Al día siguiente, en la gran cueva, Emily no soltaba el brazo de Alan, no dejaba de verle el rostro con un amor indescriptible, al parecer la jóven que sólo buscaba diversión se ha acabado enamorando, ella ha pensado ya bastante en confesarle a Alan lo que sucede con Franck y Lucia, pero ella sabe que si se lo dice Alan no sería el mismo, y que sufriría bastante, así que mejor calla, y después pensará en de alguna manera hacer que Lucia y él terminen esa llamada "relación".
El profesor avisa que deben ir con cuidado, y señala un pozo en la cueva mientras le dice a los estudiantes que en ese pozo se han perdido miles de personas, mientras Alan hace una broma diciendo:
-Sería el lugar perfecto para esconder un cuerpo, ¿cierto profesor?
Todos se echan a reír, pero Emily se le queda observando muy asustada.
Salen de aquel terrorífico lugar, todos están realmente sucios, y ni hablar del olor que expulsaba dicha cueva, era realmente espantoso.
Emily sale corriendo de allí para que Alan no viese con la fuerza de la luz lo detestablemente cubierta de polvo que se encontraba.
Alan, quien ya sabía con anticipación en que lugar del bosque se bañaba ella, sale de inmediato, y al llegar a la laguna puede observar las prendas de Emily, las cuales desprenden su aroma con suavidad, Alan después de esto suelta las suyas y se mete totalmente desnudo, cuando Emily le mira queda verdaderamente avergonzada.
-¿Qué haces aquí?, ¿no observas que no llevo nada puesto? Dice Emily mientras cubre parte de su pecho, ya que la trasparencia del agua era demasiada.
-Te buscaba, y si, si noté que estabas así, ya que eso es lo único que estoy observando, y no sé si te lo he dicho ya, pero… me encanta la perfección de tu piel, y esa suavidad que tiene. Aún recuerdo la primer vez que te acaricie, recuerdo que tu cuerpo estaba realmente cálido, y tus labios se calmaron cuando mi mano se escondió dentro de tus prendas. Dice Alan quien lentamente se acerca a Emily.
-Es absurdo que sientas vergüenza ya, no sé que somos, pero en poco tiempo hemos hecho lo que nadie ha hecho en años, suelta tu pecho, ya lo he visto y sentido todo de tí, no hay nada que tengas que esconder. Alan continuaba hablando.
En ese momento Emily baja sus brazos y hunde su cuerpo hasta sus oídos, mientras dice debajo del agua:
-Ahora me tienes, tienes todo de mí, y eso es realmente peligroso, no sé si te irás a medio amar, o lucharas y siempre lo intentarás conmigo.
Alan le abraza, mientras de bajo del agua hace cosas que sería mejor no decir.
-¿Has hecho el amor en el agua alguna vez? Dice Alan con voz sarcástica.
-¡Jamás lo he hecho! Responde Emily enfadada.
-Ah, pero lo harás. Dice Alan.
En ese momento los dos se ven uno al otro, no sabría decirse en qué piensan, pero si se sabe que hay amor en el aura, Emily sabe que desea estar con él por siempre, pero sabe que Lucia jamás le soltaria, porque ella siempre ha sido así, siempre ha deseado tener todo.
Por otra parte, en la casa donde vive Alan, en su dormitorio, en su cama, en ese lugar, Franck y Lucia repiten nuevamente lo que han hecho todos los días cada vez que les complace.
-¿Te parece realmente excitante hacerlo en la cama de mi hermano, cierto? Dice Franck mientras está sobre Lucia.
-¡Cállate! Sabes que no puedo controlar mis sentimientos por tí, pero éste lugar, éste aroma, todo esto me recuerda a tu hermano y realmente me vuelvo deseosa. Dice Lucia totalmente agitada.
En su mente por instantes vienen imágenes pensando: "¿Qué estará haciendo Alan? ¿La estará pasando bien? ¿Se estará diviertiendo?", lo que no sabe, es que Alan está teniendo los mejores días de su vida, aunque bueno, siempre ha de saberse que toda historia con buenos sentimientos termina mal.
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Sentimientos inundados.
RomanceUn chico que por intentar la mayor ingeniosidad de su vida termina quedando solo y sin esperanzas de hallar un nuevo sentimiento puro y real que lo lleve a la felicidad.