Capitulo 23

8 0 0
                                    

Estoy en la computadora leyendo un libro un tanto raro.

Observo a mi hermano que esta en mi cama viendo la tv y no puedo hacer otra cosa que estremecerme. Eiiuuggg, el asco me llena de pies a cabeza.

No es que mi hermano me de asquito, yo amo a mi hermano y el es hermoso. Lo que pasa es que estoy leyendo un libro que se trata de dos hermanos que se enamoran y se podra decir "seguramente no se conocian y por ello un día por casualidad de la vida se conocieron y se enamoraron"....

Pero no.

El libro es bueno y romantico pero es descabellado, se llama Forbidden. No es malo pero la idea de estar con mi hermano es un tanto repugnante.

- ¿Que haces? - Gabriel se acerca a mirar por encima de mi hombro.

- Leyendo un libro donde dos hermanos se enamoran.

- ¿Como se conocieron? - Dice con la vista en la pantalla.

- Desde siempre. - Él me mira un tanto confundido. - Se enamoraron sabiendo que eran hermanos.

Su cara es epica.

Suelto una carcajada sonora y el se estremece exageradamente.

- Que asco...

- Yes.

- ¿Como no les da asco? es algo super loco. Yo jamás podría enamorarme de ti, aparte que es como estar conmigo porque somos igualitos.

- Y feos en realidad... - El se rie y con una mano echa una melena imaginaria para atrás.

- Asco, ridicula, fea eres tu.

- "Somos igualitos".

- No tan iguales. 

- ¿Recuerdas cuando eramos pequeños y nos dolio mucho que papá se fuera? - Su ceño se frunce, nunca le ha gustado hablar del tema pero aun asi asiente. - ¿Y recuerdas que dijimos que nos casariamos y tendriamos hijos juntos para estar seguros de con quien nos casabamos y que por estar juntos desde siempre jamás uno abandonaria al otro?

- Si, lo recuerdo - sonrie melancolico, con los ojos de nuevo en la pantalla.

- En ese entonces no parecia descabellado estar juntos. - Dije, y no pude evitar que me diera una puntada en el corazón.

No es como si quisiera casarme con Gabriel pero hasta entonces no me habia dado cuenta o mejor dicho no habia prestado atención a el hecho de que un día él se marcharia, se casaria y no estaria para protejerme.

- No seas tonta, quita esa carita.

- No se cual cara te refieres. - dije fijando los ojos en la pantalla.

- Eres mi hermana, se lo que estas pensando y jamás de los jamases voy a pensar en abandonarte si quiera. Yo te amo demasiado. - No pude evitar que se me salieran las lagrimas.

- Es qu te iras y yo no quiero perderte pero te casaras y te olvidaras de mi, y ya no habra nadie que pueda protejerme de las cucarachas, las arañas y de los chicos que quieren romper mi corazón. - Dije sollozando contra su pecho. Me acaricio el cabello hasta que me tranquilice.

- Yo siempre estare para matar cucarachas, correr a las arañas y golpear a todos los chicos que quieran romper tu corazón. - Dijo mientras depositaba un beso en mi frente. - Aunque deja la lloradera tu lo que quieres es casarte conmigo, yo lo se, siempre has estado enamorada de tu guapo hermano.

- Si eres horrible.

- Deja la broma que yo se que te mueres por mi. - Se acerco y me dio un beso en los labios. Le di un empujon que salió volando de la cama. Nos reimos por un buen rato hasta que de pronto me miro serio - Mira como eres la mejor hermana del mundo me haras un favor.

Entre Amores y DoloresDonde viven las historias. Descúbrelo ahora