C*9

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Narra NamJoon:

Supongo que alguna vez habré dicho que Jin era un absoluto antisocial, que no traía a ningún universitario o amiga y todo eso. Pero cuando le vi cruzar él umbral de la puerta de nuestra casa mirando y riéndose por lo que le decía un tipo, deseé que Jin siguiese siendo el maldito antisocial de siempre.

Era un chico rubio, alto y que no paraba de moverse de aquí para allá, y sobretodo muy sobón. Había llegado Jin cogido por su espalda y nada mas verme se acercó y me dio dos besos en mis mejillas.

¿Por qué y quién le daba derecho a tener semejante confianza conmigo? Su nombre, Tae Yang, me provocaba arcadas cada vez que lo oía y porque sí, había tenido que escucharlo varias veces por el simple hecho de que estaba "haciendo un trabajo" con Jin.

¿Desde cuando la medicina es tan divertida que se pasan la tarde entera riéndose en la habitación de Jin?

Y mientras pienso en lo mucho que aborrezco su nombre, va y el maldito Jin lo repite.

-NamJoon ahora en dos minutos va a venir Tae Yang para acabar el trabajo. Por favor no la líes- me advirtió mientras me señalaba con el dedo acusador.

Puse mi cara más inocente mientras contestaba:

-¿Yo? -toqueteé mi mejilla infantilmente- ¿que voy a hacer? Soy un angelito.

-Sí, claro, caído del infierno...

Sin poder continuar llamaron al timbre y Jin gritó:

-Ya voy.

Involuntariamente, un gruñido salió de mi garganta y me gané, una vez más, una mirada amenazante de Jin. Al parecer se había vuelto un experto, por lo menos conmigo.

Escuché sus voces en la entrada y en menos de 5 segundos ya estaban en mi salón.

-NamJoon tío, cuánto tiempo- dijo sarcástico.

Por cierto, odio su sarcasmo. No me mola para nada.

-Viniste ayer, y ante ayer, y al anterior también...

-¿Si? Tu casa es bien cómoda entonces, me siento como en casa. Justo hoy que acabamos en trabajo- dijo y yo no pude evitar mi sonrisa de oreja a oreja.

-¡¡¡¡Poooor finnnn!!!!- pensé.

-¡Cuánto me quiere este chico! - dijo Tae Yang, sarcásticamente de nuevo.

Ups, ¿lo dije en alto?

-No sabes tú cuánto- gruñí mientras masticaba un trozo de pizza precalentada que acababa de meter Jin en el microndas.

-Eey era para...-gritó Jin mientras me miraba más que furioso, amo enojar a este chico- mira, no tienes remedio imbécil.

-En el fondo, sabes que la habías metido en el microondas para mí, mamá Jin- dije mientras batía mis pestañas y le daba otro mordisco.

Jin abrió la boca ligeramente y... Oh santísima madre de la purísima concepción, me entraron unas ganas locas de besarlo, una y tantas veces pueda aguantar su boca. Con sus labios tan gruesos y...

-Vaya, al parecer alguien está babeando- dijo Tae Yang mientras se reía de mi careto.

Gilipollas, rodé los ojos mientras vi como ambos subían las escaleras, también tenia un buen culo.

Narra Jin:

Ahora mismo, detesto la universidad, ayer acabé él trabajo que hacía con Tae Yang y para celebrarlo NamJoon iba a invitarme a cenar hoy y por culpa de los malditos exámenes y pruebas había tenido que decirle que no.

Mamá- NamJinWhere stories live. Discover now