The Chemistry [VICTON]

넷...

—¿SeungSik-hyung?

—ByungChan, ¿estas con SeungSik? —SeungWoo sonaba sorprendido del otro lado del teléfono.

—Yo... Hyung... Estoy en casa—dijo ByungChan antes de colgar.

SeungSik se levantó del suelo en donde estaba sentado, para así ver al menor que se encontraba algo nervioso por la repentina visita.

—No esperaba que vinieras pronto—dijo el menor.

—No esperaba que SeungWoo hiciera eso—dijo el mayor.

ByungChan trago duro y luego camino a paso lento a la puerta, bajo la atenta mirada del mayor, para abrirla y que ambos pasaran y estuvieran más cómodos. Se quitaron los zapatos y ambos se sentaron en el sofá de la sala.

—¿Porqué?

—Porque, ¿qué? —dijo ByungChan.

—¿Por qué la mato?

El menor le miro y luego volvió su vista al café que aún reposaba en sus manos. No recordaba cuando fue la última vez que se sintió nervioso y preocupado por no saber que decir. No recordaba cuando fue que SeungWoo comenzó a hacer eso con las jóvenes que llevaba a casa.

Simplemente no sabe que paso.

—No lo sé.

—No me mientas.

—No lo hago, solo SeungWoo-hyung sabe el por qué, yo...—dijo buscando algo que pudiera tener coherencia a lo que tenía que decir—. No sé cuándo comenzó a cambiar.

SeungSik le miraba, intentando comprender todo lo que dijo el menor, pero no podía creerle, no después de que ayer le previno el haber abierto la boca.

—¿Le tienes miedo? —pregunto el mayor.

ByungChan tensó su cuerpo. ¿Le tenía miedo a SeungWoo? No. No le tiene miedo, el mayor le cuida, le ayuda y siempre está para él. ByungChan no le tiene miedo, solo está preocupado por lo que está haciendo el mayor, solo era eso. Negó con la cabeza.

SeungSik creyó que el menor le mentía ya que se veía tan tensó y no le miraba a los ojos, pero tal vez, este diciendo la verdad y no quiera que su hyung salga lastimado.

—Está bien—dijo soltando un suspiro de frustración—. ¿Dónde está él?

—Viene para acá...

—Lo esperaré.

ByungChan asintió. Se levantó del sofá para irse a cambiar y preparar un poco de ramen para comer. Aún no habían hecho la despensa del mes, por lo cual no tenía muchas cosas con que cocinar.

SeungSik por su lado, solo estaba checando su celular y pensando en lo que paso. ¿Realmente SeungWoo había sido capaz de matar a la chica solo porque le envió al lugar equivocado?

El menor estaba en la cocina, así que se levantó a ayudar a limpiar un poco el lugar. Odiaba que no haya limpieza, además, ByungChan le caía bien y no parecía ser un mal chico. Entró a la cocina asustando al menor, tomo una bolsa negra y regresó a la sala para recoger toda la basura.

SeungSik deseaba que SeungWoo no estuviera enloqueciendo.

>**<

SeungSik se sentía deprimido. No sabía cuándo fue la última vez que esperaba más de una persona y no resultaba ser como comenzaba a creer. Tal vez eso es lo que le está haciendo sentir extraño cada vez que piensa en SeungWoo.

—Debo estar loco—susurró para sí mismo.

Sus padres le habían marcado apenas SeungWoo cruzó la puerta de su departamento. No pudo hablar con el mayor ya que su madre sonaba desesperada. Así que ahí estaba en casa de sus padres, que extrañamente quedaba a 20 minutos de la casa del mayor, ya que estos se habían mudado hace tres años.

—Por favor hijo, entiende que esto es un poco difícil para nosotros—hablo su padre.

—Está bien, dejaré la escuela y trabajaré para poder ayudarles.

Su madre le abrazó emocionada. SeungSik sabía que solo le estaban manipulando. Su madre le quería cerca para que le ayudara y él no estaba muy en contra, ya estaba harto de la escuela y quería un respiro.

Quería que dejaran de pasarle cosas raras.

Camino de vuelta a la cocina para terminar de hacer la comida y escucho a sus padres decir algo acerca de vender algunos muebles y así poder comprarle más ropa. Odiaba que hicieran eso, cuando su madre sabía que no los necesitaba, pero, a fin de cuentas, no podía negarse.

—Cariño, mañana tu padre irá para traer unas cosas de tu departamento—dijo su madre con una sonrisa—. A fin de mes estarás viviendo con nosotros.

Solo asintió y sirvió la comida, para después despedirse de sus padres.

Debía volver antes de que se hiciera más noche y aún tenía dos horas que viajar. Odiaba haber decidido irse a una ciudad alejada.

Iba observando su celular, dispuesto a tomar un taxi a la estación, pero alguien tomo de su brazo y comenzó a jalarle hacia un rumbo desconocido. No podía ver el rostro de aquel extraño, ya que llevaba capucha puesta.

—Oye, suéltame.

Escucho una risita por parte de su captor y entonces se estremeció. Recordaba esa risa. Vaya que la recordaba.

SeungSik comenzó a resistirse del agarré del contrario. Sea lo que sea que estaba haciendo SeungWoo no funcionaría, no se lo permitiría.

—SeungWoo.

—¿Qué? —dijo molesto. —Tenemos mucho de qué hablar.

—Yo no—dijo jalando su brazo—. Me estas lastiman...

Jadeo sorprendido.

SeungWoo le estaba besando.

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