Mi primer dia en mi nuevo trabajo, recien cumpli 18 años, estoy muy nerviosa, pero esto me ayudara para que mi madre se recupere.
Vivo dentro de la muralla Shina, apartir de hoy trabajo en un restaurante y bar, como camarera, el uniforme de trabajo no era muy revelador y la paga es buena.
Llegue mi jefa me estaba esperando -Llegas tarde por 2 minutos- mi primera impresión de ella es que no es nada amable.
-Me disculpo por eso señorita Swan -le dije inclinando un poco.
-Bien ya traes el uniforme asi que te mostraré, primero tienes que llevar agua a los clientes, junto con el menú, esperas hasta que decidan y anotas su orden, la llevas a el mostrador y la colocas ahi, tienes que anotar el número de mesa y lo que ordenaron, luego tendrás que llevarles lo que ordenaron, siempre tienes que ser amable y mostrarles una sonrisa a los clientes, este es un establecimiento importante y no dejare que una campesina lo vaya arruinar- me miro con algo de enojo, no le tome importancia y asentí, ella no me intimida.
-Muy bien, comprendí todo, si me disculpa señorita Swan comenzare con mi trabajo- ella me miro aun mas molesta porque no le respondí. Llegaron unos clientes, los atendí como me habían dicho era muy fácil, pero un poco incómodo, los hombres me miraban mucho.
El dia fue un tanto aburrido, la señorita Swan no tenía nada de qué quejarse pero aun así lo hacía. Otra chica había llegado se llamaba Lucy era muy amable y atenta, era un encanto de chica pero tenía una gran herida en la cara, la mitad de su cara estaba deformada por una larga cicatriz, ella no decía nada de eso y se sentía mal por que nuestra jefa la miraba con repulsión, a mi no me desagrada es más se me hacia muy linda y esa cicatriz no la opacaba.
Al salir me quite el uniforme y me despedí de Lucy, subí a mi caballo y cabalgue a casa.
-Mamá ya llegue- dije entrando a su habitación-
-Que bueno hijita que llegaste con bien- dijo con una débil sonrisa.
-Gracias mamá ¿tienes hambre?...te preparare una rica cena ya verás- le dije animada me levante de su cama y me fui a la cocina, prepare una sopa de verduras, servir para ambas y las lleve a su habitación, mi madre tenía una rara enfermedad que no le permitía ni siquiera levantarse de la cama.
-Gracias cariño, ¿como te fue en el trabajo? -
