Why Not?

Segunda Oportunidad

HEIKO P.O.V.

Muchas madres estaban paradas frente al portón blanco de la entrada de la escuela esperando las salida de sus hijos

-Recuerdo su cara el verano en que volvió- comenzó a decir, -su expresión al llegar y su expresión al irse, ambas eran totalmente distintas- suspiró y se acomodó mejor en su asiento, -¿por qué desapareciste?- preguntó volteando a verme

-Había estado teniendo problemas con mi padre y su nueva familia- empecé a explicar, -la señora con la que se había casado tenía una hija menor que yo, siempre estaba sobre mi, y no solo figurativamente, tuve que reforzar la puerta de mi habitación porque solía entrar por las noches o cuando estabamos solos- suspiré y negué con la cabeza, -una noche cruzó los extremos y me besó, su madre nos vió y me culpó a mi, mi padre me golpeó y me corrió de la casa, tuve que irme, amenazó con llamar a la policia si volvía a verme por ahi-

-Ni una llamada, una nota- dijo serio

-Para entonces empecé a creer que ella estaría mejor si alguien como yo desaparecía de su vida- confesé en voz baja, -no esperaba encontrarla, creí que ella había decidido quedarse en la ciudad de su tío, no creí que volvería aquí-

-La señora Denton falleció un mes antes de que Nidi terminara su carrera, para la lectura del testamente la llamaron; al principio creímos que le habia dejado alguna carta o algo pequeño de sus pertenecías, pero todos se sorprendieron al saber que en realidad habia dejado la casa donde vivió los últimos años a nombre de Nadine, hubo muchos problemas por eso, hasta nos fuimos a juicio- explicó, -cuando Nadine terminó la escuela volvió y vivió una tiempo en su nueva casa, era demasiado para ella sola, así que comenzó a rentarla y compró un departamento, ya no quiso irse después- explicó

-Está muy cambiada- susurre después de un rato de silencio

-Sí, fue un cambio impresionante ni siquiera yo la reconocía después-

-Necesito que me escuche- dije mirándolo

-Heiko, necesita un poco de tiempo- dijo mientras abría la puerta y salía, un niño pequeño corrió hasta a él y Steve lo cargó para abrazarlo

-¿Qué tal tu día?- escuché que preguntó al niño mientras lo ayudaba a subir a la parte de atras, escuché al niño contestarle entusiasmado, pero no presté atención a lo que decía

No creo que Nadine haya rentado la casa porque era demasiado para ella, sé que fue por algo más

-¿Y tú quién eres?- preguntó la voz del niño sacándome de mi ensoñación, giré para verlo y abrió mucho los ojos

-Un viejo conocido- respondió Steve mientras arrancaba el auto, el niño hizo el intento de hablar, pero le señalé silencio con mi dedo índice, el asintió y sorió

...

Steve se estacionó casi frente a la librería, salió del auto y abrió la puerta de su hijo para que bajara

-Espera aquí- me dijo por la ventanilla, se dirigió a la entrada del local y dejando pasar a su hijo primero, entraron

Unos segundos después salió y volvió a subir al auto

-Te llevaré, solo porque quiero creer que pueden arreglar las cosas, pero si no es así, no le dirás que fuí yo quien te ayudó, ¿de acuerdo?- preguntó

-De acuerdo- contesté

-Y si algo sale mal, juro que sí te partiré la cara- dijo serio

-Ok, ya entendí-

NADINE P.O.V.

El timbre de la puerta sonó interrumpiendo mi lectura, suspiré, me quité los lentes y me levanté para averiguar quien era

-¿Quién?- dije lamentando que mi puerta no tenga mirador

-Repartidor de pizza- rodeé los ojos, siempre se equivocan, debo atornillar bien el número de mi puerta; suspiro y abro la puerta para ver el número

-Suelen equivocarse siempre, mi número es el...- me callé al ver que mi número estaba bien, me giré a la persona frente a mi y me apresuré a cerrar la puerta

-¡¡Auch!!- gritó cuando mi puerta aplastó su mano, abrí la puerta un poco para que la sacara pero fue más rápido y logró meter la mitad de su cuerpo, siguió empujando hasta que estuvo dentro, tomé su brazo derecho y lo doblé en su espalda mientras lo empujaba contra la puerta

-Bien, eso no me lo esperaba- dijo con la voz entrecortada, rió

-Cómo diste conmigo- exigí

-Necesito que me escuches- dijo tratando de girarse, pero empujé mi rodilla contra su espalda baja, -cariño, me estás lastimando- dijo con un hilo de voz, suspiré y lo solté, -ok- susurró alzando las manos en señal de rendición, negué con la cabeza y me dirigí al sofá donde estaba

Miró a su alrededor mientras aclaraba su garganta, frunció el ceño y giró el brazo que le lastimé

-¿Dónde aprendiste a hacer eso?- preguntó

-Si vas a hablar, hazlo antes de que me arrepienta- dije sin mirarlo

-Yo no tuve otra opción mas que irme- dijo en voz baja, -mi padre llamaría a la policía si no lo hacía, y no volví porque...- suspiró, -porque creí que estarías mejor sin mi- susurró, cerré los ojos y negué con la cabeza

-¿Por qué?- pregunté

-Tú te preocupabas porque no encajabamos juntos, y al principio creía y te hice creer que eso era un error, que juntos estabamos bien, pero cuando te fuiste, me di cuenta de muchas cosas- hizo una pausa, -tú no eras la que no encajaba, si no yo- sentí como se sentaba junto a mí pero no me giré a verlo, -yo tenía problemas Nadine, y en algún momento ellos volverían a mí, y no quise que cuando ese día llegara, tu te vieras involucrada-

-Tu me lo prometiste- dije volteando a verlo, -ya no sé si debo confiar en tu palabra-

-Lo sé, sé que no basta con darte explicaciones y pedir perdón, pero te pido que me des una segunda oportunidad, eso es todo; empezaremos de cero, como amigos, nos conoceremos de nuevo- "deja vú", suspiré y miré al frente

-Nidi- susurró despues de unos segundos de silencio, -¿puedo abrazarte?- preguntó en voz baja, -por favor- suplicó

-Lo estás haciendo de nuevo- susurré negando con la cabeza

-¿Qué?- preguntó confundido, negué con la cabeza, -quizá esta vez podamos empezar como amigos, intentaremos no saltarnos esa parte- agregó serio, volteé a verlo y ví diversión en sus ojos

HEIKO P.O.V.

Me miró seria, suspiró y cubrió su rostro con sus manos mientras negaba con la cabeza, se quedó así por un largo tiempo, entendí la señal

-Está bien- dije en voz baja mientras me ponía de pie, -no volveré a molestarte- caminé hacia la puerta

-Heiko- detuve mi andar y esperé a que continuará, cuando no escuché nada mas me giré a verla, estaba a unos pasos de mí, sus ojos estaban vidriosos, estaba a punto de llorar

-Nidi...- no pude terminar porque corrió hasta mí para abrazarme, escondió su rostro en mi pecho como siempre lo hacía y rodeé su cintura con mis brazos fuertemente mientras la alzaba hasta mi altura...

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Lamento haber tardado tanto ●︿● pero no había podido escribir hasta ahora, la escuela y las tareas se me están haciendo un poquito pesados, por eso tardo, y seguiré retrasándome, lo siento porfavor sean pacientes ¿si?

Cuidense /.\