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La casa-quinta "La Joya" que papá mantenía en las afueras de Córdoba Capital era el lugar elegido para celebrar Halloween ese año. Mi familia y yo llegamos la mañana del viernes, y para ese entonces mis tíos y primos ya estaban allí.


- ¡Bru! - El grito de Shaila, mi prima, me distrajo una vez que bajé del auto.

Sonreí y corrí para abrazarla. Al separarme vi a Ramiro, Axel y Natasha acercarse para saludar.

- ¿Y Thiago? - Quise saber.

- ¿Por qué tan emocionada? - Se burló Sam pasando por mi lado.

Mis amigos intercambiaron miradas cómplices antes de cambiar de tema.

- ¡Tessa y Paulo llegaron! - Anunció el tío Lucas desde el quincho.

- ¡Al fin! - Exclamó Candela corriendo para abrazar a mamá.

- Bruna, que grande estás. - Comentó Sebastián dándome una vuelta en el aire.

- Los años no vienen solos.

- Decimelo a mí. - Musitó papá uniéndose a la conversación.

El ruido de un motor apagándose llamó la atención de todos; en la orilla del lago se encontraba una de las motos acuáticas con Thiago sobre ésta. Sonreí y comencé a caminar en su dirección, pero mi andar se detuvo al ver una figura femenina salir de detrás de él.

Sentía todas las miradas de mi familia en mi espalda, como si ya se veían venir ese momento.

- Vamos Bru, tenemos que buscar los trajes de baño.

Asentí a las palabras de Shay, no quería seguir viendo como esa chica compartía saliva con Thiago.

Apenas entramos al cuarto que compartíamos con Nat, mi mejor amiga me miró con lástima.

- Ella es Ava, una chica que Thiago conoció en Niza y la invitó a venir unos días.

- ¿Su novia?

Mi amiga negó. - Son como amigos con beneficios.

Asentí. - Bien, - sacudí mi cabeza, como si eso fuera a sacar las imágenes de ese momento, y sonreí. - busquemos nuestros trajes de baño y vamos al lago.

TESSA HALE

Coloqué la gran bandeja con ensalda sobre la mesa mientras observaba a Benjamín, Samuel y Bruna jugar en la orilla del lago junto a Ramiro y Shay. Dejé salir un suspiro cuando Thiago y su nueva amiga se unieron a ellos, incomodando a todo el grupo de adolescentes.

- Saben que tenemos que hacer algo con Thiago y esa chica, ¿no? - Habló Dana desde su lugar en la mesa.

- ¿Qué tiene de malo Ava? - Preguntó Seba.

Meredith lo miró mal. - Ella no es el problema, idiota. Es Bruni.

- ¿Qué pasa con mi hija? - Musitó Paulo dejando de lado su celular para comenzar a poner atención a la conversación.

Twitter; Paulo DybalaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora