Capitulo 8

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¿Acaso fui demasiado dura? Era verdad que no lo conocía como para querer besarlo, no se absolutamente nada de él además de que también padece heterocromia, entro al juego por voluntad propia y su edad lo cual era prácticamente nada porque la heterocromia y el entrar al juego era lo que todos teníamos en común pero después de que dijera eso me quedé sin responder, el seguía sentado a mi lado pero con los brazos cruzados sobre sus rodillas y la cabeza entre ellas, no tengo idea de que responderle.
-No tienes que responder, tal vez este loco por decir eso pero la primera prueba se acerca y quiero salvar la mayor cantidad de vidas que pueda...
-Intentar salvar la mía será un caso perdido porque pretendo ir al frente de la misión, cualquiera que sea. No seré una cobarde que se esconda detrás de los demás...
-Ya lo sé, por eso necesitaba hablar contigo sobre tus poderes ocultos. Tienes que aprender a desarrollarlos.
-No tengo idea de como desarrollar esos poderes Eidan...
-Es fácil, te muestro los míos.
Se paró y comenzó a caminar de un lado a otro despues desapareció y lo escuché en mi mente.
Vamos petite no me volví invisible sólo me moví demasiado rápido para ti y estoy en un lugar donde no puedes encontrarme tan fácilmente, piensa.
¿Cómo diablos quieres que te encuentre maldición?
-Asi- sentí que alguien me tocó el hombro y cuando me gire estaba detrás de mí con su sonrisa-. Ahora ¿cuántos poderes he usado?
-Dos, la velocidad y telepatía.
-Te faltó uno  himeko, konichiwa.
-¿Qué? Sólo entendí que me faltó uno.
- Puedo hablar en otros idiomas petite, lo que acabas de oír fue japonés.
-¿Y qué significa?
-Eso es privado, no creo que te ayude.¿Lista para otro?
-Vale ¿hay más?
-Yep- se acercó a mí y tomó algo de mi cabello lo que provocó que un mechon de el cayera directo a mi cara me mostró el pasador que sujetaba y lo encajó en su brazo derecho para después trazar una línea, grité al ver el brote de sangre pero en cuanto me acerqué para ver qué Eidan estuviera bien el me detuvo, retiro el pasador y la sangre dejo de brotar renovando todo el tejido que había sido dañado, antes de que pudiera decir algo la herida habia desaparecido.
Con que eso fue lo que paso con la herida de Drac.
Al pensar eso note que Eidan hizo una mueca pero al percatarse de que lo estaba mirando sonrió forzadamente.
-Necesito comprobar algo...- sin más clavo él pasador en mi brazo y este se recupero instantes después, Eidan noto mi cara de furia y me Tranquilizó-. Hey, chica necesitaba comprobar que tuvieras regeneración.
-¿Acaso no la poseen todos?
-En teoría... Si pero algunos la han perdido en estos últimos días. Por eso necesitaba verificar y encontrar tus demás poderes.
-¿Cómo planeas descubrirlos?
- Generalmente todos los que poseemos heterocromía sacamos nuestros poderes cuando nos enojamos así que... Perdón.
Y así, como si nada Eidan estampó sus labios contra los míos y comenzó a pasar sus manos por mi cuerpo... Sin mi consentimiento.
Antes de que tuviera control de mis manos estas estaban estiradas hacia él frente y lanzaron algo parecido a un campo magnético que lanzó a Eidan muy lejos de mi.
-Diablos, Andra. ¿Tanto te disgusto?
-Si, me disgustas pero él punto no es ese ¿qué fue lo que hice?
-No se el nombre de ese poder con precisión pero creaste un campo de fuerza, intenta hacerlo de nuevo.
-¿Có...?
Eidan me atacó de nuevo pero esta vez fue diferente en todos los sentidos. Hace unos instantes Eidan estaba frente mi pero ahora lo que veía era un oso pardo descomunal, dientes afilados, ojos pequeños y unas grandes garras afiladas que se disponían a atacarme, si daba un paso en falso estaba acabada.
Él oso se acercó y comenzó a olfatearme pero poco después lanzó un zarpazo con su pata delantera y en ese momento él campo de fuerza volvió a salir de mi mano.
El oso no salió disparado pero si se mantuvo al margen, momentos después era Eidan quien estaba del otro lado del campo.
-Vaya, solo lo haces cuando te sientes en peligro.
-No me digas, Einstein.
-Pero... Tengo una duda.
-¿Cuál? No creo que tengas más dudas que yo.
-No se como hacer que muestres tus demás poderes y Britt me dijo que había escuchado tu voz en su cabeza él día que te capturo pero tu no habías hablado realmente...
-¿Es decir?
-Si puedes hacer eso debes de tener telepatía pero al parecer no es completa como la mía.
-O sea, ¿puedo hacer que escuchen lo que pienso pero yo no puedo saber sus pensamientos?
-Exactamente, intentalo.
-Contigo no sería válido, puedes oír mis pensamientos.
- Por eso llame a alguien.
-¿A quién?- mire a varios lados y al final detecte a una niña pequeña, morena de ojos color avellana con motitas negras y estatura pequeña.
-Andra, te presento a Evie.

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