-¿Cómo es que no había fans en la entrada?
-Porque les dijimos una falsa dirección y habrán ido allí.
-Ah... Guay. –Sonreí.
-Por cierto, ¿cuántos años tienes?
-Diecinueve, Zayn. ¿Tú?
-Veinte. Cumplo veintiuno este 12 de enero.
-Uy, pues intentaré hacerte un buen regalo.
El coche paró, por lo que me desabroché el cinturón de seguridad. Fui a bajar del coche, pero Zayn me cogió del brazo y me paró.
-¿Mañana tienes algo que hacer?
“¡Le interesas!” gritó mi travieso subconsciente. Negué ligeramente con la cabeza mientras sonreía. Zayn me miraba en busca de una respuesta.
-No, supongo.
-Pasaré a por ti a las cinco. Ponte guapa; aunque no creo que cueste mucho.
Aquellas palabras me hicieron ruborizarme. Asentí y salí, dirigiéndome hacia la puerta de la que sería mi nueva casa. El coche ya no se veía cuando llamé al timbre, ya que ni había cogido las llaves. Di un suspiro. Me caería una bronca por llegar tarde a casa y no haber avisado. Mi hermana abrió la puerta, y entré rápida.
-Has tenido suerte. Mamá y papá se han ido a cenar fuera. ¿Por qué llegas tan tarde? –Me dijo. Bien, al menos me he librado.
-No tenía ni idea de cómo volver a casa.
-Tonta.
-Mucho. Pero, ¿a qué no sabes con quién me he encontrado?
-¿Quién?
-Zayn. De One Direction.
-Ja... jaja... jajaja... No te creo.
-No me creas. Mañana se pasa por aquí a las cinco.
-¡No! ¡Tía, eso es genial! Saldréis y...
-¿Quién ha dicho nada de salir? Le acabo de conocer, Amy.
-¡Pero ______! ¡Si es guapísimo! ¿Cómo no te gusta?
-Ey, que no digo que sea feo, ni mucho menos. Es un bombón en toda regla. Pero todo a su tiempo, ¿quién sabe si me gustará o no?
-Pues si no le quieres... Regálamelo.
Reímos y entré en la cocina con ella. El timbre volvió a sonar, y Amy se levantó. Al minuto, vino con pizza. Cené junto a ella, entre bromas y risas.
Cuando ya estábamos cada una en su habitación, tumbadas en la cama, mi subconsciente aún seguía eufórico porque mañana tenía una especie de cita con Zayn. No podía dormir. Solo imaginar que pasaría.
Después de una hora, ya no podía más. Estaba cansada. Exhausta. Tenía sueño, por lo que caí rendida, consiguiendo dormirme por fin.
---------------------------------
Me desperté y lo primero que hice fue coger ropa. Una camiseta rosa chicle y unos vaqueros azules claros que quedaban genial. Fui hacia el baño y al mirar al espejo, hasta yo misma me asusté. ¡Que horror! ¿Esa era yo? Tenía el pelo a lo Rey León, completamente alborotado. Mi cara de cansancio era mortal. No había dormido muy bien por la noche. Me quité el pijama y me metí en la ducha. Pensé en Kate. La echaba de menos y solo había pasado un día. Por otro lado, estaba Zayn. Aún no me creía que le hubiese conocido.
Salí de la ducha, y me puse la ropa interior. Mi pelo tardaría demasiado en secarse, por lo que usé el secador. Luego, me puse la ropa que había cogido, y me miré al espejo. Tenía mejor aspecto que antes. Mucho mejor. Recogí mi pelo en dos coletas.
ESTÁS LEYENDO
Don't Let Me Go [Zayn Malik & Tú]
Fanfiction"Es imposible resistirse a ti". Le encantaba oír esas palabras de su boca. Siempre sabía como hacerla sonrojar, y este era uno de esos momentos. Le quería, y en ese instante le encantaría besarle. ¿Por qué esperar? ______ es una normal y corriente...