-¿Que haces aquí? -Musite
Mis ojos se llenaron de lágrimas. El muy descarado vino a dar la cara. Años de amor y del amor inigualable que le ofrecí. Y ahora viene a dar la cara de su idiotez y estupidez.
-Lucia, tenemos que hablar... -Se acercó a mí y tomo mis manos- Quiero explicartelo.
-Lo tengo claro, Matias. Así que por favor vete... -Daniela se me acercó y tomo a Anita para llevársela-
-Habla con él. Aclara las cosas, nada más... -Dice Daniela y se llevó a rastas a James-
-Quiero arreglar las cosas... -Tome su mano y fuimos al patio de la casa-
-Habla de una buena vez -Me cruce de brazos-
-¿Quieres la verdad? Pues tendrás la verdad. Ya me sentía sólo, no había pasado ni una semana desde que te fuiste y me sentia abandonado, no queria contarte nada al respecto porque sabria que te sentirias mal y la idea de venirte te iba a sentar peor. Nadie estuvo allí para mi cuando lo necesitaba, quería tenerte a mi lado y observar tu sonrisa. Acepto mi error, busque a otra persona para olvidarme de ti, del sentir de tus labios con los míos, de tocar tu mano, de mirar tus ojos, de provocar esos hoyuelos en tus mejillas, de sentir tu cabello en mi espalda... Quería buscar una manera para olvidarte, porque sé que aquí en España tendrás a otra persona y de que nos olvidariamos rápidamente... Pero no fue así, como yo lo había pensado. Estoy tan enamorado de ti, Lucia. Esas palabras que te dije en aquella carta tienen toda la verdad de todo lo que siento por ti, hubiese escrito un testamento pero no quería aburrirte. Si no me perdones, está bien... Es tu opinión y no puedo cambiarla. Cometí un grave error, Lucia. Lo siento, por favor...
Estaba nervioso. Sabía que estaba nervioso porque movía sus manos al hablar, sus manos estaban sudadas y su frente goteaba góticas de sudor, sus ojos estaban llenos del mismo brillo que tenía el día que nos oficializamos como novios. Quería sonreír y abrazarlo, y pues, eso fue lo que hice.
-Te perdono... Pero no quiero que pienses de esa manera. Si llegamos a terminar, estarás en un bonito lugar en mi corazón, Matias. Eres lo mejor que me ha pasado
-Nos miramos por un largo rato, sus labios se unieron con los míos, tras un mes, la misma sensación seguía, y el mismo amor que le tenía fluia- ¿Tienes donde quedarte?-Si, me quedaré en casa de mi tía Maria. ¿Querrás mañana ir a almorzar allá? -Esa señora siempre me ha tenido un cariño inmenso, ellos hablan mucho en Skype cuando él está en Venezuela y ella me conoció, era como otra madre para Matias-
-Si, está bien... -Asintio y se despidió de Laura-
-Adios, Lucia -Sonrio y me abrazo- Gracias, en verdad...
-Adios, Matias -Bese su mejilla y él abandono la casa-
Al verlo irse, suspire, sentía que me había quitado un peso de encima. Subí a mi habitación y me cambié para colocarme mi pijama. Tocaron la puerta de mi habitación y grite un adelante.
-¿Se arreglaron? -Pregunto Daniela y se sentó en la casa-
-Me dijo la verdad de lo que ha pasado. Y bueno... le creí, fue tan verdadero la manera en la que me habló... No pienso volver con él... bueno... Él tiene que demostrarme que me ama... -Musite y ella asintió-
-Es así pequeña... Duermete ¿si? Mañana me acompañarás a hacer unas compras y llevaremos a Anita al colegio -Asenti-
Daniela abandono la habitación y me acosté en mi cama.
Tenía todo en claro. Seguía enamorada de Matias, nada en este momento lo cambiaría.
ESTÁS LEYENDO
Fanaticos De Corazón [Lucas Vázquez]
FanficElla lucia siempre el escudo blanco que representada a Madrid y parte de España. Él tenia que defender ese escudo cada vez posible, y ha sido su más grande sueño. No se conocieron por casualidad, se conocieron por obligación y todo eso se convirtió...