Following her

Tercer domingo.- Despues de tres semanas

El viernes siguiente a la gran declaración le envié un mensaje avisándole a Sophie que no tenía ningún problema con dejar de acompañarla los viernes, que sabía que ella y Sam eran recogidos en el admirable coche azul del estupido Thommas, y que no se preocupara por mi.

-No hay problema, nos veremos pronto ❤️

Fue eso lo que decía el mensaje que me envió como respuesta, y así sin más es como llevaba tres semanas sin verla.

Sufriendo en soledad mi dolor, Rick no entendía porque estaba más amargado, y como dio la casualidad de que Fredd también escogió estas semanas para ser un poco más infeliz pues Rick estaba harto de nosotros. Sam vino a visitarme algunas veces, en ocasiones con comida, en ocasiones con el alcohol que yo había conseguido rechazar a sabiendas que no es la mejor idea embriagarme con el mejor amigo de la chica que me dejo así.

Sophie no se había aparecido por aquí, bueno, no hasta ahora.

Y justo cuando estaba diciéndome a mí mismo que necesitaba superarla totalmente, escuche el timbre de la puerta y supe que era ella. Así nada más, como uno sabe sin poder evitarlo un montón de estupideces.

Mire por la mirilla lo feliz que se veía y considere la posibilidad de no abrirle, pero como me había dicho anteriormente a mí mismo, ella no tenía la culpa de nada, ella definitivamente no tenía la culpa de como me hacía sentir.

Así que abrí la puerta.

-Hola- me dijo tímidamente

-¿Qué sucede?- pregunte

-Hemos pasado un tiempo sin vernos, fuiste super importante para mí mientras Sam no estaba, evitabas que me sintiera sola. No quiero que perdamos nuestra amistad.

Y yo no pude evitar notar el "fuiste" en sus palabras. No "eres súper importante", como si un novio y un amigo fueran suficiente para quitarnos todo lo que habíamos construido.

-No puedes tener todo lo que quieres, Sophie

-Pero puedo intentarlo, siempre puedo intentarlo.

Puse atención por primera vez desde que abrí la puerta a algo que no fuese su rostro y me di cuenta de que traía una caja de pizza en las manos.

Una chica que me hacia ignorar la pizza, realmente estaba hasta el fondo.

-Pasa- le dije

-También traigo películas- me contestó

Me quede parado mirándola mientras ella sola ponía la pizza en el piso, buscaba platos y ponía la película.

Luego me senté en el sillón lo más lejos de ella que pude y traté de ver la película, traté de no mirarla, traté de recordar que ya no estaba ni siquiera cerca de ser mía. Me gustaría poder decir que conseguí hacer todo esto, pero la verdad no sé cómo se llamo la película que vimos.

-Te extrañe- me dijo cuando comenzaron los créditos.

-Escuche de la gente que te veías muy feliz

-Eso es porque no te extrañaba en público.

No dije nada.

-Nos quedan como dos semanas antes de las vacaciones de verano, y no voy a estar en la Ciudad durante ellas. Podríamos aprovechar nuestro tiempo.

Yo asentí. Solo dos semanas más y luego tendría dos meses enteros para olvidarla.