Capítulo I.-¿Nos mudamos?

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—Madisson ya levántate—escucho que grita mi madre desde el otro lado de la puerta de mi habitación

—Ya estoy despierta— digo alargando cada letra de cada frase

—Recuerda que nos mudaremos dentro de poco tiempo así que tienes que estar lista y espero hayas terminado de empacar tus cosas anoche— dice y después de eso escucho que se va.

¿Tener mis cosas listas?, se nota que mi madre ha estado ausente en estos días

Con esto de la mudanza, el velorio de mi hermano menor y vender esta casa mi madre si que ha estado algo ocupada.

Me levanto de mi cama y me dirijo a mi ducha a darme un buen baño después de la pesadilla de anoche que me ha hecho terminar bañada en sudor.

Una vez que termino de vestirme y arreglarme tomo mi celular, mis audífonos y mi libro lista para la mudanza.

—Buenos días Madisson— me saluda mi papá desde la cocina

—Buenos días papá, ¿Todo bien?— digo tomando una manzana del frutero aún sin empacar

—Sí, ya sube al auto de Esteban ya nos vamos a ir— dice y después de eso veo si va con uno de los que están ayudando a subir las cosas a los camiones de mudanzas

—¿Pueden revisar la habitación e mi hija? por si falta algo, por favor es el que está subiendo las escaleras el primer cuarto a la izquierda—

—Claro que si señor Makenzi— dice el jóven

Yo termino de comerme mi manzana y la tiro en la bolsa de basura, tomo mis cosas de nuevo y me salgo de mi casa, puedo visualizar a las personas que están ayudando y entre todas esas personas veo a mi mamá y a mi hermano mayor e inmediatamente me dirijo a ellos

—Hola mamá—la saludo de beso—Hola Esteban—lo abrazo y deposito un beso en su mejilla

—Hola pequeña— me sonríe mi hermano—que floja eres hermanita ya todos estábamos con la mudanza y tu dormida— esboza una sonrisa

—Lo siento señor madrugador- golpeó levemente su hombro

—Vamos chicos ya es hora de irnos- nos dice papá abrazando a mi mamá— por un nuevo comienzo, todo saldrá bien- hace una leve pausa—lo prometo—mira a mi mamá y besa su frente

—Tu Madisson te vas con Esteban y yo con su padre, nos vemos allá- se sube al auto y mi papá comienza a manejar

—Vámonos se ha dicho—y en eso enciende y arranca el auto mi hermano

  — ¿Puedo poner música?—  le pregunto a mi hermano

— Si claro, ¿Qué música quieres?— dice buscando en su celular— es más coloca tu la música—  me entrega su celular y yo lo agarro

— ¡Listo!—  coloco una canción

  Después de colocar la canción mi hermano y yo comenzamos a cantar, parecería que hay una fiesta dentro del auto de Esteban.

— ¿Libro nuevo?— escucho la voz de Esteban

— Si, así es, me lo ha regalado papá hace poco— 

— Haber si después me lo prestas, claro cuando es que tu lo acabes— me sonríe 

— Si claro, ya sabes que si

— Tengo sueño— bostezo a la vez que digo eso

— Y eso que te has despertado una hora después que nosotros— suelta una carcajada

— No es mi culpa que ame dormir, además dormir es bueno— chasqueo la lengua

— Tu amas dormir, comer y leer— vuelve a sonreír

— te faltó escuchar música y salir a patinar— le guiño un ojo

— Cierto— me mira a los ojos— entonces creo que te va a gustar la casa nueva

— ¡¿Espera qué?!—  hago una pausa—  ¡¿Tu ya conoces la casa nueva?!—  lo miro entrecerrando los ojos

— Pues—  alarga la palabra

— ¡Esteban!— me exalto— ¡¿Porqué no me habías dicho?!— cruzo mis brazos sobre mi pecho

— Lo lamento, pero quiero que tu misma lo veas, solamente te diré que te vas a enamorar de la casa, si no querías salir antes de la antigua casa, mucho menos de esta— suelta carcajadas

— Pues eso espero, amo quedarme en casa— 

— Ya me di cuenta de eso desde hace mucho hermanita— 

— Te quiero Esteban— lo abrazo

— Sabes que también te quiero mi pequeña— deposita un beso en mi cabeza 

— Bueno, ¿Puedo dormir ahora si?— le pregunto haciendo cara tierna

— ¿Qué te he dicho de esa cara?, no es necesario hacerla, sabes que si puedes, te despertaré antes de que lleguemos a casa. —  baja el volumen de la música

— Gracias Esteban—  después de eso me quedo dormida al instante. 

*****Tiempo después*****

  — Hey, Madisson, despierta— escucho que una voz masculina me habla — ¿Madisson, estás bien?—  escucho la voz de nuevo y me puedo dar cuenta que es la voz de Esteban

— Sí, estoy bien ¿Porqué lo preguntas?—  me froto los ojos con mis manos

— Estabas diciendo que no mientras estabas dormida y te has movido varias veces durante tu sueño—  me mira con cara preocupado

— Lo siento, es que recordé el accidente de auto— comienzo a llorar y es así como comienzan a caer lágrimas por mis mejillas 

— Lo se, fue horrible ese accidente y se que es difícil para todos más porque Luke falleció en ese accidente, pero ¡hey! ya está en un lugar mejor, está cuidándonos desde el cielo y sin dolor alguno— me abraza y besa mi cabeza

— Lo extraño Esteban, era solo un niño, era mi hermano menor  — digo entre lágrimas y sollozos

— Un niño es y así se quedó, para disfrutar toda su eterna niñez sin preocupación alguna y aún así que haya fallecido, aún así es nuestro hermano— me apega a su pecho

  — Lo se, lo se, pero es que ¡¿porque no fui yo?!— digo a gritos

  —Cada quien es a su momento Madisson, mira ya, deja de llorar en diez minutos vamos a llegar a la nueva casa, una nueva casa, una nueva vida, un nuevo comienzo.

Una nueva casa, una nueva vida, un nuevo comienzo...

El chico de los tatuajesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora