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Cap.14 Tener suerte

Cap.14 Tener suerte

Jeni

Nada más levantarme, le di la noticia a mi madre, que había hablado con mi padre y volvería con él. Ella al principio se lo tomó mal, diciendo que no la quería, y que siempre lo prefiero a él. Pero al final terminó dando la razón de que sería lo mejor para todos. En tan solo unos días, enterarme de una verdad tan complicada y eso, me hizo darme cuenta de muchas cosas. Y ella me entendió.

Ahora me encontraba fuera de casa, esperando a Pablo para despedirme de él. El taxi estaba enfrente esperando a que esté lista.

-Al fin llegas.- digo al verlo caminar hacia mi.- Si que tardas.

El solo suelta una carcajada y se acerca.

-Lo siento, es que tuve que ayudar a mi padre con algunas cosas. Hoy están los dos muy tensos, imagino que por lo que pasó anoche.- asiento.- Esperaré tus llamadas.- dice abrazándome mientras yo sonrío.- No te olvides de tu nuevo hermano.

-Tranquilo que no, te llamaré y vendré a visitarte cuando pueda.

Nos separamos y sonreímos a la vez.

-Creo que va siendo hora de irme, si sucede algo con éstos, no dudes en avisarme.- el asiente.- Adiós.- digo al entrar en el taxi y despedirme por última con la mano, él hace lo mismo.

He tenido mucha suerte con esto.

Pablo

Vuelvo a casa y veo como mi padre se me queda mirando. Hoy se quedó en casa porque dice tener dolor de cabeza. Pero si fuera así, estaría en la cama o a saber. No estando de aquí para allá haciendo lo primero que se le venga en mente.

-¿Te has hecho muy amigo de Jeni, cierto?

Eso me hizo levantar las dos cejas sin entender a donde quería llegar con eso. Jeni era su hija y el la trataba como una muñeca o algo por el estilo.

-Somos hermanos. ¿Qué más quieres?- frunció el ceño al oírme decir eso.

-Espero que tu madre no se entere de esa relación, y ahora que ella volvió con SU padre. No quiero escuchar su nombre en esta casa. Ni mucho menos saber que te sigues relacionando con ella.

Ahora fue cuando la cagó. ¿Pero como puede decir todo esto? ¿Es que es tonto o qué?

-Eres de lo peor. Por supuesto que seguiré teniendo relación con ella. ¡Es mi hermana! ¿O se te olvidó?

-Por eso mismo, tu hermanastra.- me corrige.- Ella no tiene nada que ver con nosotros, y mucho menos contigo.

-Lo que tu digas.

No quería discutir a buenas horas de la mañana. A grandes pasos me dirigí hacia mi habitación y me encerré. Oí golpes en la puerta por parte de mi padre. Pero le dije que me dejara en paz.

Menudo capullo. Últimamente hasta yo dudo si es mi padre de verdad. Me siento tan decepcionado de mi familia. Que si fuera mayor de edad como Paula, ahora ya me hubiera ido de casa. Que suerte tiene ella. Alejarse de todo esto y escapar. Ya me gustaría a mi.

María

Se me debía de ocurrir algo ya, no podía quedarme todos estos meses aquí con Javi. Le había dicho que en dos meses me iría. Así que tenía que pensar en algo. ¿Y sí intentaba hablar con mi primo por última vez? Si le cuento todo lo que ha pasado y que quiero volver a ser la misma, se supone que me daría un voto de confianza. Pero... ¿y sí no lo hace?

Solo había una manera para averiguarlo, y es intentar hablar con él. Lo iba a llamar para quedar a tomar algo por esta zona. No le importaría venir hasta aquí. O quien sabe.