17° consejo: Conoce a tu personaje

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Seguramente este consejo ya lo sabías y sino, genial. Cuando lo leí la primera vez no podía entender como eso podía servir, y la realidad, es que me ayudó mucho.

Hablá con tu personaje para conocerlo mejor.

Es algo raro y en muchas situaciones resulta divertido.

¿Alguna vez les paso qué mientras creaban un personaje para una historia había piezas que no encajaban en el rompecabezas?

Saben que clase de personaje va a ser, (villano, protagonista, héroe, que existe solo para morir, etc) y, sin embargo, muchas veces hay cosas que no podemos terminar de aclarar.

El consejo es el siguiente:

Una vez que tengas las principales características del sujeto (edad, físico, nombre, y así), toma tu computadora, celular, tablet, piedra, papiro, en lo que sea que escribas y desarrolla una escena.

Claro que dependiendo del personaje, es donde vas a transcurrir el encuentro. Si es un asesino, en una sala de interrogatorios, si es él típico nerd, biblioteca. Si es medio normal, pos ni idea. Creen un lugar público (si es un asesino o un loquito, mejor un sitió de máxima seguridad) donde el personaje se sienta a gustó, ya de paso tienen un dato más para la historia, y así como por "accidente" o no, se encuentran con él.

Desarrollen una situación dónde puedan preguntar cosas sobre él, también describan gestos o actitudes. De esa forma van moldeando más y más. Claro que no porque sos el escritor te va a responder todo.

No se crean Dios.

El echó de que sean su creador/a no quiere decir que te tiene que tratar como a una reina. Hay cosas que todo ser humano no respondería. También puede ser que el personaje sea cerrado y entonces le cueste hablar, o odia a la clase de personas con tú actitud y entonces... No se, te tira un vaso a la cabeza.

Una vez terminado el encuentro, puede ser con una pelea, lágrimas, o un abrazo, cada quien toma su camino.

Cuando terminas de escribir volves a leer todo (sin corregir nada) y podes hacerte una idea de la clase de personaje que tenés en manos.

También puede ser que el personaje no sirve para la historia, entonces lo matas y pasas a otra cosa.

Es un ejercicio bastante útil si lo piensan, tienes un desarrollo diferente del personaje, y hasta puede ser un buen ejercicio, estas escribiendo cosas de la historia que tal vez ni se te había ocurrido.

Otra cosa a tener en cuenta, es que puedes decidir el punto cronológico en que sucede dicha conversación. Si se realiza antes del inició de la historia, es obvio que ante una pregunta cómo:

—¿Mataste a Grover?

Va a responder:

—¿Por qué lo haría? Es mi mejor amigo

Pero vos, en esa retorcida mente de escritor/a, ya sabes que él mato a Grover.

La respuesta cambiaría si se desarrolla en medio del conflicto o al final. Dependiendo de cada quién.

Nota: También puede ser que con algunos personajes hables en diferentes partes de la historia, entonces cada quien tendrá como partes que los otros no van a saber.

Creo que eso fue todo... Espero que les sirva de algo este pequeño consejo. ¡Cambio y fuera!

KaraDiAngelo-16

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