Nota del autor: Antes de leer quiero dejar en claro el significado que tiene una banda elástica en la muñeca para las personas que han lidiado con self-harming. Básicamente cuando has tenido depresión o algún otro tipo de estado el cual te orillara a lastimarte a ti mismo, parte de la recuperación empieza usando una liga elástica para que cada vez que sientas la necesidad de hacerte daño, puedas pegarte con ella para aliviar la crisis y no dejar marcas o sangre. Personalmente no considero que esté bien porque al final de cuentas sigues dañándote pero este ha sido el comienzo de muchas personas para dejar la auto lesión. Espero tú nunca experimentes eso y si lo haces o hiciste, mantente fuerte por favor y no dudes nunca en escribirme si necesitas ser escuchado.
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Era viernes nuevamente y Tyler iba en camino a encontrarse con Josh, como habían quedado anteriormente. Por alguna razón que Tyler desconocía, comenzaba a sentirse nervioso al llegar al lugar.
¿Y si se aburre?
¿Y si piensa que soy raro?
¿Qué hago si nos quedamos sin tema de conversación?
¿Vendrá solo o traerá a alguien?
¿Y si lo olvidó?En seguida las preguntas del joven se vieron interrumpidas por una voz y una mano en su hombro que sacó al chico de sus pensamientos.
-Tyler-era Josh quien estaba tras de él-¿Tienes mucho esperando? Salí de inmediato del trabajo, estábamos en una de esas juntas mensuales y tuve que esperar al chico que me cubriría. Lo siento, no quería hacerte esperar, yo...
-Hey Josh. No te preocupes ¿Todo bien en tu trabajo?
Josh asintió.
-¿Chris se quedó dormido otra vez en junta?-Preguntó riendo al recordar una anécdota que le había contado Josh días antes.
-En realidad no. De hecho, hoy Chris no fue a trabajar.
¿Cómo que no fue a trabajar? Él dijo que tenía un compromiso...no tiene novia, jamás cambiaría la tradición de los viernes por salir con otros amigos, tampoco es el más sociable. ¿Alguna boda o evento familiar? Nos habría dicho...¿Qué está haciendo si no es relacionado al trabajo?
-Fue a buscar información para la universidad.-le sacó Josh de su teoría.
Tyler se quedó helado. Chris estaba en todo su derecho de querer estudiar una carrera pero eso conllevaría a tener que dejar la banda y echar atrás el plan de hacer un tour por Estados Unidos.
-¿Tyler? ¿Estás bien?
-Sí, es sólo que...bah, no importa.-Dijo Tyler al tomar la liga elástica que tenía siempre en su muñeca, y azotarla contra sí mismo. Josh miró extrañado.
-¿Puedo preguntar qué acaba de pasar? Te has puesto serio de un momento a otro, puedo notarlo.
-No sabía que Chris había decidido entrar a la universidad. Él está en todo su derecho, claro. Pero es triste pensar que la banda va a terminar. Es sólo que...la música es algo importante para mi, ¿sabes?
-Te entiendo. Siempre me gustó la música y anhelaba tocar la batería. Pero mis padres son muy estrictos, no me dejaban escuchar rock, el rap incluso el pop también eran "mala influencia", no se diga nada acerca del metal.
-Satanismo puro ante los ojos de los padres.
Josh rió.
-Afortunadamente mi abuelo me enseñó buena música de jazz, y al crecer tuve el privilegio de tener privacidad y la libertad de escuchar lo que quería. Recuerdo cuando lleve mi primera batería a casa, mi mamá casi enloquece. Incluso me hicieron firmar un contrato con un montón de reglas respecto a las horas en las que ensayaría, para evitar estar haciendo "ruido todo el día".
A Tyler le dio ternura el hecho, encontraba adorable como Josh parecía ser disciplinado con su instrumento a pesar de todo.
-Pero hey, Tyler, no te preocupes. La banda no tiene que terminar, puedes encontrar un suplente.
-O dos...Nick se ha encargado de dejarme bien claro que él no piensa dejar a un lado sus estudios por la música.
-¿Y tú sí?-preguntó intrigado.
-Claro que sí.-respondió en seguida Tyler-Ya he rechazado una oferta de beca deportiva en una universidad. Simplemente no pude aceptarlo. La música me salvó la vida.
Josh quedó confundido al escuchar eso último. No parecía que Tyler lo dijera en sentido figurado o que se refiriera a que fue salvado de haber estudiado algo que no le gustaba. Parecía genuinamente que el castaño se refería a que de hecho la música lo salvó de morir.
Y así había sido.
Josh miro a Tyler de pies a cabeza en busca de una posible pista o cicatriz que le diera una respuesta. Pero en su lugar sólo pudo notar como Tyler tenía siempre esa liga elástica consigo. No tardó en llegar a la conclusión real.
-¿Tyler?
-¿Sí?
-¿Puedo abrazarte?
-Uh-Tyler no pudo terminar de procesar la pregunta porque ya tenía al muchacho dándole un abrazo.
-Lo siento.
-¿Por qué?-Tyler se encontraba increíblemente confundido.
-Porque no mereces nada de lo malo que te haya pasado.-Se separó de él-Eres diferente. Piensas diferente y puedo ver que también sientes diferente que el resto de la gente. Eres muy talentoso y, quiero que sepas, que si alguna vez necesitas mi ayuda o simplemente desahogarte con alguien, prometo estar ahí.
Tyler no sabía qué contestar. Hace unos minutos estaba muerto de nervios, luego feliz, luego decepcionado, y después tenía a Josh Dun, un sujeto que hace una semana llegó de la nada a su vida, abrazándolo y diciéndole justamente lo que necesitaba escuchar.
Se limitó a agradecer a Josh y continuaron toda la tarde hablando sobre su perspectiva de la vida, música, comida y la economía del país.
A Tyler le encantaba hablar con Josh, era como si siempre supiera de lo que estaba hablando, como si pensara o sintiera lo mismo que él respecto a muchos ámbitos. Los chicos habían hecho click al instante y ambos sabían que su relación se convertiría en algo grande.
-Gracias por brindarme de tu tiempo, Josh. Esta tarde fue increíble.-dijo el castaño antes de darse cuenta de lo "quinceañera enamorada" que había sonado eso.-Es decir, fue divertido hablar y eso, dude.
Josh rió, se dio cuenta del pobre intento de Tyler por sonar "cool" y esconder su sensibilidad anteriormente expuesta.
-Gracias a ti, Tyler. Ha sido una buena tarde. Te veo pronto, espero.
-Así será. Cuídate, Josh.
-También tú.-contestó el chico mientras se alejaba-Y Tyler.
-¿Sí?
-Tira esa maldita liga, no la necesitas.-dijo antes de voltearse por completo y seguir su camino.