Capítulo:02

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Al sonar el despertador Yifan salió de la cama muy animado, a pesar de ser invierno y estar a -5°C se abrigó muy bien, preparo chocolate y lo vertió en un termo para mantenerlo caliente, cogió su cámara y salio al parque cercano a su casa, en el transcurso camino al lugar compró un pan que serviría como su desayuno junto a lo antes preparado.

Tenía que aprovechar el clima frío para beneficio de sus fotos y poder ser el mejor de los participantes y así obtener el bono que ofrecían de premio al mejor fotógrafo en el concurso y es que solo así podría cumplir su sueño y lograr tener su propio estudio fotográfico, no se conformaba con solo ser un empleado del periódico, Yifan tenía otras aspiraciones.

Al llegar al parque y después de caminar por los alrededores buscando el lugar indicado para fotografiar tomo su cámara y comenzó a disparar en cientos de lugares capturando diversas escenas desde las ardillas con la cola blanca por la nieve, bancas con hielos en los bordes, arboles con capas blancas en sus ramas y los rayos del sol que salían de entre ellos. Yifan estaba fascinado con el material que había recaudado en tan corto tiempo, en definitiva no era su estación favorita, no toleraba el frío pero por conseguir el primer lugar era capas de soportar hasta el más crudo invierno.

Al sentir su pan duro por estar expuesto al frío lo tiro ala basura bebiendo solo su chocolate que gracias al termo se había mantenido caliente. Al terminarlo merodeo un poco por los alrededores de aquel solitario parque escuchando cerca un par de sollozos los cuales lograron  captar su atención por completo, los copos de nieve estaban cayendo por lo que tenia que regresar a casa pero la curiosidad de querer saber del ser lamentándose invadió su persona, alistando su cámara y aproximándose al sitio, logro divisar a un hombre joven sentado en una fría banca con su vestimenta y cabellera originalmente negra pero con una capa de nieve sobre ellos, de fondo tenía arboles en puro tronco por el clima helado.
Cada que el chico sollozaba se lograba ver como sacaba vaho por su boca por lo que no se resistió y ajustó su lente para hacer un acercamiento, logro captar como  traviesas lágrimas eran deslizadas por sus mejillas las cuales se encontraban rojizas por el frío al igual que su nariz, se mantuvo capturando cada ángulo del chico sirviendole mucho de ayuda los copos de nieve que acariciaban su piel, el fotografiar animales era lindo pero capturar personas era mucho mejor, lograría transmitir el sufrimiento del chico y el paisaje era perfecto.

Se fue acercando poco a poco para seguir inmortalizado al joven con su cámara quedando más que satisfecho con lo que hacia; sin darse cuenta el sonido de su fiel compañera lo delató consiguiendo que el hombre limpiara su rostro y se pusiera de pie, era alto pero no mas que el, en sus manos sostenía una hoja arrugada por las mismas, tenía sus ojos de un rojo intenso por la irritación y sus labios eran de color morado por el frío.

Al intentar saber la causa de su angustia el chico se alejó molesto, alguien joven sufriría por materias reprobadas en la Universidad o por una ruptura amorosa, mas sin embargo el el chico logró transmitirle verdadera angustia, pensó en ir tras él e insistir pero comprendía que la gente necesita su propio espacio, también el hecho de ser capturado tomándole fotos lo haría quedar como un acosador y provocaría miedo, total en un lugar con demasiada población podría encontrar a más personas con quien acabar su royo de cámara y si lo pensaba bien, seria cruel beneficiarse del sufrimiento ajeno.




—Felicidades Yifan, siempre logras complacerme, no importa lo que muestres siempre logras transmitir lo que capturas en cada escena.

—Gracias jefe ¿usted cree que pueda ganar esta etapa y pasar a la siguiente?

—Si muestras en el concurso las fotos que me acabas de enviar seguro llegaras a las finales... aunque hay algo que despertó mi curiosidad y es ese chico que se muestra en las ultimas fotos, ¿quien es? No es empleado del periódico

 Se golpeo mentalmente por no haber eliminado las imágenes del joven en la mañana, rebuscó en su computador y en efecto, olvidó eliminarlas.

—No, de hecho no se quien es, lo vi llorando y creí que sería perfecto fotografiarlo para incluirlo en mi trabajo y así lo hice, jamás lo había visto.

—Pues deberías buscarlo, definitivamente ganarías el concurso con él.

—Lo tomaré en cuenta señor, gracias por tomarse el tiempo de ver mis fotos.

—De nada muchacho, nos vemos mañana.

La llamada finalizó y Yifan observo las fotos tras el monitor, ¿Cómo lograría dar con el mismo hombre? ¿y si buscaba a otro? Podría funcionar con alguien más.

Logró dormir por al menos dos horas cuando unos gritos acompañados de fuertes golpes lo hicieron despertar.

Con fastidio se encaminó a la puerta sin antes pasar por un espejo para arreglar su cabello y atuendo.

—¿Qué es todo ese escándalo? Intento dormir y no puedo por que...Oh.

Frente a él se encontraba el mismo chico del parque. Considerársele afortunado sería poco para el fotógrafo.





— Entonces... ¿en verdad trabajarás conmigo?

—Claro, pero quiero el cincuenta porciento del premio.

—Estas mal chico, no puedo darte la mitad.

—Usted dijo que me daría una parte.

—Exacto, una parte más no la mitad ¿Cómo se supone que pondré mi estudio sólo con la mitad del premio?

—Ese no es mi problema señor ¿me quiere como modelo si o no?

Genial, ahora era Yifan quien se encontraba en apuros, ¿cómo podría darle la mitad al chico? aunque por otro lado si trabajaban juntos estaba seguro de poder conseguir el primer lugar.

—¿Podemos entrar y hablar en mi apartamento?

—Lo siento señor pero no puedo, voy tarde a mi trabajo.

—Deja de llamarme señor, no creo ser tan mayor, de todos modos ya vas tarde, no pierdes nada.

—Mi empleo señor.

—Yifan, ese mi nombre. ¿Pasaras o prefieres hablar aquí? 

—Ya le dije, quiero la mitad del premio.

—Mira chico, no estoy de humor ahora, interrumpiste mis horas de sueño, así que mejor..— El rubio cogió una libreta donde apunto su número de teléfono y saco un billete de la cartera.

—Toma y toma— Extendió ambas cosas al repartidor quien las tomo curioso.

—Cuando quieras hablar bien del trabajo conmigo solo llama, estoy disponible a cualquier hora y en cuanto al dinero, es la paga de la pizza.

—Es mas de lo que cuesta.

—Conserva el cambio.

—¿Si sabe que puedo marcharme con el dinero y no contactarlo, verdad?

—Confío en que me llamarás.

—Como diga Yifan.

El repartidor se marchó y el fotógrafo sonrió satisfecho el haber sido llamado por su nombre ya se consideraba como ganancia..¿no?




Shèyǐng  [TaoRis/KrisTao]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora