Corazones en llamas

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Cuando llegamos nos dimos cuenta que las habitaciones eran compartidas, las habitaciones de los niños quedaban en el primer piso del hotel y las de las niñas quedaban en el segundo piso, luego le dije a Alex que tenía mucha hambre así que decidimos ir a la gran cafetería que quedaba al lado de la piscina, comimos una pizza grande entre los dos y reímos por horas, no negare que sentía algo en el estómago cada vez que Alex sonreía y la verdad me sonrojé un poco cuando él me dijo que me veía hermosa, en esos momentos él y yo estábamos muy cerca lo suficiente como para darnos cuenta que nuestras almas se estaban conectando y nuestros corazones se estaban flechando, no recuerdo muy bien que paso en esos momentos, creo que estuvimos a punto de besarnos hasta que llego la profesora Patricia que nos dijo que debíamos irnos a nuestras habitaciones ya que a las 5:00 de la tarde íbamos a tener un tour y debíamos acomodar nuestras cosas y conocer a nuestros compañeros de cuarto; Alex y yo nos despedimos con un beso en la mejilla y quedamos de vernos en el tour.

Cuando llegue a mi habitación conocí a 3 niñas a las que nunca había visto antes, nos presentamos y luego entre ellas comenzaron a hablar, en un principio me sentí incomoda porque soy muy tímida al conocer nuevas personas pero ellas fueron muy amables conmigo y me integraron al grupo, ellas me preguntaron si el chico con el que me vi en la cafetería era mi novio, yo me sonrojé y nerviosa les dije que no, ellas se rieron y me dijeron que Alex y yo haríamos una bonita pareja, las cuatro nos reímos y sin darnos cuenta ya faltaba muy poco para que comenzara el tour así que decidimos ir bajando a la recepción ; y allí me encontré a Alex, los dos nos abrazamos y luego nos subimos al bus en donde recorrimos California, yo me sentía muy feliz ya que era la experiencia más increíble de mi vida, pero sentía que algo me faltaba, era la primera vez que extrañaba a mis padres así que cuando finalizo el tour y llegamos al hotel decidí llamarlos a la casa pero nadie contesto, eso me puso muy nostálgica pero cambie rápidamente de humor para irme a la habitación y que nadie notara que me sentía triste.

Decidí caminar por la cafetería, mi estado de humor era terrible, estaba viviendo el sueño de mi vida, pero me sentía culpable, no sabia si a mis papás les había pasado algo y saber que ellos siempre me habían apoyado y yo nunca fui una buena hija con ellos.

En ese momento Alex me abrazo, apareció de la nada y casi me mata del susto.

-Hola.. que haces levantado?

- Vi cuando saliste de tu habitación y note que estabas triste... que paso? te puedo ayudar?

Lo volví a abrazar y le conté todo.. como me sentía y mis miedos

-No te preocupes, mañana volvemos a intentar o buscamos una biblioteca y tratas de escribirles por Facebook, pero no te angusties mas, y recuerda siempre que te apoyare siempre, sin importar que pase... puedes contar conmigo.

En ese momento estuvimos a punto de besarnos hasta que vi a un hombre que estaba entrando a la cocina con guantes y un maletín, no le alcance a ver la cara pero me dio mucho miedo así que le dije a Alex en el oído que nos fuéramos rápido, el acepto y nos fuimos a nuestras respectivas habitaciones.