Salgo de la cama intentando no despertar a Wes.
-Has fallado. -dice con voz ronca. -Me desperté.
-¿Que fue lo que paso anoche? -le pregunto sin recordar nada.
-Pues tal como puedes ver, nos acostamos.
-Eres un genio Wes. Ahora enserio, ¿que ocurro?
-Pues.., estábamos en la barra haciendo una ronda de chupitos con tu prima y Mike. Y viste a Dave con una chica bailando y los cuatro cubatas que te tomaste y las rondas de chupitos creo que te afectaron. Bueno, Mike y Tabi se fueron porque estaban muy borrachos y se fueron para el hotel y nosotros también, ya que ni te podías mantener en pie. Y solo recuerdo eso.
-¿Y como nos llegamos ha acostar?
-No se, estábamos borrachos.
-Otra vez no...
-¿Otra vez?
-Larga historia. Lo siento mucho Wes.
-¿Sentirlo? Mel te amo desde que te conocí pero desapareciste y encontré a Amber, ella fue la que me hizo olvidarte pero volviste a llegar y todo mi amor volvió. Te quiero M.
Lo miro incrédula por lo que acaba de decir.
-Lo siento, tengo.., tengo que pensarlo. -digo poniéndole las bragas y saliendo al pasillo del hotel para ir a mi habitación.
-Mel, que haces semi...
-Lo siento Mike tengo prisa.
Salgo corriendo hasta la última habitación del pasillo.
La abro y entró.
Me acercó a mi maleta y sacó un vestido de flores estampado.
Me lo pongo. Y le envió un mensaje a mi prima diciendo que no me quedo al desayuno del día después de la boda.
Menos mal que me deje mi móvil y mis cosas en la habitación.
Cojo la maleta y salgo
-¿A donde vas? -pego un bote al oír la voz de Dave que me hace tirar mi bolso y mi móvil.
-Me.. Me voy a casa. -digo sonado normal.
-¿Ya? Aun no hemos desayunado. -sonríe.
-Ya.. Pero... -inventaté una escusa idiota. -Tengo que irme mañana por una sesión de fotos a ultima hora, ya sabes esta vida de ser fotógrafa es muy.., aventurera.
-Ahh..
-Adiós. -cojo mi bolso y corro con mi maleta hacia la salida.
Miro hacia ambos lados nada más salir del hotel en busca de un taxi.
-¡¡Taxiii!! -grito nada mas ver uno.
Se para delante mía. Sale una mujer para ayudarme con mis maletas. Le sigo la dirección de mi casa y pone rumbo a ella.
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Le pago a la mujer del taxi y le sonrió por a verme ayudado a bajar la maleta.
Entró en mi casa dejando la maleta tirada por la entrada. Y mi bolso en el sofá.
Como coño he podido ser tan estúpida de acostarme con uno de mis mejores amigos.
Amo a Wes, y no negare que he sentido cosas por él. Pero.., soy una zorra.
Ayer con Wes y antes con Dave. Debería pensar lo que me dijo Tabitha de sentar la cabeza. Tengo veinte años y aun sigo comportándome como una adolescente de dieciséis.
Me siento en el sofá para buscar mi móvil en el bolso.
-No esta. -digo poniendo el bolso al revés para que todo lo haya dentro caiga.
-¿Donde esta mi maldito móvil?
Suspiro cansada.
Si, definitivamente tengo que hacerle caso a Tabi y centrarme.
Dejar de ser una zorra y despistada, a una chica madura y ordenada.
Suspiro.
Me levanto del sofá para ir al baño a ducharme.
Tengo que quitarme todo.
Pero.., ¿sería Wes o Dave con el que me quedaría?
Me desvisto y me meto bajo el agua tibia. Cierro los ojos pero escucho como el teléfono fijó suena.
Nadie me llama a ese teléfono solo mi jefe.
Salgo casi corriendo de la ducha para cogerlo.
-¿Si? -pregunto nada mas cogerlo.
-¿Mel? -pregunta mi jefe.
-¿Pasa algo Mark?
-Oh, no. Creía que estabas en la boda de tu prima.
-Lo estaba. ¿Que necesitas?
-Necesitó que pases unos meses en Argentina. Es para hacer unas fotos sobre... -se para -No se sobre algo.
-Bien, cuando saldría.
-¿Esta tarde puedes?
-Eh.. Claro, preparo las cosas y te llamo.
-Perfecto, nos vemos Mel.
Corta.
Al final mi escusa de que me iba por trabajo, no va a ser una escusa sino verdad.
Vuelvo a la ducha para terminar mi baño.
Al salir, me visto con ropa cómoda y empiezo a hacer las maletas.
Debería de llamar a Tabitha para que no se preocupe.
Cojo el fijo, ya que es el único teléfono que tengo en este momento y voy casi corriendo a la cocina.
Abro el cajón de debajo de las especias y empiezo a buscar el pequeño papelito que me dio Tabi con su numero.
Cojo todos los papeles y los llevo al cuarto.
El número de Wes.
El de Kea.
El de Chad, lo abro y lo rompo en muchos pedazitos.
Abuelos.
Ally.
Tabitha.
Lo abro y marco su numero en el fijo.
Un toque.
Dos.
Tres...
-¿Si?
-¿Tabitha? -pregunto para ver si me he equivicado.
-¿Melanie? ¿Donde mierda estas?
-Eh si eso. Larga historia. Te la contare cuando vuelva de Canadá.
-¡¡Canadá!! -grita lo que provoca que me separe el teléfono del oído.
-Si...
-¿Por que me llamas del fijo?
-Larga historia... Te la contaré. Si ves mi móvil por el vestíbulo me lo coges para darmelo. Te quiero, chau. -digo rápido y le cuelgo.
Llevo mis maletas a la entrada y vuelvo a la habitación para coger mi bolso y mi neceser.
Meto todos los números en el bolso y salgo.
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Entre Dos Hermanos
De Todo¿Que pasaría si una chica amiga de una chico desde pequeños vivieran justos? ¿Y si también viviera su hermano? ¿Y si ellos se conviertieran el estrellas de la musica? Lo pasara muy bien viviendo de cine con ellos. Pero.... Y si le ocurriera algo...