Panic Epilogue: "I don't love you".

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-Te agradesco que hayas venido Luhan, aun cuando te invite ayer por la noche- exclamó Sehun retirando mi silla para que yo pudiera sentarme en ella. Yo no tuve reparos en sentarme agradeciendo aquel extraño gesto de la inexistente educación de Oh Sehun.

Por extraño que paresca, me sentía lo suficientemente arrinconado en ese restaurante que mostraba con orgullo sus sillas hechas en roble, sus mesas con acabados en oro y su increíble cocina francesa de la que no entendía un pito en la carta (el francés siempre fue mi enemigo, mientras el alemán se me daba como mucha facilidad). De todas formas, estar sentado con Sehun era lo que más me incomodaba, hacía mucho tiempo que no lo veía y me sentía como un estupido al ver cuánto había adorado a ese hombre en el pasado, y solo dios sabe que no me morí de amor solo por qué Jong In estuvo a mi lado.

Sehun ha cambia un poco, se le ve un tanto cansado y más delgado pero sigue siendo igual de guapo que hace dos años, es extraño pero me sentía como si estuviese sentado con un extraño.

Bueno, es que en dos años han pasado muchas cosas...

Como...

Mi boda...

ejem...

El nacimiento de mi hijo...

Y...

Mi encuentro con Kris...

Si eso también ocurrió...

Bueno...

¡MALDITO KIM JONG IN ESTOS DOS AÑOS FUERON SOLO SEXO DURO CONTIGO!

Me pregunto cómo es posible que Kyungsoo haya engañado a un hombre que... Sabe mover tan bien ese músculo masculino que tiene... Dios... Solo pensar como esos labios lujuriosos recorren todo mi cuerpo con devoción y como esas manos acarician cada parte que tocan... O como ese miembro me penetra con sensualidad y fuerza mientras susurra en mi oído como me va a hacer el amor y... Dios... ese hombre es el cuerpo del deseo, es la reencarnación de Eros, él es...

Simplemente mi perdición.

-¿Luhan?- preguntó Sehun trayéndome de nuevo al mundo de los mortales, note que mientras mi mente estaba divagando con el cuerpo de mi esposo, Sehun se había sentado en la mesa y había pedido la cena para los dos... Madre Santa es todo un manipulador.

-Perdona estaba un poco distraído con... Cosas sin importancia- para Sehun mis palabras fueron suficientes así que simplemente la conversación siguió su rumbo normal, o eso era lo que creía yo.

-Se te ve muy enamorado Luhan- ¡Ven! Oh Sehun y sus comentarios fuera de lugar.

-Mi esposo merece mi amor ¿no lo crees?-

-Espero que ese idiota de Jong In entienda la joya que posee en sus manos-

-Puedo asegurarte que lo entiende, él si me ama- exclamé con rabia.

-Y tu, ¿Lo amas?-

¿Que si yo amo a mi esposo?

Pregunta estupida que se resolvió hace demasiado tiempo. Se resolvió por qué Jong In sabe cómo hacer que te enamores de él, no como tu sopengo de mierda.

Pero ya que Sehun desea que se lo diga de frente, lo haré.

¡Sufre hijo de perra!

-Lo amo más que a mi vida- dije con total seguridad.

-Me alegro- exclamó con tranquilidad.

Y así damas y caballeros fue que experimente el momento más incomodo de mi jodida vida...

Como te odio Oh Sehun, por ser un bastardo y por decidir qué la conversación debía terminar justo cuando dije clara y abiertamente que amaba a mi esposo... Perro sarnoso.

La tensión en la mesa se disipo en el momento en que el camarero llego con la comida... Sehun me pidió mariscos... Mis peores enemigos después del francés... ¿Cómo es que se le ocurrió traerme a un restaurante francés caro y hacerme comer mariscos? ¿Lo habrá echo de aposta?

Dejando de lado mi odio infernal empecé a comer, pensaba comer hasta que mi estomago deseara vomitar. De preferencia vomitar en la camisa blanca de Sehun o en su calzado importado.

-Luhan, quiero que sepas que desde hace dos años he estado en régimen, no he tenido sexo, he sido buen padre, he trabajado como un maniático y he tratado con respeto a Kyungsoo- exclamó dejando su plato a un lado de la mesa. No sé cómo lo hizo pero comió a la velocidad de la luz. La poca comida que reposaba en su plato no tendría el placer de ser digerido por su tracto digestivo.

-Que bien por ti, espero que dones dinero a los pobres y que plantes un árbol en el futuro- dije sarcásticamente mientras acababa mi plato de mariscos, a Sehun no le gusto mi respuesta por lo que pude notar.

-Luhan estoy hablando en serio- agarro mis manos entre las suyas y continuó -Luhan vuelve conmigo, se solamente mío. Esta vez las cosas serán diferentes te lo juro ¡te juro que de verdad te amo!- gritó y todas la personas del restaurante nos voltearon ver... Dios que episodio tan bochornoso... Aunque... La vez que estaba desnudo en aquel parque... Si esa fue peor.

-Yo también hablo en serio Sehun- aparte sus manos de la mías y agarre con suficiente violencia su corbata, atrayéndolo a mí con fuerza -si se te ocurre que dejaré a mi ardiente esposo y a mi amado hijo por un pipi chiquito como tú, puedo decirte que estás muy equivocado hijo de puta- grite con rabia, agarre mis cosas y salí dramáticamente del restaurante bajo la atenta mirada de todos los comensales y Sehun.

Ignoré a quien me mirara por qué al fin y al cabo nunca me sentí tan libre como me siento ahora.

Ahora que me siento bendecido de que Sehun no me amase y de que Jong in me diera esperanza de amar nuevamente.

When You... Don't Love MeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora