Capítulo 23.- Cada quien ama a su manera...

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Me quede estupefacta, seguramente Nicolás le hablo acerca de la "confusión" que tuvimos, mejor dicho que armé para evitar decirle quién era realmente...

-Entonces...- se levanto perfectamente sexy, mi Dios! Viene hacia de una manera tan pero tan esquisita, que estoy ardiendo!- suspiras por el de las noticias? -levantó una ceja, mis mejillas estaban por estallar tras esa pregunta...

-Y tú... Mi amor, por quien suspiras? -le seguí el juego mientras acercaba mis manos hasta tocar su pecho.

-Definitivamente por la del clima! -a caray!

-Ah si? -estábamos rozando narices.

-Es una rubia preciosa, de ojos, que... Se vuelven azules cuando está feliz, segura de si misma, tan jodidamente sexy que paraliza mi corazón cuando escucho su nombre, y verdes... Cuando algo le preocupa, algo esconde... Pero lo que mas amo de ella... Es esa mirada, que tiene cuando está con "él del noticiero"; daría mi vida entera por que la conservará...

-Y ella daría la vida, por estar con él, así fuera un segundo...

-Hacen bonita pareja! Que no? -nos miramos a los ojos, sonreímos..

-Perfectamente! -me besó...

-Tus labios son esquistos! -mmm... Tengo que controlarme, Nicolás no debe tardar, y yo... Me estoy derritiendo como estúpida!

-Tengo tantas ganas de... -esa idea suena muy tentadora - porque me la debes! -me tenia totalmente paralizada... Sujetándome con una mano la cintura y la otra la cara, Dios no quería moverme...-y esa mi vida... Me la pagas!

-A ver, " Don Me la Pagas", alguien me debe unos... -se mordio el labio, ahi va... Su mano en mi cadera- Y qué harás si me niego! -trate de provocarlo aun más...

-Estas segura que te negarás? -mis piernas me estaban traicionando... A buena hora! Y sin decirme agua va... Me tumbo en la cama, oh mi Dios! Adrenalina pura!

-Ya no puedo más...-bajo hasta mi cuello, quiero más...

-Pues tendremos que esperar, porque no quiero estropear nada con Nicolás... -se retiro... Que! Otra vez! Erika está realmente enojada! Pero Teresa acepta que tiene razón. Me tomo de las manos, me jalo para ayudar a levantarme, uff, me tomó de la cintura, me cargó, yo sonreía encantada, Dios! Pero qué hombre! Me besó rápidamente...

-Buenos días! -poco faltó para que lo aventara hasta por allá; Dios que vergüenza! A mi edad...

-Buenos días Lore -sostenía una charola con desayuno para tres...

-Yo ayudé! -Nicolás brincaba de un lado para otro, corrió hasta donde me encontraba y se me fue encima, llenándome de besos, si no es porque Eduardo estaba cerca, hubiéramos caído terriblemente...

-Mis amores! -cargó a Nicolás y lo subió hasta la cama, me quedé mirando, me pregunto si... No! No puedo hacerme esa pregunta! El hecho de tan si quiera atreverme... Sería como renegar de Nicolás, y eso jamás! Lo que si puedo permitirme, es pensar... Como seria mi vida... Con Eduardo a mi lado?

-Porqué me llamas así! -sueño interrumpido y con una terrible muerte... Nicolás jamás lo aceptará...

-Como porqué? -por favor que Eduardo no la riegue! -acaso no sabes que todos los niños son amor?

-Porqué? -y ahí viene el interrogatorio... Típico de Nicolás!

-Porque son el resultado de dos personas que se aman, -Gracias Lalo! La acabas de meter hasta el fondo.

-Ah! Osea que mi papá si me quiere! -ahí viene el tema! Ya no puedo más... Me acerqué a la charola y con suma delicadeza la jale hacia nosotros...

-Claro que te quiere,y no solo eso, te ama- tomé mi taza de café, le dí un sorbo... Caliente...sumamente... Así me gusta! Comencé a cortar la fruta, tomé un trozo de papaya... La tengo preparada por si alguno de los dos vuelve a decir una "burrada", se le retipujo!

-Me ama? - la voz de Nicolás... No quiero que entremos en crisis nuevamente...

-Pero por supuesto "Campeón"- le dió un pequeño trancazo en el brazo, a puño cerrado- solo que... -se llevó una mano al cara- cada quien tiene manera diferente de amar; aunque para ti, no sea la correcta, para él sí... -lo cargo- y no debes cuestionar su amor, al contrario aceptarlo... El vendrá cuando él quiera, en el momento que menos lo esperes, pero mientras sucede, ama a esta bella madre -me miraron, un nudo me estorbaba en la garganta- que sin duda, es la mejor de todas, te ama, como nadie lo hará, tu deber, es cuidarla, protegerla, y lo más importante, hacerla feliz!

Nicolás estaba llorando, yo hacia tremendo esfuerzo por no hacerlo, Eduardo se acercó y me besó la frente...

-Te amo mamá... -se me fue encima... Entre besos y abrazos...

Eduardo me tomo de la mano...

-Gracias! -asintió con la cabeza! Mientras mandaba un beso.

¿Qué hay detrás...?.- Sigo siendo AprendizDonde viven las historias. Descúbrelo ahora