Hola, esto será un poco confuso ya que recientemente he empezado a hablar sobre este tema.
El agnosticismo y la realidad. Dos temas que apoyo, pero, cuando los dos se enfrentan, no sé de qué lado estar.
Primero, voy a aportar mi creencia. Durante el año del dos mil catorce hasta hace unos meses de este año creí ser ateo. Pero, últimamente, leí a una persona que decía ser agnóstico. Yo no tenía idea de la palabra, la busqué por Internet, y empecé a interesarme. Luego de eso, empecé a buscar el porqué podría considerarme yo agnóstico. Y he aquí, mi razón.
Para empezar, no creo en el típico Dios en el que todos creen hoy día; bondadoso, amante y siempre perdonando. En la mitología griega, los dioses Olímpicos eran seres perfectos, y, para ellos, nosotros los humanos éramos seres imperfectos. Entonces, ¿por qué un ser todopoderoso estaría perdiendo el tiempo en seres imperfectos como nosotros? Y no sólo los humanos, también las demás especies vivientes en el planeta tierra.
Pero, hace poco, leí otro comentario de la misma persona por la que comenzó esta idea mía. No creer que haya un dios, pero sí en que haya una fuerza u otra cosa que tenga el poder sobre nosotros, como, por ejemplo, el ''destino''. No hay una comprobación científica de esta palabra, y, sinceramente, la historia de la vida se fue desarrollando por medio de las ''decisiones''.
Simplemente, estoy buscando aclarar mis ideas, porque he hablado con una persona sobre esto, y sí, es mejor creer en lo que ves. Vivimos porque tenemos un sistema nervioso, un sistema respiratorio, un sistema digestivo, no un alma. Nuestra vida no está dictada, nosotros vamos desarrollándola mediante decisiones.
Pero, el creer en algo, mantiene nuestra moral en alto. Tal vez no existe tal poder sobre nosotros, pero el creer no cuesta nada, y resulta interesante.
Hace poco, vi un documental, donde participó el famoso actor Morgan Freeman. No hablaré de todo el programa, iré al grano.
En una parte, un psicólogo fue a un jardín de niños, para hacer un juego sencillo. El juego era sencillo; había un tablero con números, el señor tenía una pelota que se pegaba al tablero, y, donde cayese la pelota en tal número, era el punto que ganabas, ¿me explico? El psicólogo puso unas reglas. Puso, con una cinta adhesiva el límite de acercamiento para lanzar la pelota, y la pelota debía ser lanzada de espaldas. Cada turno iba a ser a solas, todos los niños salían del cuarto y sólo uno se quedaba para lanzar. El señor, mediante una cámara de seguridad, veía como algunos niños lo hacían bien, y otros hacían trampa. Concluyó que los niños, como nadie los ve, harán lo que quieran, sólo por el premio de ganar el juego. Entonces, cuando se reunieron todos de nuevo, el señor les presentó una amiga nueva, esta amiga tenía un poder, y era hacerse invisible. La niña, invisible, estaba sentada en el salón para ver cómo los niños hacían el juego. Al salir, el señor empezó a hacer lo mismo, y los niños, no hicieron trampa, para no defraudar a su amiga invisible. Entonces, con esto, el señor Morgan Freeman pudo entender que, mientras el ser humano tenga en cuenta que hay un ojo que todo lo ve, mientras tenga en cuenta el pecado, su moral estará alta, y se guiarán por el buen camino.
Entonces, en mi conclusión, para esto sirve creer, para ir por el camino que a todos les parece el correcto.
¿Se pudo entender bien? Espero ideas en respuesta.
Fin de la nota.
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Mi mente me obliga
AcakEsto no es ninguna clase de novela, son sólo notas que contendrán mis pensamientos. Lo hago principalmente para dejar, por lo menos, guardado de estos en algún lugar, con la oportunidad de que otros usuarios puedan argumentar, criticar y razonar jun...