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Los amigos se miraron, no estaban dispuestos a cambiar el tema, ellos querían ese. Todos salieron de la escuela y regresaron a su casa. Alec colocó su mochila en la cama, encendió la computadora y empezó a buscar más información para complementar el trabajo. Puso varias páginas web, la mayoría de ellas tenía lo mismo que la anterior. Poco después un mensaje de Merci le llegó. Lo leyó. 

Iremos a tomar fotografías 

¿Nos acompañas? 

Respondió con un sí. Sacó de un cajón una cámara profesional. Buscó una sudadera en su guardarropa, sacó de él una color rojo, se la puso y bajo. Pidió permiso a su madre de salir, ella amablemente lo dejo salir pero solo que no llegará muy tarde a casa. Salió de su casa justo a las tres de tarde. Tomó un taxi, dio la dirección y emprendió el viaje. El día estaba cambiando, la temperatura disminuía y el frío se podía sentir. Llegó a su destino a las 4:15 p.m. ya que el trayecto fue largo. Bajó del taxi, pagó y se orilló. Buscó a los demás, pero no había nadie. "Ya han de estar en el reclusorio" pensó. Empezó a caminar hacía el lugar. Mientras se acercaba observo a una persona, alta pero no más que él, de cabello rubio y corto, sin duda era Merci. Llevaba un pantalón negro, ajustado y una chaqueta de cuero color café. Caminó hacía ella que estaba a unos 3 kilómetros del reclusorio, al parecer lo estaba examinando. 

-Hola -la saludo. 

-¡Hey! -le respondió. 

Merci señaló su cámara, que colgaba del cuello. 

-Para apoyar con las fotos -explicó él alzándola. 

Ella dio vuelta a su bolsillo de dónde sacó una cámara, también profesional, no más grande que la de Alec, de marca  Canon,  aunque la de él era Nikon. 

-Traje la mía -se la dio. -Bueno, en teoría es de mi hermano, se la quité -. Ella rió. 

-¿Y los demás? -preguntó mientras examinaba la cámara. -¿No han llegado? 

Merci se disgusto al ver que Alec no decía nada sobre ella así que se la arrebató y él quedo confundido. 

-No -dijo. -Son unas miedosas. 

Empezó a tomar fotografías, del cielo, de la entrada, del bosque, del suelo, de las paredes, de las esquinas, en diferentes ángulos, giraba, rodaba, se subía a las rocas. Alec desabrochó su cámara y empezó a tomar fotos. Después de unas diez fotografías las empezó a revisar, todas estaban bien, ángulos perfectos, pero en la novena foto se percató de que alguien los observaba por la ventana del cuarto piso. La figura era borrosa, no se podía distinguir bien, con algo de blanco. Miró la ventana y no había nada, así que tomó otra foto. 

-Mira -le dijo Merci. -Ahí vienen. 

Las cuatro venían juntas, Wendy venía tomada de la mano de Nohemi. Selene y Karen parecían no poder caminar por el lugar, como si trajeran zapatillas de tacón. De lejos Wendy parecía una volita de bolos y sus amigas a su alrededor parecían los pinos. 

-¡Hey! -gritó Meri. -Miedosas -rió al igual que Alec. -Pensamos que nunca vendrían. 

Wendy se detuvo a su lado, no podía hablar, empezó a inhalar y a exhalar. 

-No manches -respondió después de recuperar el aliento. -No sabía como llegar a si que les pedí que vinieran conmigo. 

-Bien -dijo Nohemi. -¿Dónde comenzamos? 

Ella sacó de una mochila negra, grande, una cámara. 

-Nosotros ya hemos tomado varías de este frente -explicó Alec. -Falta la parte trasera y los lados. 

-¿Quién me acompaña? -preguntó Nohemi.

Nadie dijo nada, nadie quería acompañarla a la parte trasera, daba miedo y además estaba lejos. Molesta, tomó a Karen de la muñeca derecha y la arrastró para que le hiciera compañía. Alec empezó a revisar la fotografía, pero en esta vez no había nada en la ventana. Puso cara de confusión y bufó. Wendy se percato de la reacción de él así que le pregunto mientras Alec veía la cámara. 

-¿Qué sucede? 

-Nada -respondió él. 

"Error de cámara" pensó. Las nubes se tiñeron de gris, mientras se acomodaban en el cielo, la temperatura descendía más rápido.  

-Tenemos que terminar antes de que se suelte la tormenta -chilló Merci varios metros lejos de ellos. 

-Oye -susurró Selene. -Traigo un poco más de información. 

De la mochila de Nohemi sacó varias hojas, se las dio a Alec y las leyó. 

"TRÁGICO ACCIDENTE EN LA CLAUSURA DEL RECLUSORIO SALEMG"  

... La noche anterior se trasladaban los presos a otro reclusorio debido aproblemas que en el que están presenta. Informes dicen que la tragedia sucedió a las 12:02 de la noche. Siete personas fueron encontradas muertas,tal parece que fueron asesinados, unos metros después se encontróotro cadáver del cual no se ha dado información. El asesino deestos pobres hombres no se ha encontrado pero tampoco hay cosas relevantesde que el atacante haya entrado o salido del instituto de rehenes... 

 La información era nueva, nadie la conocía, pero habías más. Un trueno hizo que todos se asustaran, seguido un rayo cayó. Todo se estaba poniendo oscuro, por las nubes. Después de unos segundo otro rayo cayó, pero cerca del lugar. De la nada el agua empezó a caerles, la lluvia empezó a caer poco a poco.

-Merci -gritó Alec. -Hay que irnos.

Ya no tenían tiempo de marcharse del lugar y conseguir un taxi, la tormenta se había desatado sobre ellos.

-No hay de otra -dijo Wendy nerviosa.

-Hay que entrar -complemento Selene. 

Los cuatro empezaron a correr hacía el reclusorio para cubrirse del agua. Llegaron a la puerta, Alec le dio una patada que la doblo más y la tiró. Entraron al oscuro lugar, segundos después llegaron Nohemi y Karen  escurriendo, pero la cámara no se salvó, terminó mojada. Caía el agua como si fuera un huracán, el aire corría con fuerza y hacía frío. Un ruido fuerte llamó la atención de los amigos. Los seis voltearon en dirección al pasillo. 

-¿Ahora qué? -preguntó Karen. 

-A lo que venimos -respondió Merci. -No hay que desaprovechar el momento. 

Alec miró las cámaras, primero la de su amiga y luego la de él. 

-Adelante. 

Todos emprendieron la marcha sin vuelta atrás. 

EXPEDIENTE PESADILLADonde viven las historias. Descúbrelo ahora