Capítulo 13

1 0 0
                                    

"Tonta, tonta, tonta" se reprendió a si misma Kasandra, necesitaba su mente despejada, no enamorada, necesitaba resolver ese caso. Sonrió, Aquella noche había sido perfecta, recordó las caricias, los besos, los susurros. Alex la observo, era raro ver a Momo9930 tan contenta

─Faby ¿Por qué tan contenta? ─pregunto Alex

─Zeth te he dicho que no me llames Faby y no te importa─ dijo ella infantil

─A ese paso, no te vas a casar─

─Y tú tampoco─ ambos rieron, desde que la misión empezó a mejorar ellos se habían hecho amigos, aunque aún no tenían la confianza suficiente de revelar sus identidades a esas alturas sabían que como compañeros uno arriesgaría su vida por el otro

─Déjame adivinar─ dijo el al verla tan resplandeciente ─ Te enamoraste─

─Por supuesto que no, yo no me enamoro─

─Tu sonrisa dice todo lo contrario─ El rostro de Kasandra se tornó rojo─

─Deja de decir tonterías y ponte a trabajar, mañana regreso a la "MTMV" y tendremos trabajo que hacer─ lo reprendió Kasandra buscando zafarse de un tema que quería evadir a toda costa. Alex encogió los hombros, aunque Kasandra lo negara, estaba enamorada

***

Fabiola Pacheco regreso a las oficinas, volvió a entrar por el almacén abandonado y a atravesar los autos controlados por campos magnéticos, cuando entro sonaron vítores, Kasandra no creyó que la fueran a recibir tan emocionados, pero conforme fue observando, la gente no se alegraba de su llegada, al menos no tanto, en la pantalla que estaba al fondo de la sala leyó "MISIÓN 120 ES UN ÉXITO, FELICIDADES A TODOS" Kasandra palideció, las cosas se habían adelantado sin embargo como Fabiola sonrió. Leonor la morena que le había dicho donde se encontraba el café el primer día se acercó a ella con alegría en los ojos.

Los televisores y computadoras se apagaron

"Les dije que saldría caro su ambición y sus ganas de guerra. Otra jugada de odio y pagaran más caro de lo que creen, espero que valoren el reglo que les he dado, a partir de ahora, sin internet, sin teléfono, y sin relojes... son libres"

─Faby, lo logramos, el mundo no tiene señal, esto es increíble─ grito Leonor emocionada

─Lo sé, pero ¿Cuándo? ¿Cómo? ¿Dónde? ¿Por qué no me esperaron?─ pregunto atropelladamente Fabiola

─El "Verdugo" o "Señor del tiempo" como lo quieras llamar, ya sabes que no da hora exacta, minuto o segundo, simplemente cuando todo esta listo ejecuta el plan. Así que terminamos de colocar todo hace como media hora y cinco minutos antes de que entraras nos avisaron que todo iba a la perfección, la gente fue desalojada, se destruyeron las redes, por fin, mis hijos van a compartir tiempo conmigo─ Abrazo a Fabiola y la estrecho en sus brazos─ ¿Aparte sabes lo que esto significa?─ dijo señalando todo ─Mañana veremos al bombón del tiempo─ dijo alzando y bajando ambas cejas

─ ¿No que tienes familia?─ le pregunto Fabiola

─Soy divorciada─ dijo Leonor

─Oh, qué mal, lo siento─

─No te lamentes, él era un estúpido y yo no iba a aguantar sus tonterías, así que lo deje, aparte el jefe esta para morirse y ninguna mujer aun estando casada podría resistirse a el

Kasandra alzo una ceja, cuando imaginaba al verdugo, veía a un típico capo mexicano o a algún viejo y amarillento conquistador.

─Mañana tu y yo iremos a comprar algo digno para presentarnos ante al jefe─ Fabiola asintió

─Excelente, aunque yo no creo gustarle─ dijo tímida. Señalando su ropa

─Si te pusieras algo más bonito que tus trapos anchos y viejos te verías mucho mejor─ Fabiola la miro con los ojos abiertos impresionada

─ ¿En serio?─ pregunto Inocente

─Si─ dijo tomándola del brazo y jalándola hacia su ordenador─ Ves aquel de allá─ dijo señalando a un hombre alto, con la frente pronunciada y vestido de traje, un hombre que se notaba que pertenecía a una oficina aun en pijama, pulcro a más no poder. Fabiola asintió confundida─ Se llama Tomás, le gustas, pero tiene miedo de espantarte si es muy directo─ Fabiola abrió los ojos impresionada

─ Pero... yo no lo he visto nunca─ dijo Fabiola

─Es amigo cercano del Verdugo, uno de los jefes de más alto nivel, por lo que me entere el otro día, gracias a él estas aquí─ le explico Leonor

─ ¿Qué dices?─ pregunto Fabiola impresionada

─Si, el día que hablas con Moisés, ese día él estaba en la oficina, cuando le conto lo que sabias hacer y le enseño una foto tuya acepto de inmediato, ni siquiera tuviste que pasar por el interrogatorio o las pruebas de identidad, dijo que una nerd como tu era indefensa y que te quería cuidar, así que por hoy, podrías hablarle aunque sea para darle las gracias. ─ Leonor empujo a Fabiola en su dirección

Los mejores crímenes se cometen en silencioDonde viven las historias. Descúbrelo ahora