Me asome en la ventana del cuarto de mi mamá, ella seguía profundamente dormida, así sea que me regañara bajaría a acompañarlo.
Baje las escaleras corriendo tenía que ir rápido no podía dejarlo allí, ni siquiera me cambie la pijama, fui en un short que me quedaba cortísimo y con un suéter, eran de ositos una cosa ridícula que cuando Luccian viera se iba a reír.
Termine de bajar y allí en el suelo bajo una matica estaba Luccian sentado, al escuchar que abrí la reja volteo, sonrió ampliamente.
- Estas empapado. – Lo agarre de la mano y nos quedamos en las escaleras.
- Esta siendo burda de frio, y el desgraciado de mi primo no contesta el maldito teléfono. – Estaba furioso.
- No maldigas.
- ¿Qué? – Me sonrió, lo mire con cara de pocos amigos sentí que se burlaba de mi – No vale enserio dime no escuche, seriedad.
- Que no maldigas, es feo.
- Ah lo siento. – Me dio un beso en la mejilla – Que linda, viniste hacerme compañía a pesar de que tu mamá te regañara si te ve aquí abajo.
- Que me regañe, no importa. – Me recosté en su hombro, tenía mucho frio me hubiera gustado abrazarlo pero estaba muy mojado, el veía al suelo y sus manos estaban entrelazadas a las mías.
- ¿Y ese short vale? – Lo halo con los dedos estaba muerto de la risa – Que chistoso – Me eche a reír y le di un beso corto.
- Yo sabía que ibas a decir eso. – Me sonrió ampliamente.
- Tengo mucho sueño, me estoy muriendo. – Se restregó los ojos.
- ¿Sabes que?
- ¿Qué?
- Vamos a subir a mi casa.
- ¿Qué? – Puso los ojos como platos.
- Si vente, tengo mucho frio y tú tienes mucho sueño, vamos. – Lo hale del brazo y subimos.
Abrí cuidadosamente la puerta sin hacer ruido, luego fuimos al cuarto y allí me encerré, le puse llave a mi puerta para así cuando mi mamá se levantara y quisiera entrar a mi cuarto no podría, y no lo viera, acomode una colchoneta en el piso, para que el durmiera allí, no era el mejor plan para olvidarlo pero no podía dejarlo afuera.
- Tu si eres linda conmigo, gracias.
- De nada, ¿No te vas a quitar la camisa? – El puso una cara exagerada y se echo a reír muy duro enseguida le tape la boca – se supone que tú no estás aquí.
- Lo siento, yo sé que no estoy bueno pero no me tienes que pedir que me la quite yo lo hago solo gafa.
- Imbécil, no, enserio es que estas mojado.
- Si pero recuerda que tu mamá tiene llave, y va ser peor si me ve sin camisa o no se no cuadra.
- Verga, verdad que ella tiene la otra llave de la puerta ¿Bueno pero vas a dormir mojado?
- Si, lo único que me voy a quitar son los zapatos. – Dijo mientras se sentaba en la colchoneta y se desamarraba los zapatos.
- Bueno hasta mañana tengo mucho sueño por cierto ¿Tú conoces a Willy?
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Entre Amores y Dolores
Romance- Yo te amo. - Susurró. - ¡No quiero verte más! ¡Y no, no es así, no me amas! ¡Y si lo hicieras, lo cual dudo mucho, no me gusta tu manera de amarme! - Pero y-yo-yo podría amarte. - Tartamudeó un poco. Sus ojos cristalizados por las lágrimas. - ¡Dé...