Hyuk's Diary - VIXX Ryuk

25 / Septiembre / 2014

"Querido Diario,

hoy me ha pasado algo que podría describir como mágico."

Hyuk salió del hospital tras una revisión de sus pulmones, pues hace un tiempo había notado que se cansaba rápidamente y de vez en cuando dolían. Le darían los resultados una semana después. 

Sonrió cuando el sol y un soplo de viento le golpeó la cara, cegándolo por un momento. Era una sensación agradable.

Un chico de cabellos rojos que vendía flores se acercó lentamente a Hyuk con una rosa perfecta.
-Para ti. -Declaró el joven pelirrojo, asombrando a Hyuk, que se quedó observando la rosa roja. La perfección de esa rosa hacía que pareciese artificial, pero era delatada en el especial brillo natural de los pétalos. 

-Gracias... Pero, ¿por qué? -Susurró un desconcertado Hyuk, levantando la cabeza para mirar al joven a los ojos.

- No sé, supongo que una flor tan perfecta merecía tener de dueño alguien igual de perfecto. -Hyuk no pudo evitar reir ante tal comentario, y el chico sonrió, dejando mostrar sus blancos dientes en una brillante sonrisa.- Soy Ravi, ¿puedo saber tu nombre? 

-Hyuk. Han SangHyuk.-Sonrió a su vez, correspondiendo a la sonrisa contraria.- ¿Nos volveremos a ver, Ravi? 

-Eso espero.- Se dió la vuelta y atendió a una anciana que se había quedado mirando las violetas detenidamente.

Hyuk se quedó mirando a Ravi, preguntándose si debería pedirle su número de teléfono, pero tras mirar de nuevo la rosa y ver una pequeña nota asomando de entre los pétalos, sonrió y se dirigió a su casa.

Hay personas que llaman amor a primera vista a lo que Ravi sintió por Hyuk, una gran atracción hacia el joven que acababa de salir del hospital. Esa atracción había hecho que el mismo Ravi actuase de esa forma, pero él no quería reconocer el sentimiento de amor desde la ultima vez que sintió algo así, no quería volver a sentirse como antes lo había hecho, no quería volver a sufrir como lo hizo. Suspiró mirando como Hyuk se alejaba, sonriendo inconscientemente. "Quizás no sea tan malo volver a intentarlo" pensó Ravi.

Ahora Hyuk se encontraba en casa, colocando la rosa regalada por aquel hombre en su habitación, en un pequeño pero bonito florero con agua. Miró la ventana, sonriendo, observando la luna llena brillar y las luces de las casas desapareciendo, dejándolo solo, en la oscuridad.

-Ravi... -Dirije la vista al pequeño pedazo de papel con un número de teléfono y despúes se tumba en la cama, sintiéndose cansado, cerrando los ojos poco a poco. Mañana le llamaría.