12 años de Mia.

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¡Hola!, no tenia pensado escribir todo lo que pasaba por mi mente del pasado de Mia por que se supone que es una historia corta... iba a hacer pequeños Flash back como hasta ahora. ¡pero aqui esta!
Al ser un extra sera un poco largo con escenas fuertes, si no lo quieren leer no hay drama, no se pierden de casi nada... creo.
(...)

#Mia 12 años de edad, séptimo grado, niña nerd, aspirante a ser abogada como su padre.

-¡Oye Mía! -Gritan a mi espalda - ¡Felicidades por tus notas!
-¡Gracias Duncan! -Respondo Feliz.

Ese chico me gusta.

Salgo de la escuela y camino dos cuadras hasta la parada de autobús.
En el camino veo a mi tío Bernal haciendo señas para que me acerque.
Voy hasta el corriendo y lo saludo.

-Hola tío bernal... -De inmediado el niega con la cabeza.

-Ya te he dicho me me digas ber cuando estamos a solas. -Dice dándome un beso cerca de la boca.

No me gusta estar a solas con mi tío por que siempre me acaricia.

-Sube, vamos a casa, tus padres viajaron y estoy a cargo -Dice con voz ronca, sus ojos estan oscuros y un poco rojo, me asusto un poco pero trato de disimular con una sonrisa.
Espero que mami venga pronto.

Miro hacia la ventana y me tenso al sentir su mano en mi rodilla moviendo lentamente.

-¿Como te fue en la escuela cariño? -Pregunta.
-Bi-bien - tartamudeo, aclaro mi voz y respondo de nuevo -Bien, aprobe el ultimo examen.

-Me alegra que seas dedicada a sus estudios. -sube mas su mano mirandome -Te tengo un regalo muñeca -Aprieta su agarre y saca su mano de mi.

Aparca el coche y baja, abre mi puerta para que yo salga y nos encaminamos a su casa.
-¿Puedo ir a la habitacion de mi tía a descansar? Es que estoy un poco cansada -Digo rogando a que me deje ir.

Parece dudar pero acepta.
Voy casi corriendo a la habitacion que era de mi tia, mi tia muerta.
Un dia aparecio su cuerpo con signos de violecia, pero nunca supieron quien fue.

Cierro la puerta y trato de ponerle seguro, carajo... no cierra.
Voy a otra habitacion y tampoco tiene seguro, ni siquiera los baños se pueden cerrar.

Tengo miedo.

Me vuelvo a ir a la habitacion de tia y trato de mover los muebles hasta la puerta, pero no tengo fuerza, intento varias veces mas hasta que escucho a alguien subir las escaleras.
Con el mueble a mitad de la puerta me voy al baño y me encierro ahi.

-Pequeña ¿Estas lista para obtener tu regalo? -Escucho que toca la puerta- ¿Por que esta cerrado la puerta Mia? ¡Abrela ya! -Dice furioso.

Siento mi celular vibrar.
Mis padres me lo dieron para cualquier emergencia.

Atiendo la llamada ya que es de mi papá.
-¿Hija donde estas? ¡Me tienes preocupado! - Escucho ruidos en la puerta, y me acurruco mas -Niña cuando vas a venir, Mi hija tengo miedo de que te pase algo. Acuerdate que ya es de noche, solo tienes 12 años cariño.

Escucho el ruido de algo romperse y grito.

-¡Papi, papi! ¡Salvame! No quiero estar aqui, tengo miedo, mucho miedo, el me quiere hacer daño papi, ven por mi -Digo llorando.

Mi tio Bernal abre la puerta y me mira enojado.

-¡Papi ven ya! -grito antes de que el salte por mi y me arrebate el celular estrellandolo contra la pared. -¡No! ¡No! ¡No! ¡papi!
-Muy mal Mia, muy mal. -Me regaña y toma mi mano arrastrandome fuera del baño. -Te voy a enseñar a portarte bien, a no insinuarte a hombres, no tienes que comportarte como una puta.
-No me hagas nada tio por favor, quiero ir con mis padres -Lloro.

-No quiero escucharte -Me tira en la cama y busca algo en su bolsillo.
Va a mi lado y amarra mi mano como puede por que me retuerzo y pataleo mientras grito, luego me luego me pone una tela en la boca y lo ata detras de mi cabeza.
-Sera mejor que te calmes niña, me estas cansando.
No le hago caso y sigo retorciendome en busca de un milagro para poder desatarme y huir...
-Te he dicho que te calmes condenada niña -grita dandome un fuerte golpe en la cabeza, siento que estoy flotando entre el miedo, la angustia y el terror de lo que esta a punto de pasar, no soy estupida, al ver en las noticias un caso de violacion recurri al internet para informarme, y no me gusto.
Lloro sintiendome mareada.

(...*)
Siento algo en mi nariz, es alcohol.
-Tienes que estar despierta para que veas y sientas tu regalo - me siento asqueada con lo que dice y peor al notar que los dos estamos desnudos.
Niego con la cabeza llorando.
No, no, no, no...
-Eres hermosa florecita... yo se que quieres amor, siempre te insinuas para tu tio ber -besa mi pecho con delicadeza chupa y muerde, siento una corriente abajo, me asusto y lloro.
-Oh nena... -dice metiendo un dedo dentro de mi, duele. -Se que te gusta amor -niego con la cabeza y eso lo hace enojar, adentra otro dedo y grito del dolor. -No lo nieges perra.
Me sigue embistiendo con su dedo, y sigo retorciendome y llorando.
Saca sus dedos y me penetra de golpe.
Siento el doble de dolor, siento que me voy a morir... no soy capaz de aguantar y me desmayo.

(...*)

Paso un dia desde que estoy aquí. Un dia de tortura continúa... ya no duele, pero me siento sucia, repugnante.
¿Como puede ser que yo tenga Orgasmos? ¡Se supone que yo no quiero que esto siga! ¡Mi cuerpo me traiciona!

(***)

-No más por favor - digo llorando al ver que se acerca a mi -Ya no más.
-Yo digo cuando ésto termina, ¿entiendes florecita? Y mas vale que te calles si no quieres más golpes.
Lloro por que ya no se que hacer, trate de huir de muchas maneras pero bernal siempre me atrapa y luego me pega, no hay cuchillos en la cocina ¡Nada!
Me desnuda y yo pataleo

(...)

Bajo las escaleras muy despacio con un jarrón de porcelana que encontré en el ropero de mi tía.
Veo a mi tío en su sillón viendo un partido.
-¡No imbécil! ¡A la izquierda! ¡No! -Grita.
Reúno toda la fuerza, odio e ira y rompo la jarra por su cabeza.

Tomo la cinta scotch que a veces usa para inmovilizarme y le ato las manos y los pies, también pongo cinta en su boca.

Busco las llaves y al encontrar me voy hacia la puerta pero me detengo.
El merece sufrir. El tiene que sufrir.
Le tiro agua en la cara para que despierte.
-Tienes que estar despierto para que veas y sientas tu regalo Tio. -Digo con rabia.
Pateo en su entrepierna hasta que me canso, escucho sus gemidos de dolor y eso me hace bien.
Empiezo a tirarle todo lo que encuentro a mi paso mientras le grito todo lo que siento hasta que pierde el conocimiento.
Desconecto su televisor y tiro al piso.
Ya cuando me canso de hacerle daño salgo de la casa y cierro la puerta con llave dejandole encerrado como el me tuvo a mi.
Me voy a la parada de taxi.
Y le digo al señor que me lleve a mi casa, que mis padres pagarán.
Lloro por que soy libre, Lloro por que al fin pude huir de esa casa, Lloro por que ahora puedo respirar tranquila.

****
Y esto es lo que la atormenta.
Es perverso... iba a ser mas fuerte pero lo deje así.

Reviviendo - Crónicas De Un Amor IIDonde viven las historias. Descúbrelo ahora