Corazones en llamas

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Era lunes por la mañana, escuche como cada día a mi mama diciendo que si no me apuraba el bus escolar me iba a dejar, yo sin ponerle atención me dirigía hacia las escaleras para bajar y desayunar hasta que pise la patineta de mí hermano, lo que me hizo tropezar y rodar por las escaleras; cuando llegue al piso mi hermano y yo comenzamos a pelear, en eso llego mi papá y nos saludó, el aún estaba medio dormido con una taza de café en la mano; yo lo iba a saludar pero llego el bus escolar lo que hizo que saliera por la puerta sin ni siquiera despedirme.

Mi amigo Alex siempre me guardaba un lugar en el bus a su lado, él era mi mejor amigo, el único que me entendía y que sin importar lo que yo hiciera él nunca me abandonaba; el me saludo y me pregunto porque tenía un raspón en el brazo, yo con mucha rabia le conté lo que había pasado y él se rió y me dijo que me calmara, que todo ya había pasado y que si lo pensaba bien lo que me había pasado era muy gracioso, en ese momento me hizo reír lo que era muy raro en mi porque yo nunca sonreía, en ese momento me llego una notificación al celular, mi blog estaba alcanzando millones de visitas y seguidores, lo que me alegro mucho ya que mi sueño era ser una reconocida escritora en Estados Unidos y me permitiera vivir en California; pero mis padres no tenían suficiente dinero para llevarnos a vivir allí. Cuando llegue al colegio me topé con el Sr Martínez,el profesor de inglés que llevaba muchos carteles en la mano, Alex y yo lo saludamos y le ayudamos a llevar los carteles, cuando llegamos a la sala de Maestros, el profesor emocionado nos dio uno de los carteles en donde decía que el colegio iba a hacer la primera inmersión a California durante 5 meses y que solo costaba 3 millones de pesos, yo muy emocionada le pregunte a Alex si iría conmigo, el me abrazo y me dijo que sí... Alex siempre me apoyo en cada locura que hacia, muchos decían que parecíamos novios y me parecía ridículo, porque yo lo veía como un amigo... o tal vez no.