a Miyagi?
-¿Enserio?
-Sí.
-Que bien Shinobu, has mejorado mucho.
-Recuerdo que casi me sacas a rastras de la casa para llevarme.
-Es que no me dejaste otra opción.
-Tienes razón. –reí.
-¿Quieres un helado?
-Solo si tú pagas.
-Cada día te transformas en mí. –bromeo.
-Eres un buen profesor.
-Era sarcasmo.
-Lo sé.

Caminamos hacia la avenida principal.

-Por fin te encuentro hermanito.
-¿Risako?

Akihito se colocó enfrente de mí.

-¿Qué quiere? –gruñó mi amigo.
-Debo hablar con mi hermano.
-Él no quiere hacerlo.
-No me interesa, Shinobu ven conmigo.

Akihito me miro y yo asentí.

-Creo que es tiempo de que hablemos. –comente.
-Claro.
-Te veré en el departamento, si necesitas algo, solo llámame.
-Gracias Akihito.
-VAMOS QUE TENGO PRISA.
-Ya te oí Risako.

Caminamos a un restaurante y entramos.

-¿Para que soy bueno?



---Fei---

Ese idiota de Asami no deja de meterse en mis negocios.

Debo terminar con él.

Maldición, necesito más tiempo.

-Jefe, ¿Qué necesita?
-Quiero que me consigas un jet y saques 5 millones de mi cuenta privada.
-Así será.

Maldición siempre Asami debe de arruinar mis negocios.

Debo pensar un poco más.

Juro que en cuanto salga de este país buscaré a esa putita de Shinobu y lo haré mi esclavo, solo para hacer enojar a Asami y al idiota que lo acompañaba.

Me vengaré...

No los dejaré ser felices.

Antes los mato.

-Mike.
-¿Sí?
-Quiero que me investigues donde se encuentra Shinobu y Akihito.
-Según lo que me dijeron es que ambos se fueron del país.
-Interesante, y ¿solo ellos?
-Así es.
-Investiga a donde fueron lo más pronto posible.
-Así será jefe.
-Por fin...

Espero tener la información pronto.

Me vengare, este será mi último movimiento.  

Sin ti... (Miyagi x Shinobu)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora