Teen Idle

Misterio 2/3

Logre quedarme dormida por unas horas pero, pasada las 2:00 a.m. voces sonaban en mi cabeza, burlonas, empalagosas, susurros...podía escuchar de todo. Giraban giraban. Abrí de golpe mis ojos, podría jurar que vi a la chica de la fiesta, a quien apunte con un cuchillo, dentro de mi habitación. Una sonrisa macabra era dirigida a mí de su parte. No podía gritar, levantarme, hablar...nada de pronto mi respiración se hacia cada vez menor. Mis pulmones rogaban por un poco de oxigeno. No se en que momento ella se desvaneció, o eso pareció que pasaba, y fue justo ahí donde todas comenzaron a decir y repetir lo mismo una y otra vez. De nuevo ese nombre "Crisálida".

No sabía que o quien era. Pero ellas lo cantaban al unísono, se burlaban de mí, dentro de mi propia mente.
No había forma de poder callarlas, eran demasiadas contra una. El sueño se apoderó de mí, aun así las seguía escuchando.
Hasta que por fin de disolvieron en lo profundo de mis pensamientos.

Cuando desperté en la mañana, se habían ido por completo, pero dejaron las puertas abiertas, sabía que iban a regresar no habían acabado.

Fui a estudiar, y hacía lo que podía para no pensar en ese nombre, me era imposible.

La ultima clase era biología con la señora Murphy. Normalmente Ana se sienta conmigo pero al entrar no estaba ahí. Igual, me senté, sin darme cuenta alguien estaba junto a mi. Creí que era Ana quien llegaba tarde de nuevo pero no.
Era ella, esa chica de nuevo.

-Tú...-dije

-Tranquila, lo del cuchillo ya quedo atrás.

Me lanzo una sonrisa. Pero no una cualquiera era falsa, hizo que me estremeciera. Un frío recorrió mi espalda.

-An...Annie.- un susurro, detrás de mí.
No podía ser nadie, era la última de la fila, la pared era lo que estaba detrás.
Esa voz provenía dentro de mí.

Risas macabras se escucharon. No otra vez, no aquí.

-Por cierto.- dijo la chica. -Me llamo Annie.

Me quede estupefacta como podía ser eso posible, como podrían saberlo ellas, ni siquiera es. No sé.

-So...Sophie.- dije tartamudeando un poco.

De nuevo esa sonrisa. Tenía algo en ella que me ponía los pelos de punta y la piel de gallina. Esa sensación no me gustaba nada.
Algo en ella no estaba bien. Mas bien ella no estaba bien.

Pase cuarenta minutos junto a ella, ya suficiente tenia con mis propios pensamientos para que ella también se metiera en ellos.

Al sonar la campana me encontré con Ana en la puerta.

-Hey! Anoche te fuiste temprano

-Si. No entraste a clase.

-O si eso, lo siento, estaba con Rex.

-¿Rex?

-El chico lindo del que te hable, creo. No importa. Te deje sola disculpa por eso.

-No estuve sola Annie estaba en tu lugar.

-¿Annie?, es nueva

-No lo sé supongo jamas la había visto antes. Es ella.- señale al lugar donde la había visto pero no había nadie. Me que de callada, Ana solo me miro y sonrio.-No importa.

Todo era muy raro. Camine a casa, pensé que seria mejor. Quería estar segura. Pero no así no fue. Las decisiones que tomo no son las mejores. Eso porque...

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Lamento la tardanza, lo modifique muchas veces y pues aqui esta. Espero te vaya gustando Ches.