Capitulo 4.

903 50 3
                                    

Podíamos sentir cómo el camión comenzó a estacionarse, Steve y yo nos escondimos detrás de nuestro escudo para atacar si alguno de los enemigos aparece. Hicieron a un lado la cobija que tapaba la entrada del camión, uno de los enemigos se le quedo viendo a los escudos y Steve lo golpeó con este. Salimos del camión y comenzamos a caminar por aquel almacén, nos escondimos detrás de unos tanques, era el lugar más seguro. El coronel Phillips no estaba equivocado, era el lugar más vigilado de todos. No sabía cómo podíamos entrar, esto era realmente peligroso.

Steve.- Sarah si no quieres estar aquí puedes irte...- me volteo a ver preocupado.

Sarah.- tú saltas, yo salto.- prepare mi pistola.- Tú pelearas, yo pelearé.....estamos juntos en esto Steven, no te librarás de mi tan fácil.- ambos reímos levemente.

Comenzamos a escabullirnos y subimos a un pequeño edifico gracias aún tanque que estaba pegado a este, entramos al otro edificio donde al parecer estaban los prisioneros. Toque la puerta dos veces para que nos abriera el enemigo y atacarlos, la puerta se abrió dejando ver a uno de ellos y Steve lo dejó inconsciente. Comenzamos a escondernos entre las filas de armas que había, eran demasiadas y mucha seguridad. Por poco me descubrían si no fuera por Steve que me ayudó un poco. Comenzamos a avanzar y encontramos un círculo de metal con varias luces azules en eso, tomé un paquete pequeño de eso y lo guarde. Se lo daré a Howard para que lo vea. Había una puerta extraña, la abrí un poco y ahí estaban los prisioneros, estaban debajo del piso por donde pasaban los soldados enemigos. Steve vio que entre y me apoyo, deje inconsciente al único Soldado enemigo que había en ese lugar.

XX.- ¿qué se supone que son?.- uno de los prisioneros nos grito.

Steve.- soy el Capitán y Sargento América.- no me gustaba cómo se escuchaba lo de "sargento América"

Nos bajamos para ayudarlos a salir, teníamos las llaves para abrir las rejas. Eran demasiados, muchos prisioneros. Steve y yo detuvimos al que nos había preguntado quienes éramos, al parecer ese conocía a todos.

Sarah.- estamos buscando al Sargento James Barnes.- comenzamos a caminar hacia la salida.

XX.- creo que conozco ese nombre...hay una ala aislada pero nadie vuelve de ahí.- asentí y comencé a correr hacia dónde dijo.

Steve se había quedado para decirles la salida y luego alcanzarme en aquel lugar. Escuche cómo gritaban mi apellido, volteó y era Steve quién venía lo más rápido que podía, al parecer solo les dijo la salida y eso fue todo. Todo era un caos, los chicos vencían al enemigo, solamente que estos ahora usaban armas muy diferentes. Llegamos a un pasillo y vimos a un hombre pequeño salón de un cuarto, le gritamos que se detuviera pero escapó, entramos a la habitación y tenían un mapa de dónde iban a atacar.

XX.- sargento 3-2-5-5-7.- era la voz de él.

Estaba en una cama atado, tenía sus ojos abiertos y comenzaba a decir cosas incoherentes, Steve y yo nos acercamos a él para sacarlo de ahí. Steve le decía por su apodo, Buck, pero este no reaccionaba del todo, solamente nos veía fijamente. Steve comenzó a romper las cadenas que lo sujetaban dejándome a mi sola con Bucky.

Bucky.- ¿acaso eres....- no logró terminar la oración.

Sarah.- soy yo Buck.- tomé su rostro entre mis manos.- Steve y yo venimos por ti.- comencé a acomodarlo para levantarse.

Steve me ayudó a levantar a Bucky. Esté solo decía nuestros no,bares una y otra vez, le habían hecho algo realmente malo. Al estar de pie lo abrace con todas mis fuerzas, esté solo me abrazaba lo más que podía ya que le dolía todo.

We are Soldiers Donde viven las historias. Descúbrelo ahora