Lea

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Abro mis ojos y lo único que puedo ver es oscuridad, mis ojos están pesados y la cabeza me duele. No puedo recordar que fue lo que pasó. Tengo vagos recuerdos, pero nada que me pueda ayudar a saber donde estoy .

Cierro mis ojos con fuerza y lo único que puedo ver es un recuerdo de mi papá y de mi, arreglando aquel Nissan blanco con pintura vieja al igual que el resto de sus partes, una punzada en mi cabeza y de manera tan rápida , como si estuviese viendo un video de fotografias comencé a ver los mejores momentos de mi vida. Desde que nací hasta hace unos días que festejamos el cumpleaños de papá, cuando estábamos todos juntos como una verdadera familia unida. Mi cabeza comenzó a doler y mis pulmones no recibían oxigeno adecuadamente, mi pecho ardía y mis oídos se comenzaron a tapar. Un insoportable sonido comenzó a sonar haciéndose cada vez mas fuerte. Me levante respirando fuertemente tocando mi pecho con la mano derecha.-   Todo fue un sueño, todo fue un sueño.- Repetía una y otra vez.

Descubrí mis piernas desnudas levantándome de la cama y caminando hasta mi ropero revolviendo mi ropa para encontrar algún pantalón y reemplazar mi short de pijama, me desesperé al no encontrar nada caliente que me cubriera las piernas  y salí del cuarto hacia el patio, luego entré en la cocina y seguí caminando hasta llegar al WC, prendí la luz y cerré la puerta como hacía habitualmente cada día. Terminé mis necesidades y me lavé los dientes, la cara y las manos.

Entré al cuarto de mis padres para peinarme y recoger mi cabello en una cola. Me mire al espejo con detenimiento al notar que las cosas detrás de mi se veían a través de mi.