2 meses después...
NADINE P.O.V.
Tengo cinco meses y mi vientre ya comenzó a notarse, son mellizos; Heiko está que rebosa de alegría porque ya puede hablarles para que empiecen a reconocer su voz, y más aún porque son vísperas de Navidad; su taller ya está en función, y ya se hizo de algunos clientes; lo que me ha preocupado estos ultimos meses, es el estado de su padre, pero Heiko siempre evade el tema cada que se lo insinúo
-Oye Steve, ¿Heiko te ha dicho algo sobre su padre?- pregunté mientras lo observaba cargar a su hijo menor
-Por qué habrían de decirme algo-
-Crees que no he notado que ustedes se volvieron "comadres"- exclamé frunciendo el ceño mientras me cruzaba de brazos
-Solo intercambiamos consejos de padres- se quejó, -no es para tanto- murmuró
-Steve- insistí
-No sé nada Mamá Osa- contestó alejándose de mi
-¿Mamá Osa?- susurré confundida
HEIKO P.O.V.
-Ya hacia falta un sitio como este en la ciudad- dijo un cliente nuevo después de haberle reparado su auto
-Es lo que muchas personas me han dicho- admití sonriendo, -tenemos servicio de grúa también- anuncié entregándole una tarjeta, -llame cuando lo necesite-
-Así lo haré, gracias- se despidió subiendo a su auto
-Señor recibimos una llamada para apoyo de grúa- anunció uno de los trabajadores
-Ve- ordené
-La señorita pidió estrictamente al dueño- comentó
-El hecho de que se acerque Navidad, no quiere decir que se cumplan todos tus deseos- dije serio, -ve tú, y lleva herramientas para darle el servicio que necesite ahí-
-Bien señor-
-Saldré un rato- anuncié quitándome el uniforme, dejé todo en la oficina y salí para después tomar rumbo a la librería
Pasaron solo unos cuántos minutos de camino para que llegara hasta mi destino, cuando entré me encontré a Nadine atendiendo detrás del mostrador a una pareja
-Felices Fiestas- exclamó mientras les entregaba su compra
-Hola cariño- saludé sonriendo mientras me recargaba en el mostrador
-Hola amor- saludó suspirando
-¿Está todo bien?- pregunté preocupado y me apresuré para estar a su lado
Negó con la cabeza, -tengo hambre- se quejó haciendo puchero
Reí, -qué se les antoja a mis amores- pregunté colocando una mano en su vientre ya abultado y otra en su cintura
-Es una lista muy larga- contestó sonriendo
Reí, -Creo poder manejarlo-
...
-¿Cómo va el taller?- preguntó Nadine después de haber terminado de comer
-Bien, mejor de lo que esperaba- contesté sonriendo
-Me alegro que te vaya bien...- sonrió tomando mi mano sobre la mesa
-Que nos vaya bien- corregí besando su mano
-Por supuesto, nos- concordó, -espero que siempre sea así- agregó en voz baja, sonreí
-Por cierto, déjale la librería a Ashley para que ls cierre, y ve a casa a ponerte mas hermosa de lo que ya eres-
-¿Por qué?- preguntó extrañada
-Quiero llevarte a un lindo lugar, una cena, para ser exactos-
-¿Me pedirás matrimonio o algo así?- bromeó
-Y si así fuera qué- me enseñó la lengua
-Tonto- murmuró sonriendo
...
NADINE P.O.V.
-Sospechas algo- afirmó Ashley después de haberle platicado de los planes de Heiko
-No, sólo iremos a cenar-
-Pero realmente no crees que sea solo una cena, ¿oh si?- insistió
Suspiré, -no lo sé, tampoco quiero hacerme ilusiones- admití, -ademas, para mí lo mas importante es nuestro amor y nuestros bebés- dije sonriendo mientras acariciaba mi vientre
-¿Por qué siento que eres protagonista de un libro?- murmuró para sí misma
...
Me miré por última vez en el espejo después de haber recibido mensaje de Heiko, tomé mi bolso y bajé a su encuentro
-Soy tan afortunado- exclamó al verme
Reí, -muy gracioso, ¿a dónde me llevarás?- pregunté
-Es un sorpresa- contestó
-Que cliché- murmuré
-Hay que seguir el protocolo- dijo fingiendo seriedad
Minutos mas tarde ya sabía a dónde nos dirigíamos: la playa; seguimos por la carretera y dobló para entrar al camino de terracería. Cuando estuvimos cerca, se detuvo, apagó el motor y bajo del auto caminando hasta mi puerta para abrirla y ayudarme a bajar; caminamos un poco mas hasta que logré divisar una gran fogata esperándonos rodeada de algunos troncos
-Wow- susurré
-Y la noche apenas comienza- dijo divertido mientras caminábamos hasta sentarnos en un tronco
-¿Este es tu concepto de cena romántica?- pregunté divertida al ver una caja de pizza
-Shsh- rió, -solo disfruta la noche- reí también y asentí
Comimos en silencio, solo escuchando el ruido del mar y el sonido que emitía la madera al ser consumida por las llamas
-Este lugar me trae buenos recuerdos- habló Heiko
Suspiré, -si, así es- concordé sonriendo
-Antes de llegar aquí, creí que iba a resultar lo mismo para mí, un sitio aburrido- confesó, -que de diferencia iba a tener éste lugar a mi hogar, creía que iba a ser igual de tedioso y... aburrido- rió, -esas ideas y otras pasaron por mi cabeza, pero nunca imaginé encontrar al amor de mi vida en este lugar- sonreí mientras sentía como me iba sonrojando, -mi Diosa de cabello largo y ojos oscuros- murmuró acariciando mi mejilla, -cuando te conocí y comenzamos a salir, sentí que no te merecía y que en algún momento mi pasado vendría a cobrarme los pendientes que había dejado; pero después me dí cuenta que estaba equivocado, y que nada podría pasarme a tu lado-
-Iba a hacer esto antes, pero surgieron otras cosas que me hicieron retrasar mis planes- fruncí el ceño sin entender, metió su mano en el bolsillo de su pantalón y sacó una cajita de terciopelo
-Cliché- volví a murmurar sonriendo
-Protocolo- murmuró igual mientras la habría, un hermoso anillo de oro blanco se había estado escondiendo en su interior

-Dios- murmuré asombrada, -es hermoso- lo sacó de su sitio y tomando mi mano me miró a los ojos
-Creo que ya no es necesario hacer la pregunta ni esperar la respuesta- bromeó mientras lo introducía en mi dedo, -ya sé cuál es tu respuesta- murmuró
-Siempre ha sido la misma- susurré subiendo mi mano para acariciar su cabello
-Te amo- murmuró haciendome sonreír
-Te amo- repetí acercándome para besarlo
-Espera- interrumpió el beso sonriendo, inclinó su cabeza y besó mi vientre, -ellos también están aquí-
Reí, -por supuesto- asentí, alzó el rostro y besó mi frente...
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Bloqueo de escritor...
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Why Not?
RomanceSegundas Oportunidades, hay quienes dicen que todos las merecemos; que todos tenemos derecho a explicarnos y que tenemos la obligación de escuchar a los que nos fallaron, por más difícil que eso signifique; algunos lo hacen, dan segundas oportunidad...