En un viejo pueblo donde aún existía gente demasiado superticiosa, llamaban "bruja" a una hermosa señorita ya que a pesar de los años ella no perdía ni un poco de su belleza.
"Es por la envidia" murmuraban los hombres al ver a las mujeres criticar en susurros la belleza de la muchacha.
Aunque unos creían que era sólo por el linaje de su familia, otros se mantenían en que usaba magia negra y ciertamente ellos estaban en lo correcto, ésta muchacha era en realidad una bruja que, cómo una humana común y corriente fingió caer en una enfermedad dejando a su pequeña hija desamparada.
En realidad la niña era la bruja rejuvenecida.
Para susposiciones usaba...
– ¡No te pases con eso de que es Halloween!
Usaba uñas de murciélago, moco de rana, rayas de zebra y baba de araña. Aunque cada posición lleva también un ingrediente especial, el de rejuvenecimiento lleva el último latido de un niño. Se dice que esta bruja consigue lo necesario de las afueras del pueblo aunque existe un solo día en el año en el que vaga libremente buscando un latido genuino que sea aún más efectivo para su poción.
– ¡Ah!
En aquel momento una de las tutoras entró a la habitación y nos regaño por estar despiertos aún.
ESTÁS LEYENDO
Antes de dormir
Fantasy«Nunca había sentido algún tipo de gusto por los cuentos, hasta que lo conocí, al final no era tan malo tener que inventar algo para poder verlo sonreír.» Feliz cumpleaños, Mr. Gatazo.♡