No se cual es la gran diferencia de amar y querer, de una manera tan extraña que un ser humano pueda sentir, en ocaciones me siento como el más idiota hablando de esto.
No sé cómo reiniciar esta vida de nuevo, si debo ser el mismo de los sentimientos rotos o ser el que no siente nada y que se la juega por todas la verdad es algo difícil de hacer ¡jajá! mejor no pienso eso, me quita el tiempo.
Tengo que concentrarme por otras ¡cosas! Como por ejemplo el examen de la universidad lo tengo dentro de diez días y no he estudiado nada todo por andar de idiota pensando cosas que me hacen daño. Me falla mucho matemáticas y una que otras cosas de historia, algo que odio de los exámenes para entrar en cualquier institución es que te piden los conocimientos básicos.
─ ¡Joven Alberto! Su tutor solicita hablar con usted y sus compañeros ─ Interrumpió mis ¡pensamientos!
─ Claro profesor ─ ¡Jajá! conteste asustado, la verdad lo hizo.
Me fui directo a la oficina del tutor y ya estaban ese par de locos estúpidos de mis compañeros la verdad hasta hoy siento cierto aprecio por ellos, no me había dado cuenta de su interés, no, apoyo si, si es eso; bueno ellos me invitaban a fiestas los fines de semana y uno que otro día en horas de clase a jugar básquet pero yo no quería por pensar en otras cosas.
─ Profesor ya sabe cómo somos nosotros, ándele perdone nuestra pequeña travesura ─ Decía Luis.
─ Jóvenes esta vez no se los pasare por alto tendrá un castigo ─ iba llegando
─ Tendrán que recoger toda la basura de la escuela y limpiar los pizarrones ─ No era castigo para nosotros sabía que haríamos otra guerra ¡jajá!
─ Esta bien profesor lo aremos ─ Todos salimos de la oficina caminamos unos cuantos salones y oficinas cuando todos nos echamos a reír vaya que esto era genial.
─ Jajá este tutor no supo ponernos algo peor ─ Decía Richard.
Seguíamos andando por los pasillos hasta llegar al aula no sé pero tengo un presentimiento que algo malo iba a pasar hoy no sabía que era pero solo tenía esa desilusión pero no hice caso.
Las horas pasaron volando como estrella fugaz por si no lo sabía siempre que veo una pido un deseo; les diría que es lo que pido pero, si les digo no se cumplirá ¡jajá! Lo se parezco un infantil.
Me encuentro sentado en la última clase de matemáticas por más que le pongo atención no me entra nada por la cabeza y esto me está preocupando un poco; Mientras tanto me concentro en realizar una ecuación cuando de repente suena el timbre de salida, tremendo susto me lleve lo más genial es que nadie lo vio. (Me gusta sentarme hasta atrás)
A liste mis cosas para largarme a casa, espere a Fanny para irnos justos; cuando mis pupilas visualizaron a Carolina y Pablo en el estacionamiento de la escuela él había venido a traer sentí como el corazón se me iba a salir hubo algo que me sorprendió o me dolió no sé muy bien que sentimiento estoy sintiendo.
Pablo miraba a Carolina con tanto cariño y amor se había enamorado de la mujer que amo o ame la verdad esto me quema sigo mirando sin disimular que es hacia ellos; Comprobé que Carolina verdaderamente estaba enamorada de sus miradas decía todo lo que sentían. (Cuando siento que me abrazan)
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Fanny me abrazo tan fuerte y me dijo deja de mirarlos que no vale la pena torturarte, ya saliste de tu oscuro rincón donde ellos te dejaron así que no caigas de nuevo.
─ Te juro que nunca más volveré a sentir algo tan fuerte por alguien ya no más sufrimiento ─ Dije.
─ No jures maldito imbécil eso es como decir nunca voy a sonreír ─ Me solté a reír
Ella sabía cómo animar en momentos como estos, los chicos llegaron al lugar donde nos encontrábamos ellos nos miraron con cara de que pasa cuenten, cuenten; Fanny les hizo una seña y miraron hacia donde estaban ellos. Miraron con los ojos muy abiertos y dijeron.
─ Es enserio que te dejo ¿por Pablo? Amigo mío Hay chicas mejor que ella mira con quien te cambio ─ Dijeron en resumen.
─ ¡Ja! No soy quien para juzgarla pero la verdad la veo muy bien y eso me da felicidad; ya saben uno acepta cuando perdió en el amor.
─ No que se había acabado el amor ─ Dijo Luis
─ Esta bien Luis ella fue la que me dijo que ya no me amaba ─ Le dije un poco exaltado, me fui del lugar.
No quería seguir en el mismo lugar que este idiota como se atreve a cuestionarme y decir cosas como esas acaso sabe algo. Si es así, lo enfrentare para que suelte todo.
NARRA LUIS
─ Eres un tarado Luis ─ Dijo Fanny, se fue tras Alberto
La verdad tenía muchas ganas de soltarle toda la verdad Alberto pero no puedo es algo que va más allá de mí, no puedo romper una amistad de años, pero como seguir callando. Si, si soy un gran ¡IMBECIL! Por callarme si es que lo considero un amigo en mi vida.
Pero tarde o temprano tengo que decir la verdad el sol no se tapa con un dedo, maldita la hora que los presente sabiendo aquello.
─ Hey Luis en que piensas ─ Dijo Sergio con mucho interés ─ Nada, nada ya larguémonos ─ Dije sin más.
─ Vaya Luis no sé qué este pasando contigo pero ya deja de joderle a Alberto él no te ha hecho nada ─ Comento Richard.
─ Lo sé, por esa razón no hay que tocar este tema cuando este el, ella no merece sus lágrimas ─ la verdad es que no lo merecía, nos despedimos como todos los días y cada quien se fue por su lado.
LLEGO UN MENSAJE
Carolina: que ha pasado contigo por que no contestas los mensajes.
Luis: ¡Deja ya de joderme de una vez! Que no te cansas.
