SEBASTIAN STAN
Sebastian y yo estamos frecuentandonos mucho, ya sea por mensajes, llamadas o salidas con amigos que teníamos en común.
Pero al fin se había animado a pedirme una cita.
No sabía qué ponerme ya que no me había dicho a donde iríamos, así que opte por usar un lindo vestido azul, una gabardina blanca ya que hacía frío y unos zapatos bajos.
...
Caminábamos por Central Park.
-Te ves muy hermosa.- me dijo Sebastian provocando que me sonrojara.
-Gracias, tu también te ves muy bien.- me regalo una hermosa sonrisa.
Sebastian se detuvo en un puesto de hot dog's, así que yo también lo hice.
-¿Te gustan los hot dog's?.- preguntó.
-Claro que sí, me encantan.- y no era mentira.
-Bien, entonces comeremos aquí.- sonrió.
...
-No puedo creer que te comieras 4 hot dog's.- le dije a Sebastian.
-Oh vamos, tú no te quedas atrás.- me dijo tomando mi mano mientras retomabamos nuestra caminata.- Te comiste tres.
Giré mi cabeza avergonzada y al parecer él lo notó porque se detuvo e hizo que volteara a verlo.
-Y me encanta eso.- dijo mirándome a los ojos muy serio.
Le regresé la mirada, pero un tanto confundida.
-Me encantas tú. Siempre eres tú misma. No eres como esas chicas que fingen ser alguien. No te importa lo que otros digan, podría hablar contigo por horas sin aburrirme y...- no lo dejé terminar ya que lo besé.
No hace falta decir que me correspondió el beso y que nos tuvimos que separar por falta de aire.
-También me encantas.- le contesté y ambos sonreímos.