Capítulo 16

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-UN MES Y MEDIO MÁS TARDE-

El invierno ha llegado de forma evidente. Era un día habitual de trabajo cuando desperté para hacer la rutina del diario. Aunque ha sido un mes difícil luego que supe de la muerte de Kwangmin, he podido sobrellevar todo. Mis padres siguen en Corea ya que quieren regresarse cuando estén totalmente seguro que me siento mejor y puedo seguir sola. Luego que mis niños estaban satisfechos, salí primero a dejar a mis pequeños a la guardería y luego dejar a Ilayda en el colegio. Como todos los días, despedí a mi princesa con un beso en la frente luego de dejarla en el salón. Luego tome camino para ir hasta la universidad. Allí tomaba mi típica taza de café en las mañanas mientras revisaba el periódico y se daba la hora de entrar a trabajar. Dada la hora de entrar, me levante y camine hasta el salón de la primera clase. El día avanzó para llegar el medio día y comer el almuerzo que traje de mi casa. Sentada comiendo charle con Lorna y otros compañeros de trabajo. Ya cerca de volver a entrar a clase recibí la llamada de la maestra de Ilayda.

Maestra: Podrías pasar por el colegio – preguntó

Kristal: Le pasó algo a mi hija – pregunte

Maestra: No – respondió – pero si se peleo con un compañero – notifico

Un poco preocupada por la razón que Ilayda se peleo con un compañero de clase, le pedí a Lorna que me excusara con el jefe y salí sin pensarlo dos veces al colegio de Ilayda. Al llegar me presente en la oficina y allí vi a mi niña llorando y a otro niño junto a sus padres llorando. Me acerque y le pregunte a la maestra que fue lo que pasó.

Maestra: Estaban jugando de lo más normal hasta que de momento escuche a su otro compañero llorar – narro – y entonces vi a Ilayda pegándole a su compañero – añadió

Kristal: Les dijo que fue lo que pasó – pregunte

Maestra: La niña esta negada a hablar – respondió

Mire a mi niña y sé muy bien que tiene que tener una razón por la cual lo hizo. Le pedí a la maestra que me dejara hablar con mi niña y preguntarle qué fue lo que pasó. Me acerque y primero le quite sus manitas que limpiaban sus lágrimas para seguido limpiarle la carita llena de lágrimas.

Kristal: Porque Ilayda le pegó a su compañero – pregunte

Mi niña me miro y no quiso responderme a lo que le pregunte. Volví a insistirle pero no quiso decirme nada.

Kristal: Mamá promete que no te castigara fuerte si le dices cual fue la razón por la cual le pegaste a tu compañero de clase – volví a insistir

Ilayda: Se estaba burlando – respondió

Kristal: De que se estaba burlando – pregunte

Ilayda: Me dijo huérfana – dijo inicialmente – y que mi papá no me quería y por eso fue que se murió – añadió

Suspire luego que escuche a mi niña decirme la razón por la cual le pegó al niño. Sabía que mi niña no es capaz de pegarle a otra persona sin una buena razón. Me levante y me dirigí hasta la maestra.

Maestra: Te dijo porque le pego a su compañero – pregunto al acercarme

Kristal: Me permites hablar con los padres de esté niño – pregunte

Maestra: Claro – dijo

Me dejaron a solas luego que pedí que sacaran al niño y lo mantuvieran lejos de mi hija. Me quede mirándoles unos segundos para iniciar a hablar.

Kristal: Pensaran que vine a pedir disculpas – dije inicialmente – pero se equivocan – acerté – mi hija, Jo Ilayda, hija de Jo Kwangmin y mi hija – nombré – no es una niña que irá por los lugares para pegarle a sus compañeros u otros niños así porque así – especifique – yo la crie junto a mi difunto esposo y conozco de lo que es capaz de hacer mi hija – comenté – y mi hija al igual que cualquier otro niño se sentirá muy triste al perder a su padre a tan temprana edad – añadí – para que venga un niño irrespetuoso e insensible a decirle cosas crueles – alague – como "huérfana" o "tu papá no te quiso y por eso se murió" – repetí las palabras de mi niña – y algo que me consta – dije – mi difunto esposo amaba a mi hija – acerté – yo lo vi como se sintió de alegre cuando supo la existencia de Ilayda, cuando mi pansa se hacia día tras día grande para hacer evidente que mi bebé crecía fuerte y cuando nació fui testigo de su inmensa sonrisa haciendo obvio que estaba feliz – añadí – y no voy a permitir que un niño irrespetuoso que parece que no le han enseñado lo que es el respeto ajeno dañe a mi hija solo por querer ser mas guapito del grupo – dije – y ni se atrevan a responderme que a ustedes como padres le irá peor – añadí culminando

You are not a bad girl - 3ra temporadaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora