10. No hay problema

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Actuar por instinto siempre trae algo bueno aunque no sea inmediato.

—¿Entonces sí podemos hablar? —preguntó Troy con una sonrisa mientras caminaban a su auto.

—Creo que es demasiado claro ahora. —Ally simplemente sonrió. Esperaba que lo que sea que Troy quisiera decir no les tomara tanto tiempo—. ¿Qué es lo que quieres decirme?

—Antes de que pudiera decirte algo más, quiero pedirte una disculpa por lo de la fiesta, no debí dejarte sola. —Troy miraba serio a Ally.

Tal vez no debió pero eso significaba que Ally jamás hubiese buscado a Normani en la fiesta, y es cierto que desde entonces algo había comenzado a ser diferente, pero no era en mala forma. Porque todo lo que sentían lejos de hacerles sentir mal, era algo que las mantenían bien... que las mantenía más cerca.

—No hay problema con eso Troy. —Ally negó y Troy se detuvo abrirle la puerta del auto para que la chica entrara—. No tienes que preocuparte, no fue tan grave.

—Oh claro que lo fue. —Troy rió sarcásticamente y se quedó mirando a Ally por la ventana desde fuera del auto—. Si no lo fuera todo estaría bien. Menos tenso.

—¿Y cómo sabes que no está bien? —Ally esperó a que Troy entrara al auto para escuchar su respuesta.

—Se que no lo está porque Normani me mira como si quiera matarme, todo el tiempo. —Ally sonrió al saber algo que no había notado. Era de la misma manera que ella reaccionaba cuando escuchaba algo de Thomas—. Y por eso quiero reparar todo. ¿Qué dices si salimos?

Ally se quedó quieta dejando de ponerse el cinturón de seguridad. ¿Troy la estaba invitando a salir realmente? Siempre pensó querer que eso pasara y sin duda aceptaría pero ahora... Ella no estaba segura si en verdad eso es lo que quería.

—¿Salir a donde?

—A cualquier parte que quieras Ally, tú solo tienes que pedírmelo y ahí estaremos. —Troy sonrió ante la posibilidad de que Ally aceptara. Lentamente acercó su mano de Ally y la tomó un momento—. Prometo que esta vez todo saldrá bien.

Ally suspiró. No sentía nada cuando Troy le tomaba de la mano, ya no le importaba si era una muestra de cariño pero ya no sentía emoción cuando eso pasaba. Respiró profundo una vez más. No sabía si debía responder ahora y tampoco cual sería esa respuesta. Tenía dudas en ese momento, muchas dudas.

—¿Me dejas pensarlo? —Ally lentamente quitó su mano—. Te llamaré si quieres, y después... ya veremos.

—Oh... de acuerdo, sí. Está bien. —el muchacho asintió rápidamente—. Estaré esperando la llamada, y recuerda... Por si realmente tienes una duda, tú me gustas. Me gustas de verdad.

Ally solamente asintió on una sonrisa sobre sus labios, eso hubiese sido mejor que pasara antes cuando en verdad deseaba que asi fuera, cuando casi soñaba que eso ocurriera porque ahora todo era diferente gracias a Normani, quiera o no quiera aceptarlo.

—Ahora... ¿Me llevas a Sensei por favor? —fue lo único que a Ally se le ocurrió preguntar—. Las chicas y yo comeremos sushi.

—Bien. Pero antes pasaremos a un lugar que te va a gustar.

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Secreto y PeligrosoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora