¿Tú sonrisa? La más brillante (Xiubaek)

Capitulo 7

Al día siguiente, Minseok se levantó, como siempre, con los movimientos de su madre en su habitación. Minseok jamás acabó de entender cómo era posible que su madre entrara en su habitación así sin más. El día que se cansara pondría el cerrojo y no entraría ni dios en su habitación. Su madre le gritó que se levantara y salió de allí, ignorando las ojeras en los ojos de su hijo menor y fue hacia la cocina donde las criadas ya habían hecho el desayuno para la familia.

Minseok suspiró, casi soltando el alma por aquel suspiro, y se dio media vuelta maldiciendo a todo el mundo. Ayer, después de darse cuenta que se había enamorado de Baekhyun y de ahí sus enormes ganas de protegerle pero a la vez de bromear con él, a Minseok le costó dormir. No porque estuviera nervioso y porque su corazón latiera como un loco – Minseok jamás admitiría algo como eso, sino, adiós reputación – sino porque se había vuelto a enamorar.

Minseok no deseaba aquello, por eso a pesar de los tontos rumores sobre él, permitía que existieran todos esos comentarios. Le ayudaba a mantener a la gente alejada de él y su dinero, también su fama.

Antes de que todo aquello empezara y que comenzara a vestir así – sus gustos musicales siempre fueron los mismos, pero la ropa no porque su madre se escandalizaba como ahora – era muy popular no solo por ser rico, sino por ser un '' chico lindo ''. Kyungsoo jamás comentó nada, pero era quien mejor sabía el enorme cambio que dio Minseok después de ser traicionado por su primer amor.

De ser lindo, sonrojarse con facilidad, muy amable y casi como un ángel caído del cielo para ayudar, pasó a ser alguien serio, frío, odioso y sarcástico como fachada. Y aunque no lo mostraba casi nunca, sus tres únicos amigos sabían que detrás de todo eso seguía existiendo aquel Minseok de antes, ese que era amable con todos, ese que se sonrojaba cuando le decían un cumplido y ese que cuya sonrisa verdadera era como la de un ángel.

Solo que, ese Minseok, estaba dañado y alguien debía de sanarlo.

Con otro largo suspiro se levantó de la cama y fue hacia la ducha donde se encargó de dejar que el agua se llevara todos aquellos malos recuerdos, aquellas sensaciones horribles de dolor cuando recordaba como cambió por culpa de aquel malnacido que siempre odiará toda su vida. Se vistió con sus oscuras ropas de siempre, esta vez combinando una negra camiseta con unos pantalones rojos y se maquilló, ocultando las ojeras.

Después de tener que volver a escuchar a su madre por la vestimenta y '' el que dirán '' si alguien que ellos conocen le ven así, Minseok se fue a la universidad encontrándose por el camino a Kyungsoo que venía de la mano con Jong In. Minseok tuvo que quedarse un buen rato mirándoles para terminar de creerse aquello que estaba viendo.

Kyungsoo y Jong In de la mano... Yendo hacia la universidad...

-Oh dios mío... -Susurró Minseok. –El mundo está loco...

Sintió una ola de felicidad recorrer su cuerpo cuando les vio así, cogidos de la mano y Kyungsoo riendo de algo que le dijo Jong In. Minseok sonrió, de verdad que Kyungsoo y Kai estaban enamorados aunque claro, cuando llegaran a la universidad tendrían que ser fuertes y enfrentar todos los rumores que vendrían ahora.

Queriendo darles espacio, se escondió y fue a la universidad por otro camino. Kyungsoo merecía su tiempo con Kai.

Cuando llegó a la universidad se encontró a Kyungsoo y Kai en la puerta esperándole como siempre, solo que era nuevo ver a Kai también. Minseok, fríamente, fue hacia allí observando de reojo como muchas personas veían las manos entrelazadas de Kyungsoo y Jong In, comentando con sorpresa que esos dos eran pareja y que el gran Jong In, también conocido como Kai, había conseguido al satánico Kyungsoo.