Sacrificios para la felicidad (Nowaki x Hiroki)

CAPITULO 3 Malos entendidos.

---Shinobu---

Llegue a mi departamento tratando de fingir que no pasaba nada. Al entrar mire a Miyagi calificando unos exámenes en la sala.

-¿Cómo te fue con Kamijou?
-Muy bien, encargamos unas flores hermosas.
-Me alegro. –comento sin quitar su vista de los exámenes.
-Miyagi podrías verme cuando te comento algo, es una falta de respeto hacer eso.
-Lo lamento es que debo poner toda mi atención en los exámenes, pero sabes que te escucho no tienes por qué molestarte. –comento irritado.
-Porque no me gusta que hagas eso.
-Si no te parece te puedes... -no término la frase.
-¿Qué? –lo mire.
-No, Shinobu yo... -dejo su examen a un lado.
-Vete al diablo. –comente y me encerré en mi habitación.

Me deje caer en la cama, me mordí la lengua para no soltar alguna lágrima y afortunadamente no lo hice.

"Si no te parece te puede ir... Eso ibas a decir ¿verdad Miyagi?"

Se empezaron a escuchar unos golpecitos en mi puerta y yo solo la mire.

-Shinobu yo, -suspiro- lo siento.
-...- no conteste nada.
-Sé que no debí decir eso pero, -comento- debes entenderme estoy estresado y tú me molestan con... -se detuvo al darse cuenta de las palabras que iba a decir.

"Molestar"

-Luego hablamos estoy ocupado. –comente.
-¿Pues qué estás haciendo ahí encerrado? –pregunto exaltado.
-Masturbándome que más puedo hacer. –grite enojado- No molestes que no tengo ganas de hablar.

Me recosté y me tape con todas las cobijas. Escuche las pisadas de Miyagi arrastrarse de nuevo en la sala.

"Supongo que no quiere pasar todo su vida a mi lado, sabía que esto pasaría"

---Vlad---

-Vlad, por favor se mi pareja. –me sujeto de la cintura.
-John yo...
-¿Qué sientes por mí?

Me quede paralizado y desvié mi mirada.

-Nada. –mentí.
-Lo entiendo. –me soltó y sonrió a medias- Entonces no te molestare más.

Al terminar de decir aquellas palabras, John empezó a caminar, quería detenerlo y decir que lo amaba tanto pero algo me lo impedía y no sabía qué. Me quede estático, mis lágrimas empezaron a caer automáticamente, tengo mucha razón, yo no merezco su amor.

No soy apto para él, John merece a alguien más puro y bueno, no como a mí quien está marcado de por vida, quien lo señalan como sangre sucia por lo que paso con mi hermano, él merece ser feliz con una persona bondadosa.

John volteo por unos instantes y sus ojos se abrieron como platos.

-¿Vlad estás llorando?

Lo mire por un segundo y me eche a correr lo más rápido que pude en la dirección dónde se fue Delion. Sentí como me perseguí, y así era volteé por un segundo y venía detrás de mí.

-Vlad mi amor espera. –grito.

Sentí como unos brazos me recibían enfrente de mí.

-Tranquilo aquí estoy. –sonrió.
-Delion. –lo mire.
-Vlad. –jadeo John tras de mí- Tenemos que hablar.
-No tengo nada que hablar con usted sensei. –comente sin verlo.
-Ya lo oyó, no se preocupe yo cuidare de Vlad. –dijo Delion besándome la mejilla.
-Vlad por favor yo...
-Gracias por su compañía sensei pero ahora aceptare la invitación de Delion, así que con su permiso. –susurre.

Delion me tomo de la mano y me hizo un ademan para que entrará a su carro. No me atreví a mirar a John porque sabía que lloraría frente a él, me subí al carro de Delion y él enseguida que yo.

-¿Pasa algo entre ustedes? –pregunto luego de arrancar el carro.
-No. –conteste.
-¿Seguro? Es que parecía que te molestaba.
-Ya no lo hará más. –me mordí el labio.
-Cualquier cosa no dudes en pedírmelo.
-Gracias.

Yo mismo aleja a John, y fue lo mejor para los dos, así yo podré olvidar el amor que siento por él y John puede encontrar a una persona lo suficientemente apta para recibir todo aquel amor que tanto le profeso a Ryo, tal vez por mí solo sintió cariño o confundió lastima con amor, no lo sé, pero será mejor así...

---John---

En verdad no hay nadie más idiota que yo, cuando me dijo que no sentía nada por mí me di cuenta en ese instante que estaba mintiendo pero aun así solo le dije que lo entendía y que no lo molestaría más pero lo decía en sentido que por el día de hoy, no lo explique, ya cuando me dio por voltear lo vi llorando, me rompió tanto el corazón verlo triste.

Lo llame pero empezó a correr quise alcanzarlo pero no pude, él cayo a los brazos de ese idiota, Vlad entendió mal mis palabras, y ahora por mis estupideces se lo deje en bandeja de plata, ¿Cómo rayos me acercaré de nuevo a Vlad?

No quiero perder a la persona a la cual amo, no quiero, no puedo hacerlo, en verdad sin él no sé qué voy a hacer, quiero ganarme su corazón, quiero ser su fortaleza y brindarle toda mi compresión y todo mi amor...

Y apartar a las personas que lo lastiman, ya he regañado y castigado a todo aquel que se ha atrevido a comentar pestes de él, yo no voy a permitir que lastimen a mi amado...

Tengo que hablar con Vlad y aclarar todo, no pretendía lastimarlo, pero lo termine haciendo...

---Hiroki---

Llegue al departamento y encontré a Nowaki platicando con un chico rubio, cuando quería pasar desapercibido aquel chico clavo su mirada en mi haciendo que me estremeciera, y su sonrisa fue la que más me desconcertó...

"Se me hace tan familiar"

-Hiro-san, me alegra que hayas llegado. –comento Nowaki y me beso- Te presento a nuestro nuevo vecino.
-Mucho gusto soy Subaru Rei. –estiro su mano.
-El gusto es mío, yo soy Kamijou Hiroki. –estreche su mano.
-Me alegra conocer a mis nuevos vecinos. –comento aquel rubio.
-Sí, lo mismo digo. –sonrió Nowaki.
-Por lo que veo ustedes son pareja.
-Así es, de hecho estamos a pocos meses de casarnos. –comento Nowaki.
-Qué maravilla, muchas felicidades. –nos felicitó.
-Gracias. –dijimos al mismo tiempo.
-No me gustaría entretenerlos más, gracias por la compañía Kusama. –comento.
-Solo dígame Nowaki, y no se preocupe, cualquier cosa no dude en pedírnosla.
-En ese caso le vuelvo a agradecer su hospitalidad. –hizo una reverencia y entro en su departamento.

Me le quede mirando fijamente y antes de que cerrará su puerta me dedico una sonrisa.

"¿Por qué demonios se me hace tan familiar?"

-¿Hiro-san?
-Nani...
-Estás muy distraído, -comento mientras entrabamos al departamento y me acorralo en la pared- No me digas que te gusto el nuevo vecino.
-No digas tonterías. –lo regañe.
-Es que no dejabas de verlo. –resoplo.
-Claro. –dije sarcásticamente.

Él me beso apasionadamente y me abrazo de la cintura.

-Esta vez no te escaparas. –sonrió lujuriosamente y me beso.

---Miyagi---

Siento que cada acción que hago alejo más a mi terrorista, pero es que, yo quiero y deseo casarme con él pero ese día que me lo dijo me tomo desprevenido y lo rechace, solo porque sentí que mis planes se venían abajo en cuanto a mi planificación para pedírselo. Desde ese día ya no hablamos del tema porque él me evitaba, han sido pocas veces las que nos vemos...

Me dolió tanto que por culpa de mi estrés le hable tan mal a mi niño sin que él se lo mereciera, intente reparar el daño pero no me permitió hablar con él.

Lo vi salir de su habitación, y sinceramente me dejo boquiabierto al verlo. Traía puesto unos pantalones pegado y una camisa con botones, su cabello un poco alborotado.

-¿Shinobu?
-Regreso más tarde. –comento y camino hacia la puerta.
-Espero, -lo tome del brazo- ¿a dónde vas?
-Voy a vivir mi juventud, tú mismo me lo dijiste, que no desaprovechara nada.
-Sí pero...
-Lo siento Miyagi pero se me hace tarde, -se soltó de mi agarre- no me esperes a dormir.

Dijo al cruzar la puerta y dio un portazo.

¿Y ahora como arreglo esto?