Fanaticos De Corazón [Lucas Vázquez]

T R I G E S I M O T E R C E R O: ❤Final❤

James planificó con el equipo un almuerzo antes de viajar a Milan en busca de la Champions.

Yo estaba invitada, como una de las novias del jugador #22 del RM.

Mi corazón tenía nombre y apellido, a quien le pertenecia: Álvaro Morata.

Y si, debia confrontar que Lucas ya estaba comprometido y no cambiaría la opinión acerca de eso.

Mientras me alistaba, un Álvaro Morata desesperado se encontraba en el auto apurado por almorzar, si, él decía que yo era la muerta de hambre.

Nos dirigimos a la casa de mi hermano. Al llegar, Anna recibió con los brazos abiertos a su “tío” y noté que Lucas lo escuchó perfectamente, creyendo que era él.

-¿Tía? ¿Cuando me quedaré a dormir con ustedes? -James me miro esperando una respuesta-

El ustedes no debia estar metido en la pregunta, aunque me gustó un poco saber que Anna quería que yo siguiera con Álvaro.

-Cuando tu quieras -Ella sonríe satisfactoriamente-

Almorzamos entre risas, el equipo blanco podía llegar a ser los bromistas más grandes del mundo, y eso a veces, me estresaba, y otras veces, me gustaba.

Tome camino hacia el baño, tras unos minutos en él, salí y me encontré con Lucas.

-Alejate Lucas.

Sus brazos se colocaron en los extremos oponiendo mi paso hacía la sala de la casa.

-Quiero hablar contigo.

-¿Y que quieres hablar? ¿Me quieres contar que eres feliz con Jessica? Pues, no necesito saberlo, así que vete y dejame en paz -Bufé y me cruce de brazos-

-No tienes idea de porqué me casaré
-Dice y bajó la cabeza- Y quiero que seas la única que se entere.

-No gracias Lucas, no quiero saber porqué te casarás... -Cerre los ojos y suspire-

-Lucia... -Me tomó del brazo-

-Me perdiste Lucas, olvídate de lo que tu y yo tuvimos, ya eso no tiene valor y mucho menos para ti -Bajé las escaleras y él solo se quedó arriba-

Me detuve en medio de las escaleras y las lágrimas fluyeron.

Debía ser fuerte, debía... Debia olvidarme de Lucas, pero mi corazón no podía.

Podría decir que mi mundo se basaba en Álvaro pero aún sentía algo por Lucas.

-¡Lucia! -Escuche la voz de Álvaro- Vamos, iremos a llevar a Anna a su clase de ballet.

-Está bien.

Me despedí del grupo, no me sentía bien, y Álvaro lo notó, aunque no quiso preguntar.

***
Tomamos rumbo a Milán. Rebecca, Daniela, Anna y yo. Para mi amiga, este viaje tenía mucha importancia; hoy estan cumpliendo su aniversario de mes y es muy especial para ambos saber que lo celebrarán durante las horas en las que pueda o no proclamarse campeones.

Llegamos al estadio. Buscamos nuestros asientos y ya los chicos se encontraban en el cesped.

Daniela estaba inquieta, aunque no tenía idea del porque.

-Lucia, necesito que me acompañes al baño.

Asentí, tenía un dolor en su vientre que le impedía disfrutar del partido.

-¡Estas embarazada! -Exclame y ella rió- ¿Ya lo sabías?

-Si, es una sorpresa para James, Lucia, no le cuentes nada, perderá el sentido
-Asentí- Ahora si vamos a disfrutar el partido.

Estuvo muy parejo el partido, al final quedó 1 vs 1 y tuvieron que ir a los penales. Estaba histérica, ganar esta champions tenía mucho sentido. Sería un año historico para el RM de Zidane.

¡Ganamos! El grito de emoción de los chicos fue muy hermoso, ganar la undecima champions para el RM, fue importante.

Álvaro me pidió que bajará al igual que las familias de los chicos.

-Necesito que te pongas aquí... -Dice Álvaro mientras corríamos para dar posición en el circulo que tenia como objetivo dar inicio al encuentro- Ahora cierra los ojos. Cuando te diga ya los abrirás.

Morata sabia que mis nervios se alteraban a las sorpresas, me gustaban pero a veces me descontrolaba por completo.

-Ahora ya puedes abrirlos.

-¿Te gustaría casarte conmigo Lucia? Musitaron todos a la vez.

El plantel del RM tenían en sus manos un pancarta que tenía un anillo en el centro y unas rosas en sus alrededores.

Morata estaba arrodillado y tenía un anillo adjuntado en una caja.

Instantáneamente, mis lagrimas salieron y lo primero que hice fue abrazarlo.

-Eso quiere decir que si, si me casaré contigo, Álvaro Morata.

Me alzó en sus brazos y el grupo completo se juntó con nosotros en un abrazo.

-Te adoro, Lucia. Gracias por hacerme tan feliz en tan poco tiempo, quiero tener de todo contigo, quiero hacer todo contigo, eres mi vida, Lucía Rodríguez.

Y sentí la mirada de Lucas, estaba mal, su rostro lo denotaba.

Ahora ambos seremos felices, creo.

Nunca podré decirte que estoy con ella por su salud Pensó Lucas.