En Tu Piel; Jacob Black

Luz de luna

NARRA _______:
Ayudé a Esme que estaba cocinando, mientras Jacob fue con Edward a poner la mesa y buscar algunas sillas de más, ya que mi hermanito había anunciado que una chica iba a venir a cenar con nosotros. Rosalie, quien no tardó en meterse donde no la llaman, comenzó a hablar en voz muy alta desde la cocina, donde estaba sentada en la encimera mientras nos veía cocinar.

-Pues seguro que es otra humana -hizo una pausa para reirse- Y a demás buscona. Bueno, como todas... -miró a Ed con odio- Yo siempre odié a Bella. Está mejor así...

-Cállate Rosalie -me miró sorprendida al verme reaccionar- Vamos, todos sabemos que tenías unos evidentes celos de Bella, porque ella era, es y siempre será mas guapa y amable de lo que tu podrías llegar a ser.

-Ahora cierra la boca y compórtate como una adulta frente a la nueva pareja de Edward -me ayudó Alice a cerrarle la boca a Rosalie.

Ella y Emmet decidieron irse a sus respectivas casas, porque no querían ver por el momento a ningún humano más aquí. Aunque Emmet se llevó bien con Bella hasta el punto de quererla como a una hermana, ese es el motivo por el cual prefería irse, no podía hacerse a la idea de que Ed intentase suplantar a Bella. Realmente el no quería eso, de hecho lo único que intentaba era sacarla de su cabeza y poder rehacer su vida y ser feliz de nuevo, y eso nos tendría que alegrar a todos, tanto si nos gusta, como si no.
Entre Alice, Jacob y yo, retiramos los platos y las sillas que correspondían a Emmet, Rosalie, Alice y Jace, porque éstos dos últimos tenían que hacer un viaje muy importante para visitar a la familia de Jace, ya que su madre biológica (humana) se encontraba en su lecho de muerte tras haber tenido una grave enfermedad.
Al parecer nos habíamos quedado muy pocos, más en concreto Carlisle, Esme, Edward, Jacob y yo, bueno, y la novia de Ed, que parecía estar retrasándose mucho,y eso hacía a mi hermano ponerse cada vez más y más nervioso... Dieron las 9 de la noche, y finalmente ella apareció. Mi hermano estaba a punto de un ataque de ansiedad, así que, prefirió quedarse sentado junto a los demás, mientras Esme y yo fuimos a abrir la puerta. Cuando ésta se encontraba abierta, vimos a una hermosa chica, jóven, de cabello negro, baja estatura, y con una sonrisa enorme, que a la vez, expresaba un gesto de disculpa por haber llegado tarde.

-Buenas noches, me llamo Anne, encantada de conoceros -nos dio a Esme y a mi dos besos.

-Yo soy _______, la hermana pequeña de Ed, y ella Esme, nuestra madre -la invitamos a pasar.

Antes de cerrar la puerta, pude darme cuenta de que hoy había luna llena y por ende hoy no podía pasar nada bueno... Cuándo estábamos todos sentados y preparados para cenar, mi hermano, que aún seguía temblando como si fuese un flan, dijo que esperaremos un poco, ya que tenía que subir a su cuarto a coger una cosa. Mientras Edward estaba arriba, Esme y yo aprovechamos para conocer un poco más a Anne, y parece ser que es una chica sana, deportista, que le gusta la música, dibujar y leer. La verdad es que es la indicada para mi hermano, pero no me da buena espina. Aunque lo importante va a ser lo que piense cuando Edward le diga lo que somos en realidad, porque Bella fue la única que pudo aceptarlo, e incluso pudo convertirse en una de nosotros.
Por fin bajó mi hermano con una cajita en las manos, y si es lo que yo pienso se la va a cargar...

-Esto... Anne Wellers, ¿me harías el hombre más feliz del mundo casándote conmigo? -por mi cabeza pasó la frase "te juro que te mato" cuando escuché esa frase.

-Edward Cullen -interrumpí a la chica- No la conoces prácticamente de nada. No puedes casarte con ella.

-_______, hija deja a Ed ser feliz -Carlisle me miró suplicante.

-¿Sabes qué Anne? -ella me miró, y me di cuenta de que sus ojos se tornaron negros- Nosotros so... mos -y ahí fue cuando me desmayé.

Cuando me desperté, me di cuenta de que no estaba en mi cuarto, si no que estaba en el cuarto de Jake. ¿Como había llegado ahí? Ni idea sinceramente, pero supongo que me habrá traído él para que no le arrancase la cabeza a esa chica al despertarme. En un par de minutos entro Jacob y me explico todo lo que había pasado después de mi "desmayo repentino", que obviamente, sabía que lo había causado Anne. Me dijo que me subieron a mi cuarto y siguieron cenando tranquilamente, mientras que Anne les contaba cosas más relevantes que le habían ocurrido a lo largo de su vida. Al final de la cena cuando, Jacob ya se iba a casa, Esme y Carlisle le dijeron que sería mejor que me llevase con él, ya que Anne tenía todas las intenciones de quedarse a dormir con Edward.
Aprovechando que estaba en casa de los Black decidí quedarme a comer, ya que Leah prepara un estofado buenísimo, y tampoco es que tuviese ganas de regresar a casa para verle la cara a esa bruja que se hace pasar por la novia de mi hermano. Realmente no se que es, una bruja, otro tipo raro de vampiro... No lo entiendo, nunca había visto esos ojos, ni siquiera en los libros de Carlisle sobre criaturas extrañas. Y como parece ser que Esme, Carlisle y Edward la tienen tanto cariño, tendré que descubrir lo que es junto a Jacob, que es el único que me apoya porque no se fía de ella y dice que transmite una aura rara.
Al terminar de comer, me despedí de la familia de Jake y ambos volvimos a mi casa en una vieja moto que él mismo había restaurado en su garaje. Después de varios fallos del motor en medio de la carretera, conseguimos llegar a casa sanos y salvos. Bueno, la moto ya no funcionaba, y no es que le faltase algo, sino que el motor decidió morirse del todo.
Antes de entrar pude observar que la bruja seguía dentro, ya que tenía un olor particular, muy dulce y desagradable para mí. Cuándo entramos a casa no le dije nada a nadie, ni ellos a mí tampoco, se nos quedaron mirando mientras que Jake y yo subíamos a mi cuarto para buscar libros sobre criaturas extrañas.
Media hora después, escuché unos pasos subir por la escalera y ese asqueroso olor a miles de caramelos atravesando mi puerta. Escondimos los libros justo antes de que entrase, (sin llamar por cierto).

- Hola linda, quería disculparme por lo que pasó ayer, no fue mi intención causarte un desmayo. -se sentó en la cama mientras sonreía burlona.

- No te disculpes. No nos caes bien ni nosotros a ti tampoco -Jacob se levantó del suelo.

- Vamos a descubrir qué eres y que te traes entre manos... -le tembló un poco la voz al final y cuando la miré a ella tenía los ojos negros.

- Ni te atrevas -desvió la mirada hacia mi y acto seguido se fue.

Muchas gracias por tanto apoyo que esta recibiendo esta historia, ultimamente me es muy difícil actualizar por distintos problemas, pero todos vosotros me ayudáis día a día. Por cierto, feliz navidad amores ♡