El auto conducido por el hombre encapuchado había arrancado a gran velocidad escapando de la zona del incendio; a lo lejos, las sirenas emitidas por los carros de bomberos empezaban a desvanecer. Aquel hombre no había deseado aquel incendio, sin embargo ese hecho fortuito lo había ayudado en gran medida. Estaba cumpliendo con su misión.
El encapuchado no se consideraba una mala persona, aunque sus acciones dijeran lo contrario, aprendió en la secta a la que pertenecía no poner en tela de juicio la voluntad del "Supremo" pese a ello, no tenía la sangre fría que caracterizaba a sus compañeros. En aquel instante, lloro por lo que estaba haciendo, pero se consolaba con sus pensamientos «El supremo lo ha elegido».
El auto entraba cada vez más en lo profundo del bosque, en la parte trasera, el cuerpo del muchacho que trasladaba empezaba a moverse. Estaba agonizando. El hombre que conducía no pudo evitar sentirse culpable, sus sentimientos le decían que debía rescatar a ese chico. No quería entregarlo, quiso dar marcha atrás el auto.
No pudo.
Uno de los hombres de su secta pasó a recibirle.
-Justo a tiempo siervo C-15 lo estábamos esperando-echo un vistazo al carro-Ya es hora.
El hombre de la capucha bajo del auto.
-Sí, si...-Respondió con nerviosismo- Yo lo llevare.
-No se demore, los preparativos del ritual ya están listos.
Una vez que termino de responder, el hombre se marcho.
El encapuchado fue a la parte trasera del auto, coloco su mano en su cara «Ya es hora» y se dispuso a abrir la maletera. Ahí vio nuevamente al muchacho que trajo, su cuerpo estaba deformado, el olor a putrefacción se sentía, y la sangre cubria casi todo su cuerpo. Sorprendentemente aun seguía con vida.
-Perdóname, yo no quería traerte hasta aquí-Dijo con lamento el encapuchado-Yo...
-Ya...Esta...no importa...Mi vida-Interrumpió el muchacho- es una mierda...
C-15 suspiro, y trato de contarle el motivo por el cual estaba aquí de una manera rápida.
-Mira, tú has sido elegido por el "Supremo", el es un espíritu demoniaco al que servimos y...
-Lo sé-Interrumpió nuevamente el muchacho- me ha...Hablado, se...mi destino.
-¿Te hablo? ¿Qué es lo que...?-respondió con sorpresa el hombre- ¿Para que te desea?
El muchacho empezó a tener espasmos, empezó a temblar y a respirar con dificultad, hizo un último esfuerzo por hablar.
El hombre rápidamente cargo al muchacho, corrió para llevarlo al centro del ritual, el tiempo parecía agotarse.
-Me ayudara...a...cumplir...MI VENGANZA!
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SLENDER: EL ORIGEN
Tajemnica / ThrillerUna leyenda acaba de darse a conocer ¿Que lo motiva? ¿Cómo es que surgió? Todo tiene un comienzo, y aquella entidad no es la excepción. Descubre más a fondo el mundo alrededor de aquel ser paranormal. Acompaña a los protagonistas en esta aventura ll...