POV Sam.
- De verdad Rose, no lo veo necesario - Me quejo mientras soy arrastrada por Rose quien tiene una expresión seria en el rostro - En mi casa todo estaba bien, estaba más cómoda ahí.
- Esa no es excusa para faltar tres semanas a clases - Gruñó ella - Ni siquiera dabas señales de vida, tuve que ir hasta allá a buscarte.
- Pero Rose, escucha...- Deshago su agarre para que me voltee a ver - Esto es mucho más que lo que pasó con Chara.
- ¿Lo que paso con Chara? - Ella arquea una ceja mirándome - ¿Lo de la cafetería?
- No, no - Niego rápidamente con la cabeza - Lo que pasó después, al acabar las clases.
La cara de mi amiga pelinegra expresaba una genuina confusión. También me había quedado algo perdida, ella me había dicho que Chara le había contado todo lo que había pasado, entonces, en el paquete vendría incluido la historia de como me han partido en dos.
Dramático pero cierto. Así nos sentimos todos cuando alguien muy importante para nosotros nos rechaza y dicen no necesitarnos para absolutamente nada. Se que más de uno lo ha sentido.
- ¿Después de clases? - Rose estaba más que confundida - Chara no me contó nada después de clases de aquel día.
- ¿Ah no?
- No señor - Negó Rose y luego continuó caminando en silencio.
Eso es raro, normalmente me atacaría con preguntas esperando respuestas y yo negaría una y otra vez hasta que al final, después de tanto ajetreo terminaría aceptado y le contaría todo lo que se con lujo de detalles. Pero esta vez, Rose simplemente a dado media vuelta y a continuado el camino hasta el instituto con una expresión seria y confusa.
¿Por que todo a mi alrededor desde que salí esta mañana a cambiado tanto?
Don Jose, dueño de una tienda no ha abierto a la hora de siempre, los gatos que merodean en la basura de Doña Jacky no están, el perro de Mike no salió a saludarme, Rose vino hasta mi casa para ir juntas al instituto, mi padre no estaba en casa sino que en el trabajo y ahora Rose no tiene su lado curioso activo.
- ¿R-rose?
- ¿Hm? - Ella me voltea a mirar sin dejar de caminar.
- ¿Por qué no estás haciéndome un interrogatorio en plena calle?
Rose parpadea unos minutos dándose cuenta de ello.
- Oh bueno - Comienza ella con un tono nervioso - Has estado en una situación difícil y no solo lo digo por Chara, también me refiero a tu madre - Al mencionarla aparta la mirada - No quería ser egoísta y comenzar a preguntarte cosas que posiblemente te haría más daño recordarlas, soy curiosa y una shippeadora de primera - Dice con una sonrisa triste - Pero no me gusta que eso lastime a los demás y más aún sabiendo que se trata de mi mejor amiga.
Me conmueve la desgraciada, le perdono todo lo malo y creo que hasta me hará llorar.
- ¿Sa-sam? - Su sonrisa triste cambia a preocupación - ¿Dije algo malo? ¿Por qué llo...?
Sin dejarla terminar hablar me abalanzo sobre ella y la abrazo con todas mis fuerzas, con todo el cariño que le puedo ofrecer, con todo de mi, con todo de Samantha.
Esta es mi mejor amiga, una shippeadora, pelinegra de bandana de arco iris, melodramática, excéntrica, extrovertida, rara, que cree en mundos paralelos, una de las defensoras numero uno a LGBTI y cree que nuestra historia es una novela de ficción, esa, esa es. Mi mejor amiga Rose, no se que podría hacer si ella se fuera un día y me dejara sola. No se como agradecerle tanto y disculparme por mucho.
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Ellas son Sam y Chara
Romantizm- Son muy diferentes...demasiado. - Ambas son juzgadas por su orientación sexual, a una no le interesa, la otra se siente ofendida. - Son de grados distintos. - Una es dulce y amable, la otra es grosera y no le interesan los demás. -Ella adora leer...