Capítulo 17.

60 6 1
                                    

—Hayley ¿De que cojones va todo esto?. Tienes diez segundo para contármelo. —Amenaza Dylan.

—He hablado con Ashley esta mañana. —Digo dirigiéndome hacía él, siguiendo los consejos que ha dicho mi novio.  —Quiere ser tu acompañante en la boda. Dice que tenéis temas pendientes y quiere arreglarlos ahora.

—¿Cómo mi acompañante?. —Pregunta. Su rabia va llegando a su cima. —¿Por que no puede decírmelo ella a mi? Soy su ex novio, maldita sea.

—Dy, no puedes culparla, solo quiere hablar.

—¡Pues claro que la culpo, joder!. —Grita. —No es que no quiera hablar, Hayley, es cuándo lo quiere hacer, siempre cuando ella quiere.

—Escúchame Dylan, tienes una oportunidad para arreglar las cosas.

—Yo no fuí quien lo dejó, Ian!. Yo no he sido quien ha roto la relación para irse con su novio a Alemania porque no está enamorada de él. No puede dejarle porque le da pena. —Grita Dylan con rabia. Se sienta en la silla mirándonos a nosotros. —¡Maldita sea joder!.

Esto es lo que no quería que pasara. Sé que Ashley no solo quiere volver a Hometown por la boda, quiere arreglarlo por Dylan, por toda la rabia que tiene acumulada y es que si algo ha hecho mal Ashley es ocultarle que se iba a Alemania cuando estaban juntos. Ashley ya lo sabia desde hacía tiempo, ella fue la que quería irse pero sabía que Dylan no querría por eso le dejó y se fue con Dan. Ashley aún sigue estando enamorada de Dan, pero eso es un amor de niños, a quien quiere es a mi hermano. Por eso es por lo que quería que Dylan no la invitase a ninguna de sus fiestas, porque él ya está bastante sensible con este tema y volverla a ver significaría volver a sufrir.

—Dylan, no pasa nada, le diré que no y ella te entenderá.

—No, Hayley, la cuestión no es que no quiero que sea mi acompañante, si no que ya tengo a alguien con quien ir a la boda. —Dylan apoya su cabeza en sus brazos.

—Pues díselo a Penélope.

—No es a Penélope, es a Valentina.

No, joder, Valentina, no, Dios, la ha cagado pero bien.

—¿Cómo que Valentina?. —Digo atónita. Ellos no saben quien es realmente pero yo sí. Debo de contárselo ahora mismo.

—Mi ex ex novia. Ya no le puedo decir que no venga porque acaba de coger un vuelo para venirse hacía aquí.

—Pues si te creías que tenías alguna posibilidad con Ashley, al acabas de cagar pero bien. —Responde Ian.

Mi vida siempre va así. Primero pasa algo bueno, luego sucede lo malo y cuando crees que ya no hay nada malo, pasa algo peor. Es es el resumen de mi vida. Valentina está a minutos de pisar mi casa, y yo todavía no le he contado nada a mi hermano sobre como es ella. Tiene que echarla si no quiere que lo haga yo y será por las malas. Esto es un maldito infierno constante que no para de empeorar. Y por si fuera poco, mi hermana odia a Valentina, y la odia por eso. Cuando Dylan se lo ha contado, mi hermana ha dicho que no quiere que duerma aquí y que mucho menos se pase la mayor parte del tiempo en esta casa. Quiere que cuando sea la boda se presente con él y que después se vaya. Pero yo no quiero ni que esté en la boda, y el único plan que se me ocurre es decirselo.
Si se lo digo, pueden ocurrir dos cosas. Que mi hermano entre en cólera y la eche de casa o que mi hermano la crea a ella, y de verdad, no creo que ninguna de las opciones sea buena. Así que tengo que esperar y hablar con ella.

—Nena, me estás poniendo nerviosa. —Ian deja de abrazarme al ver que no dejo de mover mi pierna. —Es una cena.

—Es una cena con Valentina. Si mi hermano no le dice nada, Ashley vendrá y se encontrará con todo.

My last secret. Donde viven las historias. Descúbrelo ahora