Capitulo 7.

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—¿Piensas que Kate está en esa casa?. Sería muy lógico que se mudase.

—Créeme, está ahí.

El camino hacia casa de Kate se nos hace largo. Los dos tenemos ganas de llegar y ver que está pasando. Si se ha mudado me encargaré de averiguar dónde está. No puede huir de mi.

A la hora llegamos al pequeño pueblo donde vive. Creo recordar que su nombre era Griffg. Luke se mudó una vez cuando Lydia y él tuvieron al pequeño Logan y no tengo la más mínima idea de porque está ahí.

El pueblo está bastante despejado y no hay casi nadie en la calle, solo algunos bares abiertos. La casa de Kate está al fondo de la última calle y nosotros nos dirigimos allí. Tengo que concertrarme para no decirle estupideces. Sigo enfada con ella, es obvio, me manipuló de todas las formas. Ya no confío en ella, por eso se que me puede mentir y a la puede decirme la verdad.

—Esa es su casa. —Digo mirando a una de ellas.
Su casa es pequeña pero bastante moderna. Creo que es de las únicas modernas que hay en este lugar.

Aparcó el coche en frente de su casa y los dos salimos hacia la puerta. Probablemente yo este más nerviosa que Ian, pero sé que él por dentro lo está aún más. Hace dos años que no ve a Kate y tienes tantas ganas de decirle de todo que tendré que calmarlo yo misma.

—Kate. —Toco con mi puño a la puerta. —Kate. —Vuelvo a gritar repitiendo el mismo gesto.

—Estoy en el jardín. —Grita alguien detrás de la casa. Ian me mira y me hace un gesto de que nos vayamos. No le gusta esta idea pero tengo que hacerlo.

Abro la puerta de la valla y los dos entramos. Cuando llegamos al jardín nos encontramos a Kate con su perros jugando.

—¿Que hacéis aquí?. —Pregunta Kate con un tono normal. Sin mirarnos. Solo jugando con sus perros. Ian se adelanta pero yo le freno.

—Tengo que hablar contigo. —Contesto sería. Kate levanta su mirada y nos mira de arriba a bajo.

Si os digo que Kate no ha cambiado, mentiría. Probablemente su carácter sea el mismo pero de físico ha cambiado bastante. Está más delgada, su pelo está mucho más largo y sus facciones son de una persona mucho más mayor. Tiene la misma edad que mi hermana.

—¿El también?. —Pregunta señalando a Ian.

—Tenemos que hablar contigo. —Corrijo.

—Pasad dentro. —Kate suelta alguno de los juguetes de sus perros y nos indica la entrada. Ian y yo la seguimos, siempre mirando a todos lados.

Ian, con él, lleva una bolsa con todo el dinero. En total, 300.000 dólares.

Su casa es bastante rústica por dentro. La casa tiene dos pisos. Abajo está todo, la sala de estar, La Cocina, un baño y el salón. Arriba estará su dormitorio.

Nos sentamos en una de las mesas del comedor y ella nos mira.

—Los mensajes han vuelto. ¿Tienes algo que ver con eso?. —Pregunto decidida. No quiero estar aquí más tiempo. No con ella.

—¿Que?. No, no se nada de lo que estás diciendo. —Dice Kate. Por unos momento me la creo pero ya sabéis cómo es Kate, puede manipularte muy rápido.

—No te creo. —Contesta Ian. —Dime quien está detrás de todo esto.

—Mirad, yo no sé nada. Solo estoy aquí, viviendo mi vida de mierda. No quiero que os involucréis más.

—¿Tarde verdad?. Tú ya te involucraste en la nuestra. Si sabes algo de quien esa persona que quiere volver a jodernos la vida, dilo. No se enterara. —Ian se está enfadando. Lo sé, sus ojos se está poniendo negros.

My last secret. Donde viven las historias. Descúbrelo ahora