Capitulo 9

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Otro intento de ataque por parte de los de estatura baja fue bloqueado, haciendo que el rubio volviera a molestarlos o más bien solo al peli-naranja. El megane le dijo una cosa demasiado desagradable que provocó en la chica las ganas de darle un puñetazo al más alto, pero la detuvieron antes de poder dar tan siquiera un paso.

— Que no miras que tú no naciste para ser un rematador, mejor ve a hacerle de libero que es mejor para tu estatura. — Esas palabras fueron las causantes de que Hinata apretara sus puños y contara una pequeña anécdota de su experiencia en la escuela media.

— Aunque el voleibol dependa de la altura, lucharé y con este cuerpo ganaré porque quiero seguir jugando muchas más veces. — Esas palabras captaron la atención tanto de la castaña como del azabache haciéndoles recordar junto con Hinata las experiencias que cada quien vivió por separado en la escuela secundaria.

El peli-naranja recordaba su primer partido en la escuela media con melancolía en el que había perdido con el "rey de la cancha", quería seguir jugando, no se quería ir de aquel lugar de solo tener esa idea su pecho dolía, anhelaba tener más encuentros y ganar cada uno de ellos. "No..." fueron las palabras del chico cuando perdió.

Al mismo tiempo el azabache pensaba en el partido de las finales, aquel momento en que no hubo nadie detrás de él para rematar su pase, tenía miedo de que eso le volviera a suceder y también de que lo volvieran a mandar a la banca como su antiguo entrenador lo hizo, aunque el quería seguir jugando mucho más, sentir el balón en sus manos por más tiempo y hacer puntos cuando sus compañeros debían adecuarse a su ritmo, ahora entendía que eso no estaba del todo bien lo que el pensaba en aquel entonces. "Esto no debe pasar..."  había dicho el chico en el pasado.

Por otro lado la chica tenía en mente el recuerdo de su ultimo partido de escuela media, tal vez su equipo había ganado pero ella no estuvo en el ultimo momento para verlo y mucho menos para formar parte del partido, se había lesionado la muñeca en el peor momento posible y aunque ella no quisiera se la tuvieron que llevar a la enfermería, "¿Por qué?" se había preguntado varias veces en aquel entonces.
Le había agradado que su equipo consiguiera la victoria, pero ella quería haber formado parte de eso.

Pero el pensamiento y sentimiento único que tuvieron los tres fue "Yo aún quiero seguir jugando y permanecer en la cancha" esto es un lazo que los une, aunque ellos no están consientes de eso. Por eso no podían perder esta vez, tenían que ganar para poder seguir jugando en muchos mas partidos en las posiciones que cada uno (a excepción de Natsuki) desea, juntos.

Bien, ¡Vamos a hacerlo! — Gritó la chica para sacar de sus pensamientos a los otros dos y animarlos sobre todo. — Oh! Se me olvido decirles, el cuatro ojos y pecoso-kun no tienen buenas reacciones, debemos sacar ventaja de eso, del que se deben cuidar es de Daichi-san aunque el reacciona lento a los puntos cerca de la red.

Aquello provoco cierto escalofrío tanto en el capitán como en el vice capitán pues posiblemente ella se había dado cuenta de las debilidades de los jugadores en un corto periodo de juego, tal y como su hermano podía hacerlo pero en un periodo de tiempo más corto.

Parece que Natsuki se parece a Oikawa.. — Comento el de cabellos grises hacia Ennochita que aunque no haya jugado algún partido con el castaño de Seijoh, asintió afirmando aquello.

"Veamos... concentrate, debes hacer esto bien para recuperar puntos." Se dijo así misma la castaña quien después de anotar un punto por un error del chico de pecas le tocaba volver a sacar a ella, era momento de dar lo que tenía y tomar la delantera ya que por suerte no estaban tan lejos. Suspiro cerrando los ojos concentrándose, al abrirlos su mirada había cambiado completamente, ahora se encontraba en un estado de seriedad, fue un cambio repentino de humor en el que los espectadores pudieron notarlo y esto capto más su atención, elevó el balón al aire y corrió para darle un gran golpe haciendo que este tomara un rumbo directo al lado del megane, quien no pudo reaccionar lo suficientemente rápido puesto que antes de que hiciera algún movimiento para recibirlo el balón ya había marcado un punto para la castaña y su equipo, dejó a la mayoría con la boca abierta.

¡WOOOOH! Natsuki ¿¡Por qué no dijiste que tenías un saque asesino también!? — Grito el peli-naranja impresionado por lo que sus ojos habían visto, no se lo podía creer, pero al momento el que la chica volteo con su mirada matadora y no del buen aspecto el contrario se tenso, no creía haber dicho algo malo.

Haikyuu. No quiero ser una sombra.  [Fanfic]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora